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1 de octubre de 2013

¿Por qué debemos querer a los buitres?

Buitre de El Cabo

Los buitres africanos son víctimas inesperadas de la caza furtiva de rinocerontes. 

No son las criaturas más entrañables del mundo: alimentarse de animales muertos no atrae muchos fans entre los humanos. Pero ahora un proyecto en Sudáfrica busca cambiar la imagen de estas aves en peligro.

Decenas de buitres de El Cabo surcan el cielo sudafricano, desde lo alto de los acantilados de Magaliesberg, y vigilan una pradera seca en busca de un banquete.
Bajo el sol yace un cadáver rodeado de moscas, cuervos y garzas. Una hembra valiente se acerca con cautela.

Buitre

La población de buitres en África occidental ha disminuido en un 90%.

Se mueve despacio, atenta a los peligros. Llegar hasta su presa le lleva más de una hora.

Pero una vez que da un primer picotazo a la carne, los demás se abalanzan. Lo que sigue es un festín frenético, y cada buitre empuja para obtener suficiente comida para sí mismo y para los polluelos que esperan en el nido.

Estamos en VulPro, a las afueras de Haartebeesport, a una hora de la capital, Johanesburgo.

Es un centro dedicado a la conservación de una especie cuya fama no es precisamente la del animal más adorable.

Pero Kerri Wolter, quien dirige esta organización, cree que el papel que juegan los buitres en la naturaleza es crucial: limpiar y hacer desaparecer la carne portadora de enfermedades.

"Tenemos que elevar el perfil de los buitres al mismo nivel de los rinocerontes, tenemos que hacer que la gente entienda que son importantes".

Víctimas de la caza furtiva

Esta especie de buitres figura como "vulnerable" en la Lista Roja de Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, por sus siglas en inglés).

Y quienes trabajan aquí para protegerla temen que pronto se una al buitre dorsiblanco africano, que está en peligro de extinción.

Pichón de buitre

Un proyecto de conervación busca cambiar la imagen de los buitres.

La IUCN ha observado un declive de 1.500 parejas de buitres de El Cabo en los últimos 20 años.

Ahora solo se encuentran en Botsuana y Sudáfrica, y recientemente se extinguieron en Namibia.

Entre las amenazas que los acechan están las electrocuciones y choques con estructuras eléctricas, los cambios del uso del área en la que viven, la disminución del alimento disponible y la exposición a drogas veterinarias tóxicas.

Cadáver de rinoceronte

Con cada rinoceronte envenenado, pueden morir unos 1.200 buitres.

Pero el peor de los peligros es más siniestro.

La caza furtiva de rinocerontes y elefantes aumenta cada año en el sur de África – más de 600 rinocerontes sudafricanos fueron cazados este año – y los buitres son sus víctimas inesperadas.

Como los cazadores clandestinos no quieren que los buitres llamen la atención de los guardas, algunos comenzaron a envenenar los cuerpos de los animales que acaban de matar por sus cuernos o colmillos.

"Con un rinoceronte o un elefante envenenado se puede acabar con 600 buitres", dice Wolter.

"Sin embargo, durante la temporada de crianza, no son solo los 600 buitres que consumen ese cuerpo. También pueden ser sus crías".

"Así que estamos hablando de 1.200 aves en un incidente de envenenamiento".

La amenaza, agrega, no es sólo para los buitres.

El artículo completo en:

BBC CIENCIA

28 de agosto de 2013

La vuelta a la vida después de una extinción masiva

Reconstrucción de 'Dicynodon lacerticeps', que vivió durante el Pérmico.| Marlene Donnelly.
Reconstrucción de 'Dicynodon lacerticeps', que vivió durante el Pérmico.| Marlene Donnelly.
  • Un estudio concluye que las especies que sobreviven a una extinción masiva muestran una gran variedad de respuestas y evolucionan de manera distinta
  • Se analizó cómo se adaptaron los anomodontos, un linaje de reptiles de gran tamaño que sobrevivieron a la mayor extinción masiva de la Historia
Hace 252 millones de años, al final del periodo Pérmico, se produjo la mayor extinción que ha sufrido la Tierra. Aunque se desconocen las causas concretas que la causaron, los científicos creen que desaparecieron el 90% de las especies marinas y el 70% de las terrestres.

¿Qué ocurrió con los animales que sobrevivieron a aquella extinción masiva? ¿Cómo evolucionaron y se adaptaron a las nuevas condiciones ambientales tras esta hecatombe biológica? Una investigación publicada esta semana en 'Proceedings of the Royal Society B' intenta responder a estos interrogantes examinando los fósiles disponibles de los anomodontos.

Se trata de un linaje de los terápsidos (reptiles de los que se cree que descienden los mamíferos), de gran tamaño y herbívoros en su mayoría, que lograron sobrevivir a la extinción masiva del Pérmico. No obstante, y pese a que llegaron a ser muy abundantes en amplias zonas del planeta, también terminaron por desaparecer, a finales del Triásico, millones de años después de aquel evento catastrófico.

Los fósiles de anomodontos, dicen los paleontólogos, son ideales para realizar investigaciones sobre la evolución de especies, pues son abundantes, muy diversos y han sido bien estudiados. "El mejor registro de fósiles de anomodontos procede de los depósitos de Karoo, en Sudáfrica, donde se han encontrado unas 1.500 especímenes de anomodontos (desde huesos aislados a esqueletos completos). También fueron abundantes en algunas zonas de Brasil, Tanzania y Zambia, aunque se han encontrado fósiles de estas criaturas en todos los continentes", explica a ELMUNDO.es Kenneth Angielczyk, investigador del Museo de Historia Natural Field de Chicago.

Oportunidades tras una extinción

Hasta ahora, los trabajos realizados sobre este tema sugerían que las extinciones masivas ofrecían nuevas oportunidades y ventajas a los seres vivos que lograban sobrevivir. Y es que la pérdida de muchas especies en sus comunidades les permitía desarrollar nuevos estilos de vida y evolucionar anatómicamente para ocupar los 'papeles' que habían quedado vacantes con su desaparición.

Sin embargo, según sostiene este nuevo trabajo, no todos los supervivientes responden de la misma forma y algunos no fueron capaces de sacar provecho de las oportunidades que se les presentaban tras la extinción masiva. Marcello Ruta, investigador de la Universidad de Lincoln, y su equipo afirman que en la anatomía de los anomodontos no se produjeron muchos cambios mientras el número de especies volvía a aumentar durante el periodo de recuperación.

