Latest Posts:

Mostrando las entradas con la etiqueta sonido. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta sonido. Mostrar todas las entradas

16 de diciembre de 2012

El repelente que no espanta mosquitos pero vende

Humanos vs mosquitos 

  • Alrededor de 2.000.000 de personas mueren a causa de una infección que comenzó con una picadura de mosquito cada año.
  • Hasta un millón de estas muertes se deben a la malaria, 90% en el África subsahariana.
  • La fiebre del dengue, la encefalitis japonesa y el virus del Nilo Occidental son otras enfermedades transmitidas por mosquitos.
  • La financiación para luchar contra la malaria ha aumentado considerablemente: en 2011 alcanzó los US$2.000 millones.
  • Las tasas de mortalidad por malaria se han reducido un 25% en la última década.



Mosquito

Alrededor de dos millones de personas mueren al año a causa de una infección causada por una picadura de mosquito.

Sonaba muy bien. No más lociones, gases, humo o periódicos. Todo lo que necesitan, les dijeron a los oyentes de Band FM, en Brasil, es prender la radio.

En ella sonaba un tono de alta frecuencia, de 15 kilohertz. Inaudible para la mayoría de los seres humanos, se suponía que el tono repelía a los mosquitos y evitaba las picaduras.
Las transmisiones de radio -que eran patrocinadas por la revista Go Outside- ganaron el León de Cannes en junio, tal vez el premio más prestigioso en publicidad.

Pero hay un problema. Los científicos dicen que no tiene ninguna base.

Bart Knols, un entomólogo que preside el consejo asesor de la Fundación de la Malaria en Holanda y edita el sitio de internet Malaria World, afirma que "no hay evidencia científica alguna" de que el ultrasonido repele los mosquitos.

Un artículo de 2010 examinó diez estudios de campo en los que se ponía a prueba dispositivos de ultrasonido para repeler moscos y concluyó que "no tienen ningún efecto en la prevención de las picaduras de mosquitos" y que "no se debe recomendar ni usar".

Band FM

Un comercial de video de la "radio repelente" que ganó el premio dice que "estudios han demostrado que esta frecuencia imita el sonido de la libélula, el depredador natural del mosquito, y por ende los repele".

Las mariposas producen una frecuencia de entre 20 y 170 hertz, mucho más baja que 15 kilohertz. Pero Knols dice que es igualmente inútil para repeler a los mosquitos.

Dos de los jurados del premio de Cannes - Bob Moore y Rob McLennan - elogiaron en diferentes oportunidades el supuesto invento de la radio repelente, pero no respondieron a la petición de la BBC para entrevistarlos.

McLennan incluso dijo que llevaría la radio a países con altos índices de malaria. Pero Knols, que ha sido activista en este tema por años, dice que es una locura confiar en la tecnología de ultrasonido para estos países. "La gente necesita protegerse con mosquiteros para la cama, lociones y medicamentos contra la malaria", dice.
Band FM no es la primera ni única estación que transmite frecuencias que supuestamente repelen a los molestos insectos. Y tampoco fue la única idea que tuvo repercusión.

No solo la radio

Incluso más populares son los aparatos que emiten ultrasonido, llamados "repelentes" en muchos países.

En 2005, la revista británica Holiday Which? probó cinco de estos dispositivos para repeler mosquitos y los describió como una "alarmante pérdida de dinero" que "debería ser retirada del mercado".

Uno de ellos, el Lovebug, fue resaltado como particulamente peligroso, porque está diseñado para colgarse en los coches de los bebés.

El Lovebug todavía está disponible en mercados europeos, aunque fue retirado en EE.UU. después de que su fabricante fuera sancionado por la Comisión Federal de Comercio.

En un comunicado, el presidente de la compañía, Kelly McConnell, le dijo a la BBC que Lovebug "todavía se usa de exitosamente en todo el mundo".

"Los testimonios de nuestros clientes con Lovebug son la prueba más clara de la eficacia de nuestro producto".

Uno de los últimos productos que vienen equipados con ultrasonido es un aire acondicionado de la coreana LG. Salió al mercado en Indonesia en 2009 y acaba de ser lanzado en Nigeria, después de pruebas de laboratorio.

La compañía afirma que las pruebas demuestran que el "anti-mosquito" de aire acondicionado repele "en promedio el 64% de los transmisores de la malaria dentro de 24 horas y el 82% (de los mosquitos) en general."

Un vocero de la compañía le dijo a la BBC que el aire acondicionado usa una frecuencia de entre 30 a 100 kilohertz.

Pero Knols dice que imposible saber si el producto funciona sin información adicional sobre las evaluaciones que le hicieron.

"Se sabe que los aires acondicionados, por el flujo de aire que producen, secan a los insectos y los matan", dice. "Así que ¿qué hay de nuevo con el sonido?", se preguntó.

La supuesta tecnología también ha llegado a los teléfonos, que se venden con esa característica o pueden ser adaptados por medio de aplicaciones. Hoy se venden miles de programas que producen ultrasonido, uno de las cuales, Anti-Mosquito - Sonic Repeller, fue objeto de un video que Knols publicó en internet en el que se demuestra que no sirve.

¿Hora de que respondan?

Video de Knoles

Knols probó en un video que la aplicación Anti-Mosquito-Sonic Repeller no sirve.

La idea de que el ultrasonido ahuyenta a los mosquitos existe hace 40 años.

La frecuencia del aleteo de la libélula no es la única razón que se ha planteado para la tecnología. A veces se dice que la señal ultrasónica replica el sonido del mosquito macho, quien es evitado por los mosquitos hembra que por lo general, después aparearse, huyen de ellos.

Knols señala que esta explicación, por su propia lógica, tampoco funciona, porque los mosquitos macho sólo producen un sonido de 700 hertz, muy por debajo de una frecuencia del ultrasonido. De hecho, se cree que los mosquitos hembra tienen una sensibilidad muy débil al sonido en general.

El entomólogo ha sugerido que se revoque el León de Cannes y le den el premio de Band FM al que quedó segundo.

Pero en un comunicado, Terry Savage, presidente ejecutivo de los Leones de Cannes, dijo que la cientificidad de la campaña es un asunto de la agencia que ganó el premio, Talent, y el regulador de publicidad de Brasil.

Talent -que en parte es propiedad de Publicis Groupe, la compañía matriz de Publicis EE.UU., donde uno de los jueces de los Leones de Cannes, Bob Moore, es director creativo- se negó a hacer comentarios.

