Latest Posts:

Mostrando las entradas con la etiqueta aprendizaje. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta aprendizaje. Mostrar todas las entradas

15 de noviembre de 2016

Descubre para qué usamos cada elemento químico con esta tabla periódica interactiva

Esta es una de esas webs que me hubiera gustado tener a mano durante la secundaria. “¿Para qué quiero saber el número atómico del estroncio?”, me pregunté alguna vez. De haber sabido que se utiliza como colorante rojo en los fuegos artificiales, a lo mejor me habría interesado más el tema.
El físico Keith Enevoldsen —que al parecer es un amante de la tipografía Comic Sans— ha creado una tabla periódica interactiva que ilustra para qué usamos cada uno de los elementos químicos en el mundo real. Pasa el ratón por encima de algún elemento y descubre sus aplicaciones, una breve descripción y una explicación del grupo al que pertenece.
También puedes comprarla a tamaño póster o descargártela en PDF para imprimirla tú mismo. Será como volver a la secundaria, pero con algo más de contexto. Lástima que no esté en español. [elements.wlonk.com]
Fuente:

11 de noviembre de 2016

Root, un robot pintor que ayudará a los niños a aprender a programar

codewithroot
Julián da Silva, uno de los responsables por este nuevo robot, perteneciente a un grupo de investigación en la universidad de Harvard, nos presenta root.
Se trata de un robot que pretende ofrecer recursos para que los niños trabajen con conceptos relacionados con operaciones lógicas, algo que ayudará a los que en el futuro quieran dedicarse a la programación, o simplemente a desarrollar una habilidad que puede usarse en prácticamente todos los sectores personales y profesionales: el uso del raciocinio lógico.
Se trata de Root, presentado en codewithroot.com, donde enlazan a la campaña en kickstarter que han comenzado para hacerlo posible. El objetivo es tener un dispositivo que ayude a que los usuarios entiendan las consecuencias de las acciones que configuran en la tableta, existiendo una alta cantidad de combinaciones para que pueda usarse por niños de diferentes edades.
Con un diseño que recuerda a las aspiradoras Roomba (de hecho, uno de los creadores fue desarrollador de producto en la empresa Irobot, responsable por Roomba), se trata de un hexágono con parachoques y un escáner en su parte inferior, con un rotulador que permite que pueda pintar en superficies como pizarras blancas. El control de robot se realiza con Square, para tabletas, desde donde se dan las instrucciones con bloques gráficos en el primer nivel y con programación en modo texto en el último.
Desde ordenar que el robot dibuje a partir de una linea previa existente en la pizarra, a solicitar que escriba una palabra específica, Root puede también detectar distintos colores en la superficie de la pizarra, emitir sonidos o evitar choques con objetos.
Estará disponible en marzo de 2017 por un precio de unos 199 dólares, aunque en kickstarter ya hay opciones para adquirirlo por 145 para los más rápidos.
Fuente:

7 de noviembre de 2016

España: Con tareas desde los cinco años

Las tareas escolares cada vez empiezan antes y su conveniencia divide a la comunidad educativa.

Almudena, de cinco años, rellena las fichas con las letras del abecedario con la ayuda de su madre. PACO PUENTES / Vídeo: Campaña 'Los deberes justos' de Eva Bailén para Change.org

ADVERTISEMENT
Alberto va con sus deberes a todas partes. Los lleva a casa de la abuela los fines de semana cuando toda la familia come junta. No quiere dejarlos sin hacer. Su madre, Reyes, está preocupada porque su colegio “mete mucha caña” a los niños.  Alberto tiene cinco años, está en el último curso de Educación Infantil y dedica una hora y media cada tarde a rellenar fichas con las letras del abecedario en mayúsculas. Su colegio, un público de un barrio de Sevilla, no es una excepción, según Reyes, que intentó cambiar al niño pero se encontró en todos los de alrededor fichas y tareas para casa. Tampoco encontró apoyo en otras familias: “Al resto de padres no les parece mal, inculcan competitividad a sus hijos desde pequeños”. La división entre los que quieren tareas para sus hijos y quienes prefieren que no empiecen tan pronto es una muestra más del amplio debate abierto en España entorno a los deberes, que ha llevado a la confederación de padres de la pública a convocar una huelga de tareas escolares para el próximo noviembre.