Poco antes del fin del Pérmico, había una gran cantidad de especies de anomodontos que presentaban una gran variedad de tamaños y adaptaciones ecológicas: había herbívoros terrestres, especies anfibias, animales que vivían en madrigueras o incluso en los árboles, según este estudio. "El grupo más exitoso de anomodontos [los dicinodontos] tenían colmillos parecidos a los caninos en su mandíbula superior y un pico como el de las tortugas, y fueron los herbívoros terrestres más importantes de su época", señala Angielczyk.

Evolución de varias especies de anomodontos halladas en Rusia, Zambia y Sudáfrica. | Museo de Historia Natural Field.

Evolución de varias especies de anomodontos halladas en Rusia, Zambia y Sudáfrica. | Museo de Historia Natural Field.

Cada especie evoluciona de forma distinta

Para este estudio, detalla Angielczyk, han utilizado una base de datos que incluye a 87 especies de anomodontos: "Una reciente recopilación incluía 128 especies, aunque esa cifra ha cambiado un poco tras varias revisiones taxonómicas", explica.

Los registros fósiles disponibles han permitido a los paleontólogos determinar cómo evolucionó el número de especies de anomodontos: aumentó durante el Pérmico, disminuyó de forma drástica durante la extinción masiva que se produjo al final de ese periodo, volvió a aumentar durante el Triásico Medio (hace unos 240 millones de años) hasta que terminaron por extinguirse, al final del Triásico.

Pese a ello, sostiene este estudio, la variedad de rasgos anatómicos que han encontrado en los ejemplares desenterrados, (su diversidad anatómica o disparidad morfológica) fue disminuyendo de manera constante. Incluso en el periodo inmediatamente posterior a la extinción masiva, cuando debía haber grandes extensiones de espacio ecológico vacías, no surgió en los anomodontos ninguna nueva característica anatómica fundamental: "Esto sugiere que el cuello de botella evolutivo que sufrieron durante la extinción limitó su evolución durante el periodo de recuperación", señala Marcello Ruta en una nota de prensa.

Según recuerda el científico, se suele considerar que los grupos de organismos que sobreviven a una extinción masiva pasan por un periodo evolutivo 'de cuello de botella', es decir, su población se vuelve más homogénea y hay poca diversidad. El proceso, compara, sería análogo al "cuello de botella" genético que puede ocurrir en una población en la que muchos de sus miembros han muerto. En ocasiones, señala, propicia un nuevo proceso evolutivo del grupo, pero en otras lo contiene.

¿Qué causó la extincón masiva del Permico

Kenneth Angielczyk apunta, no obstante, que todavía hay controversia sobre el periodo en que desaparecieron estos animales de la Tierra: "Los fósiles más jóvenes que pertenecen sin duda a anomodontos tienen unos 208 millones de años y se encontraron en Polonia. Además, se han hallado restos del Cretácico temprano (hace unos 110 millones de años) en Australia. Se trata de especímenes que muestran similitudes con los anomodontos, y así han sido registrados en la literatura, pero su análisis no se ha completado. Sería extremadamente interesante si los anomodontos hubieran sobrevivido durante el Cretácico, aunque hace falta más material para dar esto por cierto", explica.

Por lo que respecta a la causa que propició la extinción masiva del Pérmico, el investigador afirma que es útil diferenciar entre la causa última y las causas próximas. "Las causas últimas serían el fenómeno o los fenómenos que provocaron la crisis globalmente, y podrían ser las erupciones volcánicas masivas que ocurrieron en Siberia en aquella época o el impacto de un asteroide. Qué fenómeno lo provocó sigue siendo objeto de debate, aunque parece que la erupciones volcánicas de Siberia probablemente fueron las que causaron la extinción en parte", afirma. A este fenómeno se unirían otras causas próximas, como el rápido calentamiento global que tuvo lugar durante el Pérmico, cambios en la química de los océanos y en los patrones de circulación, y posiblemente cambios en los niveles de oxígeno de la atmósfera.

¿Se puede hacer algún pararelismo entre lo que ocurrió hace 250 millones de años y la progresiva extinción de especies que se está produciendo en nuestros días, muchas de ellas antes de ser descritas por el hombre? "Los resultados [de este estudio] ponen de relieve que las recuperaciones tras una extinción masiva pueden ser impredecibles, un hallazgo que tiene importantes implicaciones para la extinción de especies causada por la actividad humana hoy en día. No podemos asumir que la vida volverá a renacer cómo era antes de que se interrumpiera", advierte Michael Benton, coautor del estudio.

Fuente:

El Mundo Ciencia

18 de agosto de 2013

Estos son los idiomas en peligro de extinción


Mapa interactivo de los idiomas actuales en peligro de extinción del proyecto "Endangered Languages Project", proyecto online para registrar, acceder y compartir muestras e investigaciones acerca de estos idiomas (para ver el mapa pulsar en "empezar a explorar").

Acerca del proyecto: www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=Bn2QbwcjmOI

Vea:

Idiomas en peligro de extinción

7 de junio de 2013

La deforestación en la selva del Amazonas se acelera


Tucán

Los científicos creen que la pérdida de aves grandes, como el tucán, provocó el empequeñecimiento de las semillas. 

La destrucción de los bosques tropicales está teniendo un impacto sobre el medio ambiente mayor de lo que se pensaba, según un estudio.

Un equipo científico descubrió que la deforestación en Brasil hizo que en apenas un periodo de 100 años un tipo de palmeras produjera semillas más pequeñas, más débiles y con menos probabilidades de regenerar a su especie.
Los investigadores creen que este cambio evolutivo fue desencadenado por la pérdida de grandes aves en ciertas partes de la selva. Estas aves tenían un pico lo suficientemente ancho como para alimentarse de las semillas grandes y dispersarlas.

El estudio fue publicado por la revista especializada Science.

"Una de las cosas que más nos sorprendieron fue la rapidez con la que la deforestación pudo influenciar no sólo la pérdida de la fauna sino también la evolución de las características de las plantas, en apenas varias generaciones", le dijo a la BBC Pedro Jordano, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España (CSIC) y uno de los investigadores del estudio, en cooperación con la Universidade Estadual Paulista de Sao Paulo, en Brasil.