El organismo autorregulador de anunciantes brasileños, Conar, le dijo a la BBC que sus miembros se encuentran actualmente deliberando sobre si la campaña violó el código de práctica de la industria.

Un portavoz de Band FM, por su parte, dijo que no tenía ninguna responsabilidad en verificar si la señal que emite realmente tiene algún efecto en los mosquitos.

Fuente:

BBC Ciencia

Contenido relacionado

¿Por qué rugen las tripas?

Rugido ¿Por qué rugen las tripas? ¿A quién no le han rugido alguna vez las tripas en el momento más inoportuno? En contra de la creencia popular, que dice que sólo aparecen cuando hay hambre, estos molestos ruidos aparecen con mucha frecuencia en situaciones que provocan ansiedad (exámenes, reuniones, ir a la casa de la suegra por Navidad…) y no hay nada más incómodo que uno de estos ruidos cuando coincide justamente con un silencio pasajero de todo el grupo.

En medicina, a estos “rugidos de tripas” se le llaman borborigmos. Son ruidos gastrointestinales producidos por el movimiento de líquidos y gases. Este movimiento se produce por la contracción coordinada (peristaltismo) del estómago e intestinos.

Es algo totalmente normal (fisiológico) en nosotros que tengamos estos ruidos. De hecho, prácticamente siempre los tenemos, lo que ocurre que suelen ser bastante débiles y no los apreciamos. Con un fonendoscopio colocado a nivel del abdomen se puede comprobar que en realidad casi siempre están ahí. Y, cuando tras mucho tiempo intentando escuchar, no se consigue oír nada, es mala señal, porque puede indicar una parálisis o una obstrucción intestinal.

Lo contrario a la parálisis intestinal puede ocurrir cuando hay un exceso de los movimientos gastrointestinales (hiperperistaltismo) y se da en casos de diarreas, flatulencia excesiva, intestino irritable, celiaquía y un largo etcétera. Por supuesto, también puede ocurrir de forma pasajera en situaciones de estrés y ansiedad como he comentado más arriba. Cuando todo eso ocurre, el movimiento de los líquidos y gases es mucho mayor y, por tanto, también lo serán los ruidos resultantes.

En cuanto al rugido del estómago, puede darse tanto en el proceso normal de digestión como cuando han pasado varias horas desde la última comida y empieza a haber hambre. El estómago está constantemente contrayéndose, esté lleno o vacío. 

Cuando se da la situación en la que sentimos lo que llamamos “hambre” se produce un reflejo nervioso parasimpático que prepara al estómago y los intestinos para recibir comida. Es decir, aumenta las contracciones y la secreción de fluidos. Estas contracciones y los líquidos, unido a que el estómago vacío está más lleno de gas que cuando está lleno, provoca el sonido del “rugido” estomacal tan característico. Por eso, sólo hace falta pensar, ver u oler comida para que las contracciones gastrointestinales aumenten. Y no es lo único en los que se nota este reflejo, la salivación también aumenta (“se hace la boca agua”).

Como dato curioso, hay personas que tienen tanto pánico al rugido de tripas en público que evitan las reuniones o las situaciones sociales en qué podrían escucharse. Normalmente suele darse en gente ya de por sí tímida que tienen unos ruidos gastrointestinales bastante frecuentes y sonoros.

Fuente: MEDTempus

11 de diciembre de 2012

MIDI, la tecnología que le abrió la puerta a la música digital

Kraftwerk

Los conciertos de Kraftwerk necesitan menos parafernalia gracias a la tecnología MIDI.

Un pequeño teclado y un ordenador portátil: hasta que apareció la tecnología MIDI, hace 30 años, nadie imaginaba que sólo con ese equipo se podría dar un concierto.

Dicen los entendidos que para apreciar realmente el tema Shine on you crazy diamond, de Pink Floyd, es mejor escucharlo en vinilo.

Contenido relacionado
Los sonidos de los sintetizadores estallan a través del crepitar de la púa sobre el disco, mientras la guitarra y la batería marcan un ritmo ondulante.

Es un sonido enorme que define toda una época, y uno puede sumergirse por completo en el espíritu de esos años con esa versión en vinilo.

Pero más allá de la impresionante creatividad de la música, el sonido evidencia una importante limitación en la forma en la que los instrumentos musicales electrónicos se controlaban en aquel momento.

"Una banda como Kraftwerk, por ejemplo, utilizaba 200 teclados analógicos distintos", explica el músico argentino Cineplexx.

Pero la tecnología de la Interfaz Digital de Instrumentos Musicales (MIDI, según sus siglas en inglés) permitió conectar los instrumentos a una computadora y entre sí, lo que supuso un cambio enorme.
"Yo cuando doy un concierto utilizo un teclado con 20 teclas y un ordenador portátil", dice Cineplexx, consultado por BBC Mundo.

Con estos elementos es posible componer, secuenciar, programar, modificar y reproducir el sonido de cualquier instrumento, como "un vibráfono o un sintetizador".

Un lenguaje común

"Lo que hizo MIDI es permitir el nacimiento de los primeros estudios de grabación caseros"
Dave Smith, creador de la tecnología MIDI

El protocolo MIDI nació en California, de la mano de Dave Smith, un fabricante de sintetizadores, que convenció a sus competidores para que adoptaran un formato en común que permitiera controlar de forma externa a los sintetizadores, con otro teclado o incluso a través de una computadora.

MIDI pronto se convertiría en el estándar industrial para conectar diferentes instrumentos electrónicos, cajas de ritmo, samplers y ordenadores.

Esta tecnología abrió una "nueva era de procesamiento musical".

"Lo que hizo MIDI es permitir el nacimiento de los primeros estudios de grabación caseros", cuenta Smith en conversación con Tom Bateman, de BBC Radio 4.

"Las computadoras eran lo suficientemente rápidas como para secuenciar notas y controlar el número de teclados y cajas de ritmos al mismo tiempo, y eso abrió paso a una industria nueva".

Fue un avance que tendría el mismo impacto en la música popular que la electrificación de guitarras, desarrollada décadas antes.

El nacimiento de la música dance

Música dance

MIDI generó nuevas formas de producción musical, y dio lugar a géneros como el dance.

Alex Paterson, fundador de la banda de ambient dance llamada The Orb, tiene un estudio de grabación en su casa de Buckinghamshire, Reino Unido.