En el colegio público El Vetón, en Majada de Tiétar (Cáceres), hay familias que le reclaman tareas para que sus hijos de cinco años las hagan en casa. “Creen que es como un deporte: Si corro todos los días, ganaré la maratón. Pero no es así. Cada uno tiene su proceso madurativo. Si el niño te pide herramientas para leer, dale todo, pero los procesos mecánicos son un error”, explica Jorge Torres, maestro de Infantil en ese centro, con 11 años de experiencia.

Almudena, también con cinco años, resopla cuando llegan los fines de semana y las fichas. Le toca la letra i. María José, su madre, cree que el trabajo “no es excesivo” pero admite que a su niña nunca le apetece: “Nos ponemos juntas los domingos por la mañana”. La que le preocupa es la otra hija, Ana María, que acaba de entrar en 1º de la ESO a los 11 años en un instituto de Sevilla después de pasarse los dos últimos cursos “sin parar de hacer deberes cada tarde hasta la hora de cenar”.

Hace más de un año que el debate sobre la conveniencia de los deberes va y viene en España. En 2015, una madre, Eva Bailén, inició una recogida de firmas para pedir su “racionalización” después de ver cómo a su hijo mediano se le iba la infancia sin un respiro para jugar. Su campaña sigue abierta y ha impulsado intentos de regulación desde distintas comunidades autónomas. Casi al mismo tiempo, la confederación de asociaciones de familias de la escuela pública, la CEAPA (con 12.000 asociaciones), empezó a reivindicar que estas tareas desaparezcan definitivamente de la vida de los niños.

 Hacer deberes antes de empezar la enseñanza obligatoria, como le pasa al pequeño Alberto y en menor medida a Almudena, sigue siendo excepcional. Pero las primeras quejas han hecho que la CEAPA alerte de una “primarización” de la enseñanza en la guardería, en la que se empuja a los menores a que salgan “sabiendo ya leer y escribir en lugar de respetar su forma de aprender desde el juego”, explica su presidente, José Luis Pazos. Los datos preliminares de una encuesta a 1.748 familias que acaban de presentar muestran como el 6,84% de los encuestados que solo tienen hijos en Infantil estiman que sus niños llevan una hora diaria de tarea a casa. Pero el debate está abierto sobre todo en Primaria y se extiende a las etapas de secundaria donde hay niños, como la hija mayor de María José, que no levantan la cabeza del libro en toda la tarde.

El artículo completo en El País (de España)

31 de octubre de 2016

6 iniciativas de conocimiento abierto que mejoran la educación


Derribar barreras físicas, eliminar requisitos y papeleo y facilitar el amplio acceso a la información que generamos: esos son los pilares del movimiento que promueve el conocimiento abierto, una tendencia que suma cada vez más iniciativas y que apunta a convertirse en un motor importante para la economía de muchos países.

Los datos juegan un papel importantísimo en la educación y no es sorpresa que sea ésta una de las áreas que más puede beneficiarse con la apertura del conocimiento. Solamente en  Estados Unidos, la apertura de conocimiento en el sector educativo representa una oportunidad de negocio cercana al billón de dólares al año.