Aves pequeñas, semillas pequeñas

El bosque del litoral atlántico brasileño albergó en su momento una vasta gama de plantas y animales.

Pero la llegada de las grandes plantaciones de azúcar y café a principios del siglo XIX tuvo un gran impacto sobre esa diversidad.

Frutos de distintos tamaño de la Euterpe Edulis

Los frutos de la palmera Euterpe Edulis son visiblemente más pequeños en las zonas de los bosques afectadas por la deforestación. 

Se estima que hoy sólo queda un 12% de los bosques originales.

Para medir ese impacto, el equipo científico internacional que participó en el estudio examinó más de 9.000 semillas recolectadas de palmeras repartidas por la selva.

Y descubrieron que aquellas semillas tomadas de las áreas que habían sufrido una mayor destrucción eran mucho más pequeñas que las semillas recogidas en zonas intactas de la selva.

Los investigadores tuvieron en cuenta varios factores que podrían haber contribuido a esa reducción del tamaño, como el clima o la fertilidad del suelo.

"Pero no encontramos evidencias de que estos factores pudiern tener un impacto así", explicó el profesor Jordano.

"El principal factor fue la desaparición de las grandes especies frugívoras (que comen frutos)", dijo.

Normalmente, especies de picos grandes como el tucán o la continga al comer los frutos de las plantas las van esparciendo por el bosque tropical.

Pero a medida que la deforestación avanzó en la selva estas aves fueron desapareciendo, quedando sólo pájaros más pequeños, como el tordo o zorzal.

Pero estas especies de picos más pequeños no pueden transportar los grandes frutos.
Por eso las palmeras evolucionaron para la producción de frutos más pequeños, que tendrían más probabilidades de ser dispersados por las aves acordes.

Pero los investigadores descubrieron que además, estas nuevas semillas más pequeñas son también más débiles.

"Desafortunadamente el tamaño más pequeño también involucra una menor probabilidad de recolección exitosa", dijo Jordano.

"Estas semillas más pequeñas tienen menos probabilidad de germinar, tienen más probabilidad de fracaso por desecación y es más fácil que caigan víctimas de un ataque fúngico", explicó.

El efecto del cambio climático

Tordo de patas amarillas con una semilla en el pico

Las semillas más pequeñas son más fáciles de transportar para aves pequeñas como el tordo o zorzal.

Otro aspecto que destaca Jordano es que el cambio climático podría empeorar aún más la probabilidad de supervivencia de estas semillas más pequeñas, ya que las proyecciones de los expertos auguran una selva tropical más cálida y seca.

Los investigadores de este estudio creen que estos resultados posiblemente no se limiten al territorio analizado.

"Realmente, lo que nosotros estamos documentando puede estarle pasando también a muchas otras especies de árboles", señaló Jordano.

"Desafortunadamente también debe ser común en otras áreas tropicales del mundo, donde los grandes tucanes, tapires, monos y otros grandes mamíferos y aves están desapareciendo muy rápidamente", concluyó.

Fuente:

BBC Ciencia

1 de junio de 2013

Los secretos de los gigantes de la Edad del Hielo

Dientes de sables

Hace 80.000 años, la Tierra comenzó a enfriarse en lo que supuso el inicio de la última Edad del Hielo.

Los científicos están descubriendo los secretos de las bestias gigantes de la Edad del Hielo rebuscando en la tierra que se recolectó en las excavaciones de la construcción de un estacionamiento en el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles.
En 2006, después de que unos obreros encontraron el esqueleto casi completo de un mamut lanudo, se construyeron cajas de madera en torno a los depósitos de tierra.

Así se salvaguardaron los restos para entregárselos a los científicos del cercano Museo Page.

Laura Tewksbury

Laura Tewksbury lleva un año trabajando en las excavaciones.

Los 23 cráteres, cada uno con su propio paleontólogo residente, y 327 cubos de material fósil están brindando descubrimientos cruciales. Se espera que el trabajo tardará años en completarse.

Más de tres millones de fósiles prehistóricos de 600 especies han sido encontrados en las canteras de brea de California, cuya tierra milenaria preserva restos de las criaturas.

En el apogeo de la Edad del Hielo, la mitad de Norteamérica estaba cubierta por una enorme capa de hielo, pero las tierras del sur se hicieron más ricas que nunca antes. Conozca a las bestias gigantes que la habitaban:

Felino de dientes de sable

Pese a la notoriedad de los colmillos de 18 centímetros del felino de dientes de sable, puede ser que en realidad fueran sus musculosas extremidades inferiores y sus grandes garras las que lo hacían más mortífero.

Los largos y finos dientes del infame depredador eran sorprendentemente vulnerables y podían quebrarse al quedarse atrapados en los tendones o huesos de sus víctimas.

Eso le forzó a desarrollar una técnica de caza única.

Dientes de Sable

Los dientes de este felino eran más vulnerables de lo que aparentaban.

Los grandes felinos modernos de África, como los leones, suelen matar a sus víctimas mediante el sofoco, asfixiándolos o rompiéndoles la tráquea. Sus dientes apenas rompen la piel.

Pero su predecesor de la Edad de Hielo mataba clavando sus dientes y mordiendo después de haber inmovilizado a sus víctimas con sus poderosas garras y extremidades.

Blaire Van Valkenburgh, de la Universidad de California, descubrió que el felino de dientes de sable tenía un enorme hueso temporal que unía a la mandíbula con el cráneo y le permitía abrir su boca el doble que el león y morder con mucha fuerza la garganta de su víctima.

"Después se echaban para atrás y podían sacar grandes cantidades de carne", explica la científica.

"Probablemente el animal se desangraba en cuestión de minutos", añade.

El felino de dientes de sable prosperó en América del Norte en la Edad del Hielo. Se han encontrado variós especímenes en lo que hoy es Los Ángeles.

Perezoso de Shasta

Perezoso de Shasta

El perezoso de Shasta habitaba el Gran Cañón en la Edad del Hielo.

Los científicos han utilizado el estiércol perfectamente conservado del perezoso gigante de Shasta para rastrear sus movimientos por la tierra desértica del Gran Cañón.