"Que Dios bendiga a MIDI", exclama al ser consultado por la BBC.

"Fue como entrar en un sueño", cuenta, refiriéndose al sistema utilizado en 1990 para grabar el tema emblemático de la banda, Little Fluffy Clouds.

"Estaba todo allí guardado, listo para que tú lo lances, fue realmente increíble", recuerda.

Este control orquestado y secuenciado de los sonidos de sintetizadores, cajas de ritmo y samplers dio lugar a nuevas formas de producción: así nació la música dance.

Lo que hizo MIDI fue "separar la tecla del sonido", dice Cineplexx. Ahora se pueden crear órdenes digitales y asignarle a cada tecla los sonidos que se quieran.

El músico argentino ofrece una comparación interesante con las cámaras digitales y analógicas en el mundo de la fotografía.

"Hay quienes cuestionan la calidad", dice, pero destaca que en la práctica el MIDI proporcionó la posibilidad de escribir partituras digitales interpretarlas como se quiera con un pequeño teclado.

Libre acceso

Tecnología MIDI

La tecnología MIDI es actualmente un componente central en los procesos de grabación y producción musical.

El primer instrumento con capacidad MIDI fue un sintetizador llamado Prophet-600 – diseñado por Dave Smith – que comenzó a producirse en 1982.

Las computadoras Atari y Commodore 64, muy populares entre los aficionados a los videojuegos en aquella época, también podían utilizarse para controlar instrumentos MIDI a través de un cable con conectores DIN (de cinco puntas) en cada extremo.

La amplia disponibilidad del formato y la facilidad de su uso permitieron redefinir la música pop de los 80, le aportaron un fuerte sonido electrónico y engendraron muchos de los géneros musicales contemporáneos.

Dom Beken, coproductor de Alex Paterson, recuerda cómo la tecnología MIDI permitió que cualquiera pudiera crear "masivos paisajes sonoros".

"Pioneros de la electrónica y antiguos punks ahora podían hacer cosas que enloquecían al público en las pistas de baile", dice.

Para Dave Smith, MIDI sólo podía triunfar si todos los fabricantes la adoptaban. "Tuvimos que regalarla", dice.

La universalidad del formato fue quizás un ejemplo precursor de lo que ahora se denomina tecnología de código abierto (open source).

La intención de sus promotores era que cualquiera tuviera acceso.

"Por supuesto que hubiera sido divertido ganar dinero con ella", dice su creador californiano.

"Pero ese no era el plan".

Treinta años después, la tecnología MIDI se mantiene como uno de los componentes centrales de la grabación y producción profesional de música.

Fuente:

BBC Tecnología 

4 de diciembre de 2012

Como construir un monocordio





En un post anterior aprendimos que Pítágoras descubrió los fundamentos matemáticos de la música con un instrumento musical llamado monocordio. Pues bien, en esta oportunidad vamos a aprender a construir uno, vamos ¡es un sencillo!...




También puedes seguir las instrucciones (formato PDF) en la Secretaría de Educación de Colombia o en Taringa (este es otro modelo). En el blog "El Monocordio de Pitágoras" encontramos una explicación matemática y un video muy ilustrativo.

Curiosidades del monocordio

El monocordio demás de generar sonidos, también:
  • Muestra visualmente las proporciones mediante la escala graduada.
  • Sirve para el estudio y enseñanza teórica y práctica de la música. Se atribuye a Pitágoras y a sus discípulos (siglo VI aC) la utilización del monocordio para sus investigaciones filosóficas y experimentales.
  • Euclides, matemático griego del siglo III basó una gran parte de su geometría euclidiana en la división del monocordio a la que consagro su obra, Sectio canonis, que fue norma aceptada durante siglos.
  • El pensador León-Battista Alberti, basándose en las proporciones musicales del monocordio, escribió un tratado de arquitectura De re aedificatoria (1465).
  • La división del monocordio, proporcionó materia de reflexión a expertos en esoterismo y ciencias sobrenaturales; su simplicidad lleva implícitos los misterios de la asociación del espacio y tiempo, de lo visual con lo audible, las esferas del universo, etc.
  • Robert Fludd (1574), filosofo inglés, aplicó las divisiones del monocordio para desarrollar una visión cósmica y mantuvo una larga relación con Kepler, astrónomo alemán, que publicó el tratado Monochordum Mundi (1623).
  • Durante el Renacimiento, que trataba de restaurar la vuelta a los valores de la antigüedad, las relaciones armónicas y proporciones obtenidas de la división del monocordio eran mucho más que una simple técnica de geometría aplicada, contenían una lógica que se podía verificar y medir, y eran fuente de creación artística.
  • Modernamente se considera que una longitud de diapasón, longitud de cuerda vibrante entre ceja y puente, igual a 68 cm., ofrece la mayor facilidad de interpretación para la mano derecha.
Sorprendente!!!

Jack White fabrica una guitarra de una sola cuerda (Diddley Bow) con solo tres clavos, un pedazo de madera, una botella de vidrio y una cuerda de guitarra. Si alguién lo puede fabricar me pasa la voz... Ver el video AQUÍ

Y si no tienes una botella de vidrio la puedes reemplazar con una lata vacía de atún. Ver el video AQUÍ. ERste modelo es con dos botellas, una grande y una pequeña, vel el VIDEO.

Leonardo Sánchez Coello
conocerciencia@gmail.com

Conocer Ciencia: ciencia sencilla, ciencia divertida, ciencia fascinante...  

Científicos confirman que la música pop suena toda igual

Analizan con algoritmos miles de canciones desde 1955 y concluyen que son anodinas en coros, melodías y sonidos.



Noticia reconfortante para todos aquellos mayores de 35 años: unos científicos han descubierto que la música pop moderna es en realidad más alta y toda suena igual.

Investigadores de España han utilizado un enorme archivo conocido como Million Song Dataset, que desglosa todo el audio y las voces en datos que se pueden comprimir, para estudiar las canciones pop entre 1955 y 2010.

Un equipo liderado por el especialista en inteligencia artificial Joan Serra, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) de España, combinó la música de los últimos 50 años con unos complejos algoritmos y descubrió que las canciones pop sonaban intrínsecamente más altas y anodinas en términos de coros, melodías y tipos de sonido empleados.

"Encontramos pruebas de una homogeneización progresiva de la música", dijo Serra. "En concreto, obtuvimos indicadores numéricos de que la diversidad de transiciones entre combinaciones de notas, hablando de coros y melodías, ha disminuido constantemente en los últimos 50 años".

