Para un virus como el H1N1, causante de la pandemia de gripe de 2009,
Madrid está más cerca de Londres de lo que dicen los mapas.
Investigadores alemanes han diseñado un modelo matemático que sustituye
la distancia geográfica por una basada en el tamaño de las ciudades y la
frecuencia de sus vuelos. El programa predice así el origen y la
expansión de una enfermedad.
Los autores del estudio, publicado
esta semana en la revista Science, han considerado los caminos más
probables que seguirían los virus dentro de la red de vuelos de todo el
mundo.
Estos expertos basan su modelo, que explica la dinámica
global de expansión de de enfermedades, en la idea de que en un mundo
tan conectado como el actual, las distancias geográficas ya no pueden
ser la base de los patrones de expansión de los virus.
“El método
sirve para fenómenos contagiosos que se propagan a través de una red,
entre ellos las enfermedades altamente infecciosas”, indica a SINC Dirk
Brockmann, uno de los autores del trabajo e investigador de la
Universidad de Humboldt en Berlín (Alemania).
Así, esta teoría
computacional puede encontrar los lugares donde llegará una epidemia en
primer lugar o la velocidad con la que lo hará, sin tener en cuenta las
características particulares del patógeno que la provoca.
Simulación del mundo según el modelo matemático, con la ciudad de Madrid como referencia. (Foto: Dirk Brockmann)
“Hay
patrones que se pueden predecir sin el conocimiento de parámetros
específicos como la tasa de infección y la de recuperación”, señala
Brockmann. Aunque la velocidad de propagación depende de estas
variables, la forma en que el contagio se distribuye por una red es
siempre el mismo.
Los ensayos han permitido simular adecuadamente
la dinámica seguida por el virus de la gripe H1N1 en 2009 o el Síndrome
Respiratorio Agudo Severo (SARS, en sus siglas en inglés), otra
enfermedad vírica que causó estragos en 2003.
“Consideremos tres lugares como Madrid, Londres y una ciudad española
más pequeña con un aeropuerto que conecta con Madrid, por ejemplo,
Málaga –explica el investigador alemán–. Con un mismo número de
madrileños infectados, habrá una mayor cantidad de ellos que viajen a
Londres, por lo que la capital británica está más cerca, aunque aparezca
lejos en el mapa”.
“En otras palabras, si una infección comienza
en un lugar remoto, alcanzará rápidamente las principales ciudades
–continúa Brockmann–. Sin embargo, si se inicia en una gran población
llegará rápidamente a otras localizaciones importantes, pero no
necesariamente a sitios remotos”.
Los autores indican que el
modelo y la simulación matemática que han diseñado pueden utilizarse
para adelantarse a las consecuencias de una enfermedad y frenar así su
avance.
“En el futuro, esperamos que nuestro método pueda
mejorar los que ya existen para predecir la propagación de una
enfermedad y ayudar a entender otros fenómenos como la expansión de
virus informáticos o la transmisión de información”, concluye el
científico. (Fuente: SINC)
Tomado de:
NCYT