En las cavernas que le servían de guarida a estos animales en lo alto del cañón, todavía se pueden encontrar enormes montones de residuos, gracias a que el clima en esos lugares es demasiado seco para que se descompongan.

El estiércol revela cómo estos animales de más de 220 kilos de peso sobrevivieron en arduas condiciones, masticando plantas duras que otras criaturas no habrían podido digerir.

Sus primos modernos, los perezosos de árbol de América del Sur vive de manera similar. Comen hojas duras y tóxicas que les toma semanas digerir y le proporciona poca energía, lo que le conduce al estilo de vida lento por el que es conocido.

Además de ser tan grande como un oso grizzly (una especie de oso pardo que vive actualmente en Norteamérica), el perezoso terrestre tenía largas garras para ahuyentar a los depredadores que eran tan formidables como las del felino de dientes de sable.

Los científicos analizaron las capas de estiércol para explicar la desaparición del perezoso terrestre.

Los últimos rastros de sus excrementos provienen del apogeo de la última Edad de Hielo, hace 16.000 años. En ese entonces, las condiciones se tornaron demasiado frías y demasiado secas para que sus plantas favoritas pudieran crecer y su metabolismo lento hizo que le quedara muy difícil mantener el calor.

Gliptodonte

Gliptodóntido

El gliptodonte podía nadar y comía plantas acuáticas. 

Del tamaño de un auto pequeño y equipado con un caparazón óseo enorme, una cola acorazada y un tronco, el gliptodonte es para la profesora Alice Roberts "de lejos, el mamífero más extraño" que ha visto en su vida.

Pero además de ser un espectáculo para los investigadores, proporciona datos sobre la vida en aquellas partes del mundo que no eran secas y frías durante la Edad de Hielo.

Grandes áreas de Arizona, donde el gliptodonte vagaba, estaban cubiertas de pantanos y ríos.

En los últimos 2,5 millones de años, ha habido cerca de 20 períodos glaciales y la proliferación del gliptodonte reflejaba el impacto del avance de la capa de hielo en el resto del mundo.

Los pantanos se expandían cada vez que la capa de hielo crecía, lo que llevaba a un aumento en el número de gliptodontes, los que morían conforme el hielo se empezaba a retirar.

Los científicos creen que una placa de hielo de más de tres kilómetros de alto en América del Norte actuaba como una cadena montañosa que empujaba vientos húmedos a través del desierto creando un pantano fértil.

Mamut de Columbia

mamut de columbia

Los mamuts dejaron sus huellas en la actual San Francisco. 

El mamut de Columbia o mamut colombino era el mayor de todos los gigantes de la Edad de Hielo.

Con una altura de 4,27 metros, se habría erguido como una torre sobre el elefante moderno, y se alzaba más de un metro más alto que el mamut lanudo.

Consumía hasta dos toneladas de hierba a la semana, por lo que cuando el hielo reemplazaba al agua de mar, el mamut colombino vagaba en busca de la vegetación.

El nivel del mar global en la Edad del Hielo era unos 120 metros más bajo que el actual.

Grandes rocas costeras al norte de San Francisco le han proporcionado a los científicos pistas vitales acerca de los movimientos del mamut.

Las rocas se desgastaron hasta tener un acabado liso, pulido y con parches que alcanzan varios metros de altura.

Los científicos creen que los mamuts utilizaban las piedras para exfoliar la piel y deshacerse de los parásitos, por lo que dejaron un rastro de su viaje por el mundo en la Edad de Hielo.
Tomado de:
BBC Ciencia

11 de abril de 2013

Los dinosaurios nadadores de China

Recreación artística del dinosaurio nadador. | Nathan E. Rogers

Recreación artística del dinosaurio nadador. | Nathan E. Rogers

Un investigador de la Universidad de Alberta (Canadá) ha identificado algunas de las pruebas más concluyentes hasta la fecha de que los dinosaurios podían recorrer nadando largas distancias.

En colaboración con un equipo internacional de investigación, el estudiante de graduado Scott Persons examinó marcas inusuales de garras registradas en un fondo de río en China, que es conocido por haber sido una ruta importante para los dinosaurios.

Junto a huellas fosilizadas de fácil identificación de muchos animales del Cretácico, incluyendo un largo y gigante cuello de dinosaurio, los investigadores encontraron una serie de marcas de garras que Persons considera la prueba de una progresión coordinada izquierda derecha y derecha a izquierda.

"Lo que tenemos son los arañazos dejados por las puntas de los pezuñas de un dinosaurio de dos patas", dijo Persons. "Las marcas de la garra del dinosaurio muestran que estaba nadando en este río, y que de puntillas estuviera tocando fondo".

Las marcas de garras cubren una distancia de 15 metros, que los investigadores dicen que es una prueba de la capacidad de un dinosaurio de nadar con movimientos coordinados de sus patas. Las huellas fueron hechas por dinosaurios terópodos carnívoros que se estima que se levantaban a alrededor de un metro hasta la cádera.

La ondulación fosilizada y la evidencia de grietas de desecación indican que hace 100 millones de años, el río, en lo que hoy es la provincia de Sichuan, registró ciclos secos y húmedos. El lecho del río que Persons describe como una autopista para dinosaurios ha proporcionado un montón de impresiones a todo pie de otros terópodos y saurópodos gigantes de cuatro patas.

Con sólo arañazos de garras en el fondo del río, la identidad exacta de los dinosaurios no se puede determinar, pero se sospecha que podría haber sido un tiranosaurio pequeño o un Sinocalliopteryx. Se conocen dos especies de depredadores que han estado en esa área de China
Fuente:

21 de marzo de 2013

¿Qué diferencias hay entre un mamut y un mastodonte?


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Aunque los mamuts y los mastodontes, los grandes titanes de la Era del Hielo, fueron parientes muy cercanos, no forman parte de la misma especie. A pesar de sus grandes similitudes y el hecho de que, en algún momento, supieron caminar juntos sobre la faz de la Tierra, cada una contaba con diferentes características que los distinguían. Te invito a que conozcamos las interesantes diferencias que hay entre un mamut y un mastodonte.