También descubrieron que la denominada paleta de timbres se había vuelto más pobre. Se dice que la misma nota tocada al mismo volumen en un piano y una guitarra tiene un timbre diferente, así que los investigadores concluyeron que la música pop moderna tenía una variedad de sonidos más limitada.

La industria de la música lleva tiempo siendo acusada de subir el volumen de las canciones que graba en una "guerra del sonido más alto", pero Serra dice que es la primera vez que se ha medido apropiadamente utilizado una gran base de datos.

Conclusión: La música pop, musicalmente hablando, no es lo máximo... pero cada vez escuchamos peores canciones (y esto lo sospeché desde un principio).

Fuente:


¿Qué es la música dodecafónica?

Estamos acostumbrados a oir música de forma tonal, es decir música "con armonía", pero aunque no lo creamos existe la música dodecafónica que consiste en crear música de forma completamente distinta a la música tonal, consiste en crear música atonal.

La dodecafonía es una forma de organizar los sonidos de forma no armónica, se denomina dodecafonía ya que se tienen muy encuenta los 12 tonos de la escala cromática siguiendo la regla siguiente:

Cada nota siguiente a la nota tonal se considera del mismo valor que la primera, por ejemplo Do y Do Sostenido tienen la misma importancia, no estableciendo jerarquía entre las notas.

Normalmente en la música tonal, una nota adquiere mayor relevancia, esto no pasa en la música atonal.
Su principal regla es: Todos los tonos o semitonos adquieren la misma importancia y ninguna nota ha de ser repetida durante la obra.

Entre los grandes artistas de música dodecafónica se encuentran: 

Rach Miel, Arnold Schoemberg, Webern, Berg, Stockhausen y Boulez todos innovadores musicales.

Entre las grandes obras se destacan:

Twelve Tone Composition   1923
Schoemberg´s Tone-Rows  1936
Composition with Twelve Tones 1 1941
Composition with Twelve Tones 2 1948

(Parte de la información fue extraída de la enciclopedia online wikipedia

Quiero destacar en particular a un hombre llamado Wilsongomes cuyo arte es tocar música dodecafónica, algunos lo verán como alguien que no sabe tocar ya que estamos acostumbrados de una forma casi inconsciente a la música tonal.

Twelve Tone Composition


 Fuente:

Componemos

La música alta aumenta el consumo de alcohol


La música alta aumenta el consumo de alcoholUn estudio publicado en la revista Alcoholism: Clinical & Experimental Research demuestra que la música alta en los bares incita a beber más alcohol en menos tiempo.
Gracias a estudios previos los científicos sabían, por ejemplo, que escuchando música rápida se ingiere alcohol a más velocidad, o que en un local con música ambiental los clientes permanecen más tiempo que en ausencia de música. Sin embargo, esta es la primera vez que se estudia los efectos del sonido de fondo en un contexto real: en bares nocturnos franceses.

Para llevar a cabo el experimento, Nicolas Guéguen y su equipo de la Université de Bretagne-Sud pidieron permiso a los dueños de una serie de locales para manipular el volumen de la música al tiempo que registraban el consumo de alcohol de 40 varones de edades comprendidas entre 18 y 25 años, que ignoraban que estaban siendo observados. Los resultados no dejaron lugar a dudas: cuanto más alto es el volumen de la música más rápido se consume la bebida. Y, por lo tanto, la ingesta final también aumenta.

Los investigadores han llegado a la conclusión de que este comportamiento se explica por dos motivos. En primer lugar, la música alta hace que la gente esté “más espabilada". Y además, a partir de cierto volumen se dificulta la interacción social, lo que hace que "los clientes hablen menos y beban más", matiza Guéguen.

Fuente: 

Muy Interesante

3 de diciembre de 2012

No hay música sin ciencia

No se puede ver ni palpar, sin embargo, se siente. La música es una de las manifestaciones artísticas más universales y, a la vez, uno de los rasgos más singulares, junto con el habla, del ser humano. Pero el lenguaje musical tiene, también, mucho en común con otro lenguaje que la inteligencia ha inventado para describir la realidad: la ciencia. Ésta habla de espectros, frecuencias, resonancias, vibraciones y análisis armónico. No es una simple coincidencia, no hay música sin física.

El sonido es un fenómeno físico originado por la vibración de los cuerpos y que se trasmite por el aire en forma de ondas. El efecto estético de un sonido depende de la relación lógica y pautada de sus vibraciones. Es decir, que en el fenómeno musical existe una esencia matemática. Y si consideramos la música como una sensación auditiva cuyo propósito es invocar emociones, disciplinas como la fisiología, la psicología, la bioquímica y las neurociencias tienen mucho que decir.

Un Sistema Solar polifónico

La correspondencia entre la música y la ciencia se conoce desde hace mucho tiempo. Probablemente, hacia el siglo VI a.C., en Mesopotamia ya advirtieran las relaciones numéricas entre longitudes de cuerdas. Pero fue en la Grecia antigua cuando se trazaron las diferentes escaleras armónicas basadas en las proporciones numéricas. Para los pitagóricos el Universo era armonía y número. Las notas musicales se correspondían con los cuerpos celestes. Los planetas emitían tonos según las proporciones aritméticas de sus órbitas alrededor de la Tierra. Y los sonidos de cada esfera se combinaban produciendo una sincronía sonora: la "música de las esferas".

Esta armonía celestial fue descrita por muchos pensadores como Platón, que en La República, relata el mito de Er, un guerrero que en su muerte temporal ve el Universo y describe las órbitas de los planetas. "Encima de cada uno de los círculos iba una Sirena que daba también vueltas y lanzaba una voz siempre del mismo tono; y de todas las voces, que eran ocho, se formaba un acorde". También Cicerón, en El Sueño de Escipión, explica el fenómeno: "Es el sonido que se produce por el impulso y movimiento de las órbitas, compuesto de intervalos desiguales, pero armonizados (...) Porque tan grandes movimientos no podrían causarse con silencio, y hace la naturaleza que los extremos suenen, unos, graves, y otros, agudos".

La tradición que consideraba al Universo como un gran instrumento musical se prolongará durante la Edad Media y hasta el siglo XVII, cuando aparece la figura de Johannes Kepler. El astrónomo alemán intentó comprender las leyes del movimiento planetario y consideró que éstas debían cumplir las leyes pitagóricas de la armonía. En su libro Harmonices Mundi (1619) ilustra el orden del Universo según los sonidos producidos por las velocidades angulares de cada planeta. Cuanto más rápido era el movimiento, más agudo era el sonido que emitía.