Tomando esto en cuenta, te mostramos seis proyectos que nos muestran el inmenso potencial que tienen las plataformas de conocimiento abierto para abordar problemas complejos en el sector educativo:
  • CIMA
El Centro de Información para la Mejora de los Aprendizajes (CIMA) es el portal de Estadísticas Educativas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Esta innovadora plataforma presenta 40 indicadores comparables entre sistemas educativos de América Latina y el Caribe e incluye perfiles nacionales para visualizar el panorama educativo en cada país. De esta manera, con su uso se ayuda a promover el diseño e implementación de políticas educativas efectivas basadas en la evidencia y que contribuyan a mejorar la calidad de los aprendizajes en la región.
  • Open Text Book
Open Text Book es una iniciativa nacida en Estados Unidos que propone el acceso libre y gratuito a los contenidos de los libros de texto, aprovechando la flexibilidad de las licencias de la plataforma Creative Commons. Este movimiento comenzó a tomar forma en 2010 y ha tenido un fuerte impacto en las universidades americanas. Según algunos estudios, en algunos casos, se han logrado tasas de ahorro en libros hasta del 80%.
  • Portal de Datos Abiertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
El Portal de datos abiertos de la UNAM es un ejemplo de cómo los datos abiertos pueden servir para generar recursos pedagógicos. Por ejemplo, más de un millón de entradas del Instituto de Biología dan cuenta de todas las especies identificadas por la Universidad en el mundo, creando un repositorio de gran valor para estudiantes, investigadores y público en general.
  • El caso Chile: Formulación de políticas educativas utilizando técnicas de análisis de datos masivos
En Chile, este trabajo del Centro de Investigación Avanzada en Educación, ganador  del premio Gobernarte del BID, demuestra el potencial que los datos pueden tener para la formulación de políticas públicas educativas. El proyecto utilizó y comparó datos del censo de población con los datos de matrícula para comprender el desplazamiento de los estudiantes a las escuelas. Se detectó que existen desequilibrios en la oferta educativa y que, en ocasiones, los estudiantes más desfavorecidos se ven obligados a recorrer mayores distancias para poder llegar a la escuela. También demostró que este desplazamiento incluye recorridos por zonas con mayores tasas de inseguridad, lo cual permite predecir y prevenir fenómenos de alto impacto social como la deserción y el abandono escolar.
  • México: Mejora tu escuela
Esta exitosa plataforma permite a los ciudadanos conseguir información sobre el rendimiento de las escuelas en ese país. Con una metodología de análisis de datos que toma como base los resultados agregados de los alumnos en matemáticas y español, la plataforma genera un índice de rendimiento para cada escuela en el país. Los resultados se transforman en un “semáforo educativo” que permite realizar comparaciones entre escuelas. El proyecto genera información relevante para los padres y también para los diseñadores de políticas, quienes pueden identificar las escuelas que necesitan mayor atención. La aplicación también permite conocer los programas públicos para la mejora de la educación.
  • Open Badges
Esta iniciativa puesta en marcha por Mozilla Foundation, busca generar una categorización más precisa de las habilidades profesionales de las personas a través de un sistema de certificados digitales que son accesibles y reutilizables. En el sector educativo, estos certificados se han utilizado para reconocer los esfuerzos de los profesores y educadores que apuestan por la innovación, así como para facilitar la transición de la universidad al mercado laboral.

Estos son solo algunos proyectos emergentes en este campo ¿Conoces algún proyecto más que use datos abiertos para mejorar la educación? Compártelo con nosotros mencionando a @BIDEducacion

Fuente:

BID
 

7 de agosto de 2016

A. Grayling: «Hay que enseñar a los niños Filosofía desde los seis años»

El conocido filósofo británico, escritor y fundador del New College of the Humanities de Londres defiende la importancia de la presencia cuanto antes de esta asignatura en las aulas para enseñar a pensar.



Fundador del New College of Humanities de Londres, escritor y editor de más de treinta libros, columnista de los prestigiosos «The Guardian» y «The Times», y también miembro del Foro Económico Mundial. Si con alguien es obligado hablar sobre el bien, el sentido de la existencia y la importancia de la filosofía en la educación, es con Anthony Grayling, que acaba de pasar por Madrid para impartir una charla a los alumnos del King’s College.

-¿Cuándo hay que empezar a enseñar Filosofía en las aulas?

-Desde el principio. A los seis años se puede enseñar a pensar a un niño de una manera filosófica. Podemos ir a clase y preguntarles a los pequeños ¿Dónde está el agujero cuando te comes el dónut? Y que busquen diferentes respuestas a través del razonamiento; así comenzarán a entender la importancia de cuestionarse las cosas que no son tan obvias. La Filosofía debería ser obligatoria en la escuela porque nos hace reflexionar sobre el sentido del ser humano, de la sociedad y de nuestro lugar en el mundo. Otra cosa es que sepamos explicarla bien y que inspiremos a los estudiantes. Los ingleses tenemos un dicho: puedes llevar el caballo al agua, pero no puedes hacerle beber». Ese es el problema, ser capaces de que aprecien la importancia que tiene la Filosofía para sus vidas

-Pero... ¿a nivel laboral, merece la pena estudiar Filosofía?

-Cuando hablamos con empresarios, como hacemos en el New College, nos dicen que les gustan los filósofos porque son gente que saben pensar, que pueden gestionar problemas complejos y encontrar soluciones creativas. Un máster en Filosofía puede ser muy rentable para un graduado en Derecho, Marketing o Periodismo, o para profesores. En cualquier caso, la Filosofía se centra en el pensamiento, en la fuerza de los argumentos, en ser capaz de entender los puntos de vista de otro, no en los procesos productivos. En su ensayo sobre la Ilustración, Kant dice que en todas partes oye decir al recaudador de impuestos, «paga»; al policía, «obedece»; y al sacerdote, «cree». Pero no oye a nadie decir, «piensa». Una vez que empezamos a pensar, comenzamos a ser independientes y a ser capaces de ver a los demás como realmente son.