Mamuts y mastodontes: los titanes de la Era del Hielo

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Ambas especies constituyen diferentes ejemplos de Proboscidios, mamíferos placentarios penungulados (casi ungulados), muy similares a los elefantes de nuestros días, la única familia de dicho orden que no está extinta en la actualidad. Las tres especies de Elephantidae que existen son los elefantes africanos (de la sabana y de bosque) y los elefantes asiáticos, uno de los animales más grandes del mundo. Pero nuestros protagonistas, los mamuts y los mastodontes, se han extinto hace ya unos 10.000 años, luego de haber vagado por la Tierra unos 1.8 millones de años antes de su desaparición.

Para aquel entonces, en plena Era del Hielo, estos seres colosales podían encontrarse en las gélidas tierras de diversas zonas de Europa, Asia y América del Norte, tiempos muy duros en los que, según los expertos, desde los más gigantescos mamuts a los más inmensos mastodontes, debían convivir y muchas veces enfrentarse en casi épicas batallas contra temibles osos gigantes o feroces tigres dientes de sable y, aunque los científicos no están absolutamente seguros de ello, quizás a las primeras armas peligrosas y herramientas de los primeros Hombres. Mediante al árduo trabajo científico en excavaciones, análisis y complejos pronósticos, varias diferencias entre las dos especies suelen mencionarse, de hecho, hasta se cree que esas diferencias tuvieron mucho que ver en la extinción de estos maravillosos titanes.

Diferencias entre el mamut y el mastodonte

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(Ilustración de la estructura ósea de un mamut)

Se cree que los mamuts, del género Mammuthus, surgió hace aproximadamente unos 5.1 millones de años atrás sobre el salvaje suelo del continente negro africano. Así lo afirma el doctor Ross MacPhee de la Universidad de Alberta, miembro y conservador del Museo Americano de Historia Natural de EEUU, quien además señala que desde África, los mamuts migraron a lo largo de Eurasia y desde allí a las tierras del norte de América. Durante millones de años de compleja evolución, la especie consolidó al mamut lanudo, el M. primigenius, el cual surgió cerca de unos 250.000 años atrás.

Con el fin de la última glaciación o Era del Hielo, hace unos 10.000 años atrás, el último ejemplar de la especie también desapareció. No obstante, cabe señalar que los científicos creen que una población mínima de estos animales lograron mantenerse con vida hasta incluso unos 3.700 años atrás, en una inhóspita isla de la costa nororiental de la congelada Siberia. Hoy, los miembros de la familia de los Elephantidae son los parientes más cercanos que se conocen. Por otro lado, los mastodontes surgieron mucho tiempo antes que los mamuts, más precisamente entre unos 27 y 20 millones de años atrás.

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(Ilustración de la estructura ósea de un mastodonte)

Ellos vivían en algunas América del Norte y en algunas zonas de América Central. Al igual que sus parientes cercanos los mamuts, comenzaron a desaparecer hace unos 12.000 años y unos 2000 después, prácticamente no quedaba ninguno con vida. Aunque hay científicos que creen que los primeros Hombres incidieron en la extinción de ambas especies, factores como el cambio climático y las variaciones en los hábitats fueron los más incisivos en su desaparición.

Aunque los fósiles de cada una muestran muchas similitudes, los mamuts eran ligeramente más grandes que los mastodontes, éstos últimos tenían piernas más cortas y más bajas y además, cabezas más aplanadas que los mamuts. Cada especie tenía entre unos 2 y 4 metros de largo, estaban cubiertas de un espeso pelaje largo y desgreñado, ideal para protegerlos contra las terribles condiciones climáticas. Una de las diferencias entre mamuts y mastodontes refiere a su alimentación. Aunque ambos eran herbívoros, los mamuts (que tenían una joroba especial de grasa en la espalda para guardar nutrientes adicionales) tenían molares simples que les permitía comer vegetación como hierbas y pasto, muy similar a los elefantes de hoy. Por otro lado, los mastodontes tenían molares más especializados que les hacía capaces de destruir ramas, troncos, hojas y demás.

Interesante, ¿verdad? ¿Qué otras diferencias entre estas especies conoces?

Tomado de:

Ojo Científico

19 de marzo de 2013

El karachi, mauri y suche del Titicaca, en peligro de extinción

Lago. El cambio climático y pesca indiscriminada son las causas

Info peces peligro.

Info peces peligro.

El karachi, mauri y el suche son tres especies en peligro de desaparecer en el lago Titicaca, ubicado en La Paz. Las causas son la pesca indiscriminada en el lugar y los cambios climáticos que elevan las temperaturas del agua, informó la Gobernación. 

“En los últimos cinco años, las especies del lago han sufrido una disminución debido a la sobrepesca, contaminación del lago por parte de las poblaciones aledañas y por la influencia de los cambios climáticos. Actualmente el suche, el mauri y los karachis están en peligro de extinción”, expresó el jefe de la Unidad de Pesca y Acuicultura, Sabas Fernández.

Explicó que gran parte de la población de las comunidades ribereñas del Titicaca se dedica a la pesca, siendo ésta su principal fuente de ingreso, pero dicha actividad deriva muchas veces en la exagerada extracción de especies. 

Un diagnóstico realizado por la Gobernación, sobre la cantidad de pescados extraídos en las cinco provincias circundantes al lago; Ingavi, Los Andes, Omasuyos, Camacho y Manco Kápac, señala que existe un promedio de 18.425 kilogramos de peces sacados por día, equivalente a 114 kg de suche, 175 kg de mauri y 130 kg unidades de karachi.

En cuanto al cambio climático, Fernández explicó que la temperatura habitual del Titicaca oscila entre los 14 y 16ºC; sin embargo, dicho fenómeno climático se eleva a 20 y 22ºC, lo que causa daños a los peces dentro del agua.    

El mauri y el suche tienen su hábitat también en lagunas y ríos del occidente del país, pero los dos tipos de karachi, amarillo y gris, sólo viven en el lago; por ello Fernández resaltó la importancia de asumir acciones para evitar que dichas especies terminen como el boga y el humanto, dos peces extintos desde 1990.
Acciones. “Ahora se debe trabajar en la recuperación de estos peces, una opción es la reproducción artificial para poblar de especies en peligro de extinción al lago Titicaca. En la Gobernación empezamos ese trabajo con el mauri y el karachi”, indicó Fernández.
 