Asumida esta creencia, Kepler escribió seis melodías, cada una correspondiente a un planeta diferente, e instó a los músicos de su época a asimilar su descubrimiento. Escribió: "el movimiento celeste no es otra cosa que una continua canción para varias voces, para ser percibida por el intelecto, no por el oído; una música que, a través de sus discordantes tensiones, a través de sus síncopas y cadencias, progresa hacia cierta predesignada cadencia para seis voces y, mientras tanto, deja sus marcas en el inmensurable flujo del tiempo".

Las estrellas se hacen oír

Las primeras evidencias de música originada en un cuerpo celeste, tal como habían imaginado los pitagóricos primero y Kepler más tarde, no se encontraron hasta hace varias décadas. Las estrellas no emiten melodías armoniosas, pero sí que están sometidas a perturbaciones que provocan una respuesta en forma de ondas. No podemos escuchar el sonido emitido por una estrella, ya que las ondas de sonido necesitan un medio por el que propagarse y el Universo está prácticamente vacío, aunque podemos observar cómo vibra. Y éste es el ámbito de estudio de la sismología solar, un campo de la astrofísica que, desde 1979, investiga en detalle la estructura interna invisible del Sol.

Como un complejo instrumento musical, nuestro astro oscila creando tipos de ondas (modos propios de oscilación) que se propagan por su interior y se reflejan en la superficie deformándola ligeramente, del mismo modo que las olas del mar. Observando esta alteración se pueden descubrir las frecuencias de las ondas que se propagan desde su núcleo y deducir, al igual que en una ecografía, las características físicas y los movimientos que se prolongan en el interior.

Que nuestro astro tenga ritmo no es una cualidad única, sino que cada estrella, como cada instrumento musical, posee su propio sonido. Actualmente, un astrofísico del IAC, Garik Israelian, ha convertido esta propiedad de los objetos celestes en un proyecto musical. "Detecto las ondas, las convierto en sonidos en el ordenador y, como resultado, obtengo una serie de notas precisas", describe. Con él colabora Brian May, otro astrofísico aunque más conocido como guitarrista y compositor del grupo Queen.

Y el Sol es, también, la repuesta a uno de los misterios que la ciencia llevaba años persiguiendo: el excelso sonido del violín Stradivarius. La última teoría sostiene que el secreto está en el "Mínimo de Maunder", un periodo de escasa actividad solar que entre los siglos XVII y XVIII, cuando se elaboraron los citados violines, provocó un acusado cambio climático. La temperatura en Europa descendió, en lo que se llamó la "Pequeña Edad de Hielo", causando un lento crecimiento en los árboles y dotando a la madera de unas singulares cualidades sonoras.

Con la música a otra parte

Para Leibniz, "la música es un ejercicio de aritmética secreta y el que se entrega a ella ignora que maneja números". Y Bertrand Russell consideraba que "el matemático puro, como el músico, es creador libre de su mundo de belleza ordenada". Descartes (Compendio musical), Galileo (Discurso), Mersenne (Armonía Universal), D’Alembert (la solución de la ecuación de ondas) y Euler (Nueva teoría musical), son algunos de los matemáticos que se han preocupado por la elaboración de teorías musicales. Si bien, también se conocen muchos compositores que han aplicado a sus creaciones principios de lógica y probabilidad matemática, como Debussy, Boulez, Messiaen, Varese, Stockhausen o Xenakis, precursores de la música electrónica actual.

Pero la música no solamente ha seducido a los matemáticos. Científicos de muchas disciplinas han recogido sus teorías en composiciones musicales. Como Clark Maxwell, descubridor de la existencia de las ondas electromagnéticas, que compuso una canción titulada "Rigid Body Sings" para explicar de forma cómica la ley de colisión entre los cuerpos rígidos, o el físico Georges Gamow, que en uno de sus libros sobre su simpático personaje de ficción Mr. Tompkins incluyó tres arias para ser cantadas por tres eminentes cosmólogos, Abbé George Lemaître, Fred Hoyle y él mismo, que explicaban diferentes teorías de la creación del Universo.

En contra de la creencia popular, emoción y razón se originan en el cerebro y están relacionadas. Por ello, han prosperado nuevos campos de estudio, en especial, desde las neurociencias, que analizan la conexión entre el sonido, la emoción y el pensamiento. Y aunque hace 20 años pocos creían que pudiera aportar nada, actualmente es un ámbito de gran interés académico y múltiples aplicaciones, sobre todo, terapéuticas.

Hoy sabemos, que la música y el lenguaje tienen un origen común, ya que en el ámbito neurológico han evolucionado juntas en los últimos dos millones de años. También conocemos que la música estimula la zona del cerebro que registra el placer, un mecanismo básico para la supervivencia. Y que no todos escuchamos del mismo modo: gracias a imágenes obtenidas por Resonancia Magnética Funcional, se ha observado que la actividad cerebral en un músico es diferente de la de una persona sin formación musical.

Resumiendo, la música es el arte de combinar sonidos armónicamente con el propósito de producir sensaciones. Pero la armonía no es sólo un elemento esencial de la música, sino que ha sido invocada frecuentemente por la ciencia para describir y comprender el mundo. Muchos científicos han confiado en la armonía del Universo y algunos músicos han utilizado la lógica y el cálculo en sus creaciones. La música integra con la ciencia un campo general del pensamiento que nos distingue como humanos. Preguntarnos por ella, es preguntarnos por nosotros mismos.

Fuente:

Ccaos y Ciencia

27 de noviembre de 2012

El poder de la música: El control de la mente del sonido rítmico

Entras en un bar y la música te va golpeando. Las cabezas se zarandean y los pies comienzan a seguir el compás en sincronía. De alguna manera el ritmo del sonido asume el control cerebral de todo el mundo en la sala obligándolos a realizar simultáneamente el mismo comportamiento en sincronía. ¿Cómo es posible? ¿Este control mental inconsciente del sonido rítmico conduce sólo a nuestros movimientos corporales, o podría estar afectando a procesos mentales más profundos?



El misterio es más profundo de lo que se piensa, según la psicóloga Annett Schirmer, cuyo informe incluye nuevos hallazgos presentados en una reunión de la Sociedad de Neurociencia en Nueva Orleans. El sonido rítmico "no sólo coordina el comportamiento de la gente de un grupo, sino que también coordina sus pensamientos, los procesos mentales de los individuos del grupo sincronizado."

Este hallazgo, extiende el poder bien conocido de la música para aprovechar los circuitos cerebrales que controlan la emoción y el movimiento, que controlan efectivamente los circuitos cerebrales de la percepción sensorial. Este descubrimiento ayuda a explicar cómo los tambores unen a las tribus en una ceremonia, por qué los ejércitos marchan al son de la corneta y el tambor a la batalla, por qué el culto y las ceremonias están impregnados de canciones, por qué el habla es rítmico, marcado por los ritmos del énfasis en sílabas y palabras particulares, y tal vez por qué bailamos.

Schirmer y su estudiante graduado Nicolas Escoffier, de la Universidad de Singapur, primero probaron a los sujetos mediante los flashes de una serie de imágenes en un monitor de vídeo, y les pidió que identificaran rápidamente cuando una imagen se había vuelto al revés. Mientras los participantes se centraban en esta tarea, un tambor electrónico sonaba con un suave ritmo de cuatro tiempos de fondo, sincopado para saltarse el cuarto tiempo de cada compás.

Los resultados mostraron que cuando la imagen flasheaba en ese latido perdido, los sujetos reconocían la imagen invertida mucho más rápido que cuando la imagen flasheaba fuera de tiempo de sincronización con el compás o cuando dichas imágenes se presentaban en silencio. De alguna manera, la toma de decisiones del cerebro se vio acelerada por el ritmo auditivo externo y acentuaba los puntos precisos en sincronía con el ritmo. Dado que era evidente que el poder del ritmo aumentaba el rendimiento cognitivo con el ritmo perdido cuando no se presentaba ningún sonido, y que el efecto no tenía nada que ver con el sonido del tambor que actuaba como estímulo. El procesamiento mental debía de caer en un ritmo de acentuada expectativa o de un rendimiento superior sobre el ritmo anticipado.

Más adelante, los investigadores colocaron unos electrodos en el cuero cabelludo de los participantes, para determinar si la actividad eléctrica del cerebro se veía afectada de alguna manera por el ritmo del sonido. El registro del EEG detecta la actividad eléctrica combinada de miles de neuronas que trabajan juntas en la corteza cerebral. Igual que el rugido de una multitud en un partido de béisbol, las ondas de la actividad eléctrica del cerebro se generan cuando las neuronas individuales de la corteza cerebral se combinaban en la acción. Los registros del EEG mostraron que las ondas de actividad cerebral (ondas alfa y beta) se sincronizaron en torno al ritmo auditivo. Es decir, el devenir de las oscilaciones de las ondas cerebrales se desplazaba a una fase cuyo pico de onda siempre ocurría en un punto preciso relativo al siguiente latido del ritmo de tambor. El sonido rítmico sincronizaba las ondas cerebrales.

Las grabaciones de las ondas cerebrales también revelaron un efecto más sorprendente del ritmo en la función cerebral. Cualquier estímulo sensorial, como el ver una imagen o escuchar un sonido, podía generar una breve onda cerebral en la región de la corteza cerebral donde se recibe y procesa tal información. Los investigadores descubrieron que la onda cerebral de evocación sensorial, medida en la parte posterior del cráneo, sobre la región donde se procesa la visión, tenía su pico cada vez que se presentaba una imagen, pero cuando la imagen se presentaba simultáneamente con la pérdida de ritmo de tambor, la respuesta eléctrica evocada por la imagen era más grande que cuando la imagen era presentada fuera de ritmo o aparecía en la pantalla en silencio. Estos circuitos visuales eran más sensibles cuando la imagen aparecía en sincronía con el ritmo auditivo.

Esta región del cerebro procesa los primeros pasos de la visión, son los circuitos que detectan los estímulos visuales. Esto significa que nuestra percepción del mundo externo entrar en nuestra mente a través de los ojos y se ve afectado por el ritmo de lo que oímos. Algo visto en un punto preciso de tiempo con ritmo auditivo es más probable que se perciba que si aparece fuera de sincronía con ese ritmo. Esta compuerta de entrada visual por el ritmo auditivo no requiere de una meditación prolongada sobre el ritmo, para hacer que la persona entre en una especie de estado de trance, los efectos son casi instantáneos. "En el espacio de unos pocos compases de la música las ondas cerebrales comienzan a ponerse en sintonía con el ritmo", subrayó Schirmer.

Steven Pinker decía que la música es un "pastel auditivo", sin ninguna ventaja particular en la evolución de nuestra especie. Schirmer cree que sus nuevos hallazgos no apoyan esta opinión. "El ritmo facilita nuestras relaciones interpersonales en términos que no sólo abarca a cómo nos movemos, sino la forma en que hablamos y pensamos", concluye ella. "El ritmo facilita que la gente interactúe mediante la sincronización de las ondas cerebrales y aumente el rendimiento de la percepción de lo que la otra persona está diciendo y haciendo en un momento determinado." El ritmo, ya sea con la letra de canción o con la medida de un poema facilita el procesamiento del lenguaje, por eso ella está llevando a cabo nuevos experimentos para poner aún más a prueba esta idea. "Cuando la gente se mueve en sincronía tienen más tendencia a percibir el mundo de forma sincronizada, lo que facilita su capacidad para interactuar."


- Autor: Douglas Campos una autoridad reconocida internacionalmente en las interacciones neuronas-glía, en el desarrollo del cerebro y los mecanismos celulares de la memoria. Es miembro del consejo editorial de varias revistas de neurociencia y autor de más de 150 artículos y el libro “El otro cerebro” (The Other Brain).
Fuente:

Bit Navegante

19 de noviembre de 2012

Científicos logran transformar ondas cerebrales en música


c11111111

¿El sonido del cerebro? Algunos científicos plantean así el resultado de esta investigación, realizada por gente de la University of Electronic Science and Technology en China, quienes han logrado traducir dos tipos de ondas cerebrales en instrucciones musicales, las cuales son interpretadas luego por un instrumento musical electrónico.

La idea es crear un reflejo de la actividad cerebral que en lugar de generar imágenes, pueda ser representado a través de sonidos (en este caso de un piano), entregando como resultado melodías un tanto sin sentido para lo que son los estándares musicales actuales, pero que responden a la intensidad y duración de los estímulos captados en la cabeza de la persona. ¿Quieres saber cómo se escucha? Los científicos han puesto a disposición los archivos .mp3 a través de aquí, aquí, aquí y también acá.