En el marco de un proyecto de la Gobernación, a finales de 2012 se capacitó a 444 pesqueros en temas de repoblamiento de especies nativas y se liberó más de 300 mil alevines, que son las crías recién nacidas de peces. Las acciones continuarán hasta 2015. Por otra parte, la Autoridad del Lago Titicaca (ATL) también realiza la misma acción pero con más especies del lago, ante la amenaza de la extinción.

Plantean veda en el lago por medio de un decreto

La veda en ciertas épocas del año, establecida por un decreto, es lo que plantean la Gobernación y la ATL para frenar la pesca indiscriminada en el Titicaca. “Se trabajó la propuesta de un decreto departamental sobre ordenación y administración pesquera, que actualmente está en proceso de consenso con la Federación Departamental de Pesqueros de La Paz”, informó Fernández.

Agregó que dicha norma plantea la veda, la prohibición de métodos de pesca, acopio y venta de especies de la cuenca del lago Titicaca, de La Paz.

La ATL también propone acciones, pero por medio de una norma única para el lago, que consisten principalmente en la veda a la pesca en determinados periodos del año. Además del peligro de extinción de especies, el lago Titicaca sufre otros efectos causados por el cambio climático, como el aumento de sus aguas, sobre parámetros habituales.

La Razón publicó el 23 de febrero que las aguas del lago crecieron en 15 centímetros (cm), según el informe del Servicio Nacional de Hidrografía Naval. Esta última institución prevé que este año se registrarán los niveles más altos de crecimiento de las aguas del lago, presentados en los últimos cuatro años.
 
Fuente:
 

18 de marzo de 2013

México: La brusca y peligrosa caída de la población de mariposas monarca

Mariposa Monarca

Naranja con rayas negras y pintas blancas, típicas de películas y favoritas de niños y adultos a la hora de cazar insectos en un paseo por el campo.

Las mariposas monarca se han ganado su espacio en la retina de los habitantes del continente americano.
Sin embargo, el panorama hoy para la mariposa más famosa no es alentador.

Según el conteo de la temporada 2012-2013 realizado en el estado de Michoacán, donde se encuentra la Región monarca, uno de los principales hábitats de la mariposa homónima, la superficie forestal ocupada por las colonias de estas mariposas en diciembre de 2012 ha sido la más baja de las últimas dos décadas.
Realizado durante la segunda quincena de diciembre de 2012, el monitoreo encontró nueve colonias de hibernación, que ocuparon una superficie total de 1,19 hectáreas (ha) de bosque, un 59% menos respecto a las 2,89 ha ocupadas en diciembre de 2011.

La medición es hecha anualmente la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Alianza entre el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, según sus siglas en inglés) y Telcel.

El reporte es "de mal agüero", según el entomólogo Lincoln Brower de Sweet Briar College en Virginia, quien ha estudiado las mariposas monarca durante los últimos 59 años.

"Esta no es sólo la población más baja registrada en los últimos 20 años (...) es la continuación de una caída estadísticamente significativa de la población de la monarca que comenzó hace al menos una década", aseguró el entomólogo a través de un comunicado.

clic Vea también: La sequía reduce el número de mariposas monarca

Las duras variaciones climáticas

Según el reporte del WWF, una de las razones que explican la disminución tiene que ver con los extremos cambios climáticos a los que estuvieron expuestas las generaciones reproductivas de mariposas en primavera y verano de 2012.

"Las fluctuaciones climáticas extremas en la primavera y el verano en los Estados Unidos y Canadá afectan la sobrevivencia y la fecundidad de los adultos", aseguró Omar Vidal, director General de WWF México.

Lo anterior porque el ciclo de vida de la mariposa monarca depende de las condiciones climáticas de los sitios donde se desarrollan. Los huevos, larvas y pupas logran un desarrollo más rápido si las condiciones son templadas.

"Las temperaturas mayores a 35ºC pueden ser letales para las larvas, mientras que los huevos se desecan en condiciones cálidas y secas, y su tasa de eclosión disminuye drásticamente", explicó Vidal.

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BBC Ciencia

Surgen nuevas teorías en torno a la extinción de los neandertales

Neandertales

El cerebro del neandertal estaba consagrado a la visión y el movimiento, lo que afectaba el pensamiento de alto nivel. 

Una nueva investigación sugiere que los neandertales tenían una visión más aguda y cuerpos más grandes que sus primos humanos de la temprana modernidad, lo que los pudo haber llevado a su extinción. 

Un análisis de datos de fósiles, publicado en la revista académica Proceedings of the Royal Society B, indica que grandes áreas del cerebro del neandertal estaban consagradas a la visión y el movimiento, lo que dejaba menos espacio para el pensamiento de alto nivel, necesario para formar grandes grupos sociales.
Los investigadores dicen que vivir en pequeños grupos sociales significaría menos amigos para venir al rescate en momentos de necesidad.

También sugiere que podrían haber tenido redes de intercambio más pequeñas, lo cual habría dejado a los grupos de neandertales más expuestos ante los cambios ambientales que los humanos modernos.

Se cree que los neandertales vivieron lado a lado con los primeros humanos modernos durante decenas de miles de años, pero desaparecieron como especie hace alrededor de treinta mil años.
Fuente:
BBC Ciencia

6 de marzo de 2013

Elefantes, rinocerontes y tigres, acorralados por la 'mafia' del tráfico de especies

Cadáver de un elefante al que le han extraído los colmillos en Camerún. | WWF
Cadáver de un elefante al que le han extraído los colmillos en Camerún. | WWF

Tigres, elefantes y rinocerontes son las presas más codiciadas para los traficantes de especies. El marfil de los colmillos de elefante, los cuernos de rinoceronte y prácticamente todas las partes del tigre son muy cotizadas en el mercado negro. Tanto, que el comercio ilegal de animales y plantas ya se encuentra entre los más lucrativos del mundo, junto al de drogas, personas, productos falsificados y armas según denuncia la organización conservacionista WWF.
Entre 50 y 100 guardas forestales mueren en África central cada año en casos relacionados con el tráfico de especies
"Se gana mucho dinero y se arriesga poco". Así resume Carlos Drews, director del programa internacional de especies de WWF, el atractivo que para las organizaciones criminales tiene el tráafico de especies. Según sostiene que, según sostiene, mueve anualmente entre 13.000 y 20.000 millones de euros y que ya genera más beneficios que el contrabando de armas.