Así, este hallazgo si bien no logra “extraer” realmente el sonido de la mente y pasarlo a parlantes, sirve como apronte para medir de nuevas maneras la actividad cerebral, generando quizás mejores diagnósticos para enfrentar enfermedades relacionadas con la mente en el futuro, además de ser un primer acercamiento hacia el establecimiento de relaciones entre la música y el cerebro.

Link: Listen to the sounds of the human mind: Remixed brain scans reveal our inner music (Mail Online)

Fuente:

FayweWayer

Cómo amplificar el sonido del iPhone con una revista




Si bien aquí no se trata de un DIY (Do It Yourself – Hágalo usted mismo) con los pasos a seguir para construir algo, el vídeo que les voy a mostrar les dará una idea de cómo en pocos segundos y muy fácilmente, pueden amplificar el sonido de su iPhone con una revista.

Se trata de un vídeo de la empresa Coca Cola de Brasil, la que junto con la revista Capricho Magazine, llevaron a cabo una promoción que permite transformar el último número de esa revista en un amplificador para iPhone.


Coca-Cola.FM from JWT Brazil Cannes 2012 on Vimeo.

Para hacerlo ustedes solo necesitan una revista y una tijera.  Marcan los dos cortes que deben hacer usando el iPhone como guía, recortan la tapa y listo, en un par de minutos ya tienen su amplificador para iPhone!

Deben tener en cuenta de usar una revista con tapas gruesas y quizás hasta lo puedan hacer con una cartulina o algún cartón.

Tomado de:

Geeks Room

14 de noviembre de 2012

Sonoquímica

http://www.kalipedia.com/kalipediamedia/cienciasnaturales
/media/200709/24/fisicayquimica/20070924klpcnafyq_69.Ges.SCO.png
Ya hemos comentado otras veces que una reacción química implica una determinada energía de activación para romper los enlaces de los reactivos y que estos puedan dar lugar a los productos. Si la los productos son más estables (energéticamente hablando) que los reactivos, esta energía se devolverá y estaremos ante un proceso exotérmico de manera global. Lo contrario sería una reacción endotérmica. Pero, en cualquiera de los dos casos, siempre es necesario aportar cierta energía (la energía de activación) o activar los reactivos para que den la reacción. Normalmente esto se puede conseguir calentando, porque la temperatura está directamente relacionada con la energía de activación por medio de la ecuación de Arrhenius:
 
http://www.madrimasd.org/blogs/quimicaysociedad/files/2010/06/Ecuacion_Arrhenius.gif
Dentro de la Química Sostenible se buscan métodos alternativos de activar una reacción que no impliquen tanto gasto energético como el calentamiento convencional. Para ello, se utilizan la radiación microondas, los ultrasonidos o las reacciones en ausencia de disolvente, e incluso la fotoquímica.

Con mis prisas por participar en el XV Carnaval de Química, pasé directamente a hablar de las aplicaciones de los ultrasonidos en la medicina (y seguiremos hablando), sin hacer una pequeña introducción. Así que hoy, para empezar el XVI Carnaval voy a intentar explicar el fundamento de usarlos en química. En realidad, casi todo lo que trataremos está muy relacionado con la física. Para empezar, las ondas de ultrasonido no se corresponden con el espectro electromagnético que los químicos estamos acostumbrados a ver...
 
http://radiacionycancerdepiel.wikispaces.com/file/view/espectro_electromagnetico.jpg/30680692/espectro_electromagnetico.jpg
Los ultrasonidos son ondas sonoras, que se caracterizan por su movimiento ondulatorio, diferenciándose de las ondas electromagnéticas en que no están cuantizadas, es decir, no hay una relación directa entre su energía y su velocidad. Se relacionan por la amplitud (A), según la ecuación típica de una onda: v= A· sin(w). Un equipo de ultrasonidos trabaja a 20 Khz-100KHz.

La propagación del sonido necesita un medio (en el vacío no hay sonido) ya sea líquido o gas, y se realiza por medio de una compresión-descompresión: es decir, las ondas de presión se propagan mediante el proceso conocido como rarefacción. La onda ultrasónica es capaz de romper las fuerzas de cohesión de un líquido (estas fuerzas son las que mantienen las moléculas del líquido cerca) generando microcavidades o microburbujas. Es lo que se conoce como el fenómeno de cavitación. Pero una vez que ha pasado la onda, el líquido tiende a restituir su forma provocando el colapso de las burbujas, y así restituyen las fuerzas de Van der Waals y los puentes de hidrógeno. Es decir, que el colapso cavitacional genera la energía suficiente como para romper enlaces químicos.

Se distingue entre la sonoquímica verdadera, que produce una reacción química, y la falsa, que provoca una mera agitación térmica. Cuando hay sonoquímica verdadera se produce la formación de intermedios radicalarios.
 
Fuente:
 

7 de noviembre de 2012

Ciegos de nacimiento aprenden a ‘leer’ con sonidos

Un equipo de científicos muestra vídeos de personas invidentes identificando expresiones faciales y fachadas de casas gracias a complejas señales de audio.


El aparato se llama vOICe y no es casual que las tres letras intermedias se escriban en mayúsculas. En inglés, voice es voz, pero OIC se lee como “OH! I see!” (¡oh! ¡veo!). Y el dispositivo se llama así porque transforma las imágenes en complejas señales de audio, permitiendo así que las personas ciegas vean por los oídos, igual que ven por los dedos cuando leen braille.

El sistema, que consiste en una minicámara situada en la frente y acoplada a un ordenador que emite los sonidos por unos auriculares, lleva en pruebas desde 1992, cuando el investigador holandés Peter Meijer lo presentó en sociedad. Ahora, científicos de Francia e Israel presentan pruebas de que el aparato puede servir para que ciegos de nacimiento aprendan a leer con sonidos. Sus resultados se publican hoy en la revista Neuron, referencia para los neurocientíficos de todo el mundo.

El estudio asegura que algunas áreas del cerebro de personas ciegas de nacimiento pueden aprender a procesar información visual a través de los sonidos. Sus conclusiones navegan a contracorriente en el mundo de la intuición, que sugiere que la corteza visual del cerebro se atrofia sin dos ojos que le aporten información. “El cerebro adulto es más flexible de lo que pensábamos”, afirma en un comunicado uno de los autores principales, Amir Amedi, de la Escuela de Medicina de la Universidad Hebrea de Jerusalén (Israel).