"Es un problema que trasciende a los ministerios de Medio Ambiente. Es necesario que se involucren también Interior y Asuntos Exteriores", reclama Drews. Y es que, según asegura, cada año mueren en África central entre 50 y 100 guardas forestales en casos relacionados con el tráfico de especies. "Se ha convertido en un tema de seguridad nacional. El dinero del tráfico de especies se usa para financiar grupos guerrilleros", denuncia el conservacionista durante su reciente visita a Madrid, donde presentó las iniciativas que su organización está preparando de cara a la Cumbre Internacional CITES que del 3 al 14 de marzo se celebrará en Bangkok (Tailandia).

Las siglas CITES corresponden a la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, un acuerdo internacional al que se han adherido de manera voluntaria 177 países para velar para que el comercio internacional no amenace su supervivencia. Un deseo que, según WWF, está aún lejos de cumplirse.

Por ello, en Bangkok reclamarán a los gobiernos que aumenten las penas para los traficantes y que destinen más recursos a perseguir estos delitos. Según Drews, su campaña actual se centra en la protección del trío más amenazado por el comercio ilegal: tigres, rinocerontes y elefantes.

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El Mundo Ciencia 

4 de marzo de 2013

Tortuga laúd del Pacífico podría extinguirse en 20 años

Tortuga laúd rodeada de niños antes de ser liberada al mar

La tortuga laúd puede alcanzar dos metros de longitud.

Científicos en Estados Unidos constataron un declive del 78% en el número de nidos de tortuga laúd (Dermochelys coriacea) del Pacífico y aseguran que podría extinguirse en los próximos 20 años.

La tortuga laúd, la mayor tortuga marina, puede alcanzar cerca de dos metros de longitud y pesar más de seiscientos kilos. Ha poblado el planeta durante 100 millones de años.

La especie se distribuye por casi todos los océanos del mundo. Su rango de dispersión es muy amplio por su capacidad de regular su temperatura corporal y tolerar aguas muy frías. Realiza grandes migraciones transoceánicas y la tortuga laúd del Pacífico es conocida por su ardua travesía de 10.000 kms desde la costa oeste de Estados Unidos hasta sus sitios de reproducción en Indonesia.

Thane Wibbles, de la Universidad de Alabama en Birmingham, uno de los autores del estudio, advirtió que la caída en el número de nidos puede llegar a un punto en que la especie no pueda recuperarse.

"La tortuga laúd es uno de los animales más enigmáticos del mundo natural, y estamos siendo testigos de su camino a la extinción", lamentó Wibbles.
Fuente:
BBC Ciencia 

16 de febrero de 2013

Extinción de especies: ¿Señal del fin del mundo?


dodo

La extinción de especies suele verse como algo negativo que va en detrimento de la riqueza y biodiversidad de nuestro planeta.

En un intento por mostrar el lado menos evidente de este fenómeno, el Museo de Historia Natural de Londres, en Reino Unido, inauguró el viernes pasado una exposición titulada "Extinción: ¿no es el fin del mundo?".

"Todos piensan en los dinosaurios y en los dodos al hablar de extinción. Tendemos a ignorar que se trata de una parte natural de la vida en la Tierra", le explica a BBC Mundo Alex Fairhead, comisario de la exposición.

"Muchas veces, cuando un ser muere, puede generar vida. El ejemplo más claro es la extinción de los dinosaurios hace 65 millones de años. Si no hubiese ocurrido, probablemente no contaríamos con la biodiversidad que existe en la actualidad".

Los científicos calculan que en nuestro planeta viven entre dos y diez millones de especies, pero sólo conocemos con certeza a alrededor de 1,9 millones.

Por cada millón de especies en la Tierra se estima que hay una que desaparece cada año debido a lo que se conoce como extinción de fondo, que ocurre cuando las especies no se logran adaptar a los cambios que se dan en su hábitat.

Según la exposición, más del 90% de las especies extintas desaparecieron por estas causas. El resto, tuvieron un final más alífero: murieron en los períodos de extinción masiva.

"Lo interesante es saber que, por encima de todos estos cambios, existen especies que han logrado sobrevivir a la extinción, muchas de ellas sin presentar grandes cambios evolucionarios", cuenta Alex Fairhead.
Los supervivientes 
Cangrejo herradura

El cangrejo herradura ha logrado sobrevivir a la extinción durante alrededor de 450 millones de años, conservando su forma.

La exposición recopiló algunos ejemplos de especies que han logrado sobrevivir contra viento y marea, con la intención de generar interrogantes a tener en cuenta en el futuro.

¿Qué podemos aprender de los "afortunados"? ¿De qué manera sobreviven?

Y, teniendo en cuenta a los ganadores y perdedores en el pasado, ¿se puede deducir cuales serán los del futuro?. Son preguntas que el Museo de Historia Natural de Londres pretende generar en sus asistentes.

El cangrejo herradura, un quelicerado de la clase Merostomata, es uno de los supervivientes. 

La exposición compara a un ejemplar actual con fósiles ancianos de la especie, que datan de hace aproximadamente 450 millones de años. Su semejanza es sorprendente.

"Creemos que su sangre a base de cobre, capaz de sanar con rapidez sus heridas, ha sido fundamental para su supervivencia. Es interesante observar cómo no ha necesitado evolucionar para seguir viviendo", dice Alex Fairhead.

Otro ejemplo es la tortuga laúd. Perteneciente a la familia Dermochelyidae, lleva en la Tierra más de 110 millones de años, sin haber sufrido mayores cambios. 

La fortaleza de su caparazón y su capacidad para pasar hasta 12 meses sin comer, son algunas de las explicaciones que, según sugiere la exposición, sirvieron para su supervivencia.

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BBC Ciencia

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22 de diciembre de 2012

Menú navideño, mala digestión para el planeta

  • La producción de langostinos en Ecuador destruye los manglares

  • Las anguilas (adultos de angulas) están consideradas en peligro crítico de extinción

  • Las uvas vienen de Chile y las frutas desecadas de Tailandia





Anguila a la parrilla. La anguila se halla en peligro crítico de extinción. / S. BURGOS
Gamba chunga, manglar tumba es el título de una canción que Ecologistas en Acción difunde en estos días para concienciar sobre el impacto ambiental y social que supone el cultivo de langostinos a costa de los bosques de manglar situados sobre todo en Ecuador. Gran parte de los langostinos acaban en los platos europeos, especialmente ahora, en las celebraciones de estas fiestas. Tampoco merluzas, angulas y frutas desecadas, entre otros protagonistas de los menús navideños, presentan el mejor balance sostenible posible. Hasta las uvas de las 12 campanadas vienen de Chile. Pero hay alternativas, muchas de ellas más consecuentes con nuestra tradición y dieta mediterráneas.