Amedi y sus colegas han enseñado a ocho ciegos de nacimiento a emplear uno de estos aparatos para aprender a leer con sonidos que representan la imagen visual de las letras. Según los autores, esta habilidad implica a una región del suelo del cerebro llamada Área de la Formación Visual de las Palabras, que supuestamente se activa al leer en las personas con el sentido de la vista intacto. Tras unas 70 horas de entrenamiento, afirman, esta región del cerebro también se activó en personas ciegas al leer con sonidos.

Una máquina de ejecutar tareas

Para Amedi y los suyos, estos resultados sugieren que el Área de la Formación Visual de las Palabras es sensible al tipo de información que le llega, y no al camino por el que llega la información (ojos u oídos). El cerebro sería entonces una máquina de ejecutar tareas y no tanto una máquina sensorial.

Los invidentes también fueron capaces de distinguir expresiones faciales, fachadas de casas y partes del cuerpo gracias a los sonidos transmitidos por el dispositivo. Los creadores del aparato llaman “paisajes sonoros” a estos sonidos, aunque son más bien molestos chirridos.

De confirmarse esta inverosímil plasticidad cerebral, las implicaciones son importantes, según Amedi. “Los dispositivos de sustitución sensorial [como el vOICe] pueden ayudar a los ciegos o a las personas con discapacidad visual a aprender a procesar imágenes complejas, como se ha hecho en este estudio, o pueden usarse como intérpretes sensoriales que proporcionen información en alta resolución de apoyo a una señal visual simultánea procedente de un dispositivo externo”, vaticina el profesor.

Ya en 2003, la BBC informaba del caso de Michelle Thomas, una mujer ciega de nacimiento que reconocía las paredes y las puertas de su casa e incluso distinguía “un CD de un disquete” gracias al dispositivo vOICe. “Está viendo con sonido”, afirmaba la BBC. Sin embargo, una década después, estos aparatos siguen básicamente arrinconados en los laboratorios.

Fuente:

3 de noviembre de 2012

Alphas: Micrófonos y megafonía

Bueno, tras una larga ausencia por las vacaciones, vuelvo por aquí. En EEUU están poniendo la segunda temporada de la serie Alphas, de la que ya comenté algo en una ocasión. El primer episodio de esta nueva temporada empieza con un robo en un supermercado por parte de unos alfas. Uno de ellos tiene el poder de aturdir a la gente con un grito, y para llegar a todo el mundo del establecimiento, utiliza uno de los micros de las cajas, de forma que el sistema de megafonía difunde su voz. No se llega a especificar qué hace exactamente el grito de ese alfa, pero la gente afectada se tapaba los oídos con expresión de dolor, y llegaba a caer al suelo.

Bueno, como ya comenté hace tiempo, cualquier sistema de transmisión, grabación o reproducción de audio, modifica en mayor o menor medida la señal original, lo que haría que el grito fuera bastante inocuo tras pasar por el sistema de megafonía.

Vamos a suponer primero que el grito del alfa es un sonido de muy alta intensidad, algo más que razonable, dado los síntomas que vemos en la escena (gente tapándose los oídos con dolor). Como sabéis, el sonido es una onda mecánica, una vibración. La intensidad de un sonido (el volumen) corresponde a la amplitud de la vibración. Si pintamos en una hoja de papel un seno (la función matemática, claro), la amplitud es la diferencia de altura entre una cresta y un valle.

Todo sistema de sonido, tiene un límite en la amplitud que soporta. Dicho límite puede ser buscado por el propio diseño, o simplemente un límite físico de sus componentes. Bien, si la señal en cuestión tiene una amplitud superior a ese límite, dicha señal es recortada, provocando una distorsión. Siguiendo con la hoja de papel, intentemos pintar un seno, pero con una amplitud tan grande que nos salgamos de los bordes del papel. Lo que queda dentro del papel es un seno con las crestas y valles recortados. Esto es lo que se conoce como saturación, y esa señal distorsionada y limitada sería lo que se transmitiría por el sistema. Fijáos que no sólo implica una distorsión del sonido original, sino una limitación al volumen del mismo. Llegado a ese límite, por mucho que aumente el volumen del sonido original, no aumentará el volumen de lo que se escuche en los altavoces.

Dos gráficos de un seno. El gráfico superior muestra una función seno normal. El gráfico superior muestra un a dunción seno con una amplitud superior al margen del dibujo, y por tanto, con los valles y crestas truncados.

Si el poder aturdidor del grito residía en su volumen, el alfa no ganaría nada usando el sistema de megafonía, puesto que el micro, el amplificador o cualquier otro elemento del sistema, se habría saturado mucho antes. Ocurre lo mismo cuando hablamos por teléfono y nuestro interlocutor está en un ambiente ruidoso y no nos oye bien. Por mucho que nos desgañitemos al hablar, él no nos escuchará con más volumen. De hecho, nos escucharía peor, pues posiblemente nuestra voz le llegaría distorsionada. Así que no gritéis al teléfono.

¿Y si no es una cuestión de intensidad? Tal vez el grito tenga determinadas frecuencias (algunas incluso inaudibles) que combinadas de forma precisa produzcan ese efecto. Bueno, en este caso os recomiendo releer uno de los posts que mencioné antes. Básicamente, salvo que estemos hablando de un sistema de alta fidelidad (y la megafonía de un súper no lo es), los distintos elementos implicados (sobre todo, el micro y los altavoces) no tienen una respuesta lineal en frecuencia. ¿Qué quiere decir eso? Pues que cada frecuencia sufrirá una amplificación algo diferente, lo que también distorsiona la señal. Además, sólo se transmite un determinado rango de frecuencias (lo que se llama, ancho de banda). Un sistema Hi-Fi está limitado al rango audible (hasta 20 KHz). La megafonía de un supermercado tendrá un rango menor. En cualquier caso, eliminamos frecuencias no audibles, y parte de las altas frecuencias audibles. Y las que no eliminamos, las alteramos.

Así que si el secreto del grito está en el uso de determinada combinación de frecuencias, tampoco es útil usar la megafonía del establecimiento. El alfa sólo debería haber afectado con su grito a los que lo estuvieran escuchando directamente.

Fuente:

google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0