Ecologistas en Acción recuerda que en Ecuador más del 70% de los manglares ha sido destruido y remplazado por piscifactorías para la producción de langostinos tropicales. El Instituto para el Agua, Medio Ambiente y Salud de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU- Inweh por sus siglas en inglés) concluía en un informe reciente que países como Honduras y El Salvador han perdido más de un 40% de su superficie de manglares entre 1980 y 2005. Una de las autoras, Hanneke Van Lavieren, declaró a la agencia Efe que en Latinoamérica las dos principales causas de esta destrucción son el desarrollo urbanístico y las instalaciones de acuicultura para la producción de gambas y langostinos, especialmente en Brasil, Ecuador y México.

La importancia de los manglares es crítica para comunidades costeras en las regiones tropicales

Zafar Adeel, director del UNU-Inweh y también autor del informe, añadió que “a pesar de que los manglares sólo representan un 0,5% de la superficie arbolada del planeta, su importancia es crítica para comunidades costeras en las regiones tropicales del planeta”. Coincide en ello Ecologistas en Acción, al entender que es un ecosistema importante no solo para la biodiversidad, sino también para las comunidades cercanas. Aparte de la destrucción directa, la salinización y acidificación procedente de las granjas de langostinos provoca igualmente efectos ambientales y sociales negativos.

En la lista roja de especies pesqueras de Greenpeace, aparte de los langostinos, aparecen estrellas de la cocina navideña como las merluzas, aunque no otras, como el besugo y la lubina. Sin embargo, desde AZTI-Tecnalia, centro tecnológico experto en investigación marina y alimentaria, sí alertan sobre otro clásico de estas fechas: las angulas, los alevines de las anguilas. Este organismo ubicado en el País Vasco lidera el proyecto Recang (Recuperando la anguila), en el que participan la Fundación Biodiversidad, la Diputación Foral de Gipuzkoa, el Gobierno vasco, la Agencia Vasca del Agua y Ekolur. Los primeros trabajos han constatado el alarmante descenso de la especie, que se combinan con otros destinados a su recuperación. En la actualidad, la anguila está catalogada en peligro crítico de extinción.

Algunos datos aportados por el proyecto hablan de capturas en zonas de Asturias de 60.000 kilos por temporada en los años setenta del pasado siglo y de solo 500 en la actualidad. En este caso, además de la presión de la extracción, se añaden las presas construidas en los ríos, que trastocan el remonte de los adultos para desovar, y las minicentrales eléctricas, donde quedan atrapadas en las turbinas durante el descenso. Estibaliz Díaz, coordinadora de Recang, apuesta por actuar en todos los frentes (capturas, destrucción del hábitat y regulación del mercado), pero recuerda que desde 1997 un organismo científico, el International Council for the Exploration of the Sea (ICES), del que es la representante española en el grupo de trabajo de la anguila, recomienda que “se mantengan las capturas lo más cercano a cero, ya que la especie está fuera de los límites biológicos de seguridad”.

En estas fechas llega hasta el cordero congelado desde Australia, lo que incrementa su impacto ambiental

Daniel López, coordinador de Agroecología y Soberanía Alimentaria de Ecologistas en Acción, recuerda que “en estas fechas se intensifica el impacto ambiental procedente de numerosos alimentos por las grandes distancias que deben recorrer y las cadenas de frío a que se someten para que podamos consumir masivamente piñas del trópico y uvas de Chile, porque la gran mayoría de las que comemos en las doce campanadas proceden de este país sudamericano”. Hasta cordero congelado de Australia llega por Navidad, por lo que López recomienda informarse debidamente sobre la procedencia de cualquier alimento y apostar por “alimentos autóctonos con producción cercana y ecológica o con denominación de origen”. También reconoce la perversidad de un mercado que vende más barato un cordero que llega de Australia que uno criado a 50 kilómetros del lugar de consumo.

Ni siquiera las frutas desecadas (ciruelas, uvas, albaricoques, higos…) se salvan de protagonizar grandes viajes hasta llegar a nuestras mesas. En unas declaraciones a Efeagro, José María Carrillo, director de Bernabé Biosca Alimentación, informa que importan higos desde Turquía porque “son más carnosos, más dulces y más baratos" para su versión desecada. Alaba las cualidades de otros productos frescos españoles, como los albaricoques y uvas que, sin embargo, no son tan adecuados para su presentación en forma de orejones y pasas, debido a que no quedarían tan jugosos como los importados. Chile de nuevo, Filipinas, Tailandia, Argelia, Argentina y Estados Unidos están en el origen de muchas de estas frutas, aunque una asociación de Nalda (La Rioja), El Colletero, se encarga de demostrar año a año que en España aún se producen de forma tradicional pasas de ciruelas reina claudia que hacen las delicias de quienes las prueban. Y así se comprobó el pasado domingo, con la XIV edición de unas jornadas que reivindican este producto y otros, como los orejones de melocotones.
La alternativa
Tanto desde El Colletero como desde Ecologistas en Acción (“ahora es el momento de la lombarda con pasas y manzana o de ensaladas de escarola con granada”, afirma Daniel López) demuestran que hay alternativas más sostenibles. Ángeles Parra, presidenta de la asociación Vida Sana, impulsora de la feria Biocultura, piensa que “con productos ecológicos certificados y de temporada se garantizan comidas de máxima calidad y muy variadas, sin necesidad de recurrir a langostinos tropicales, pollos criados en granjas intensivas y uvas de Chile”. En el menú ecológico de Parra caben “jamón de jabugo, arroz negro a la brasa, cabrito al horno, canelón crujiente de verduras y queso, ensalada del huerto con flores y germinados, sopa tibia de cítricos y, por supuesto, vino, cava, turrones; y hasta el salmón y el caviar, que pueden ser ecológicos”.

Fuente:

El País Sociedad
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