-¿Y cómo somos?

-Fundamentalmente buenos, y es fácil de demostrar. ¿Por qué todos los periódicos hablan de guerras, asesinatos, conflictos y otras terribles noticias? Porque es noticia. Porque no es lo normal. Porque lo normal es que haya millones de buenas cosas que pasen en el mundo cada segundo.

-¿Cuál es el sentido de la vida?

...

El artículo completo en: 

ABC
 

29 de julio de 2016

¿Cuáles son los países de América Latina con las mejores universidades?

Las mejores universidades de América Latina

1
Universidad de Sao Paulo (Brasil)
  • 2 Universidad de Campinas (Brasil)
  • 3 Pontificia Universidad Católica de Chile (Chile)
  • 4 Universidad de Chile (Chile)
  • 5 Universidad Federal de Río de Janeiro (Brasil)
  • 6 Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro (Brasil)
  • 7 Universidad Federal de Minas Gerais (Brasil)
  • 8 Instituto Tecnológico de Monterrey (México)
  • 9 Universidad Nacional Autónoma de México (México)
  • 10 Universidad de los Andes (Colombia)


Brasil suele ser uno de los países de América Latina más representados en los rankings mundiales de las mejores universidades del mundo. Y cuando compite contra toda la región, se luce aún más. 

Así lo refleja el primer ranking de universidades latinoamericanas elaborado por la publicación británica Times Higher Education (THE), especializada en educación y conocida por sus listados universitarios mundiales.

En este listado Brasil es el líder indiscutido de la región.
En la edición latinoamericana del ranking de THE aparecen 50 centros y se basa en 13 indicadores de rendimiento, igual que el listado mundial, que abarcan desde la proporción entre alumnos y personal, hasta la influencia del centro a nivel internacional. 

El secreto de Brasil

Brasil encabeza los primeros dos puestos, posee la mitad de las universidades en el top diez y detenta 23 de los 50 centros educativos listados en total

En los primeros dos lugares del ranking se encuentran la Universidad de Sao Paulo y la Universidad de Campinas, ambas ubicadas en el estado de Sao Paulo.

El país vuelve a aparecer dentro del top diez en los puestos cinco (Universidad Federal de Río de Janeiro), seis (Pontificia Universidad Católica de Río de Janeiro) y siete (Universidad Federal de Minas Gerais).
Entrevistada por THE, Carolina Guzmán-Valenzuela, investigadora del Centro de Investigación Avanzada en Educación de la Universidad de Chile, explicó que el éxito de Brasil a nivel universitario se debe a sus publicaciones de calidad, su elevada producción de patentes y su alto gasto en investigación y desarrollo en relación al producto bruto interno (1,15%). 

Por su parte, Javier Botero Álvarez, especialista de educación superior para América Latina del Banco Mundial, dijo a THE que las universidades públicas de Brasil sobresalen por dos factores: una elevada financiación estatal y un selecto sistema de elección de estudiantes

El liderazgo educativo de Brasil en la región se mantiene a pesar del estancamiento actual de la economía de país y los recortes de financiamiento que están sufriendo las universidades estatales.

El artñiculo completo en:

BBC

“Shanghai mastery”: Conoce los secretos de los mejores profesores de matemáticas del mundo


SHANGHAI MASTERY 
613 puntos
es el resultado de Shanghái-China en la prueba PISA de matemáticas, el más alto del mundo
  • 119 puntos sobre el pormedio de todas las economías y países examinados, que es el equivalente de
  • 3 años extra de educación
  • Shanghái-China es también el mejor de todas las economías en lectura
  • Singapur y Hong Kong-China son los que siguen a Shanghái en la lista de los mejores

No por casualidad los maestros de matemáticas de Shanghái son considerados los mejores del mundo: se han ganado su reputación a fuerza de resultados descollantes de sus alumnos en competitivas pruebas internacionales.

El método de enseñanza en la ciudad más poblada de China se ha convertido ahora en un producto cultural de exportación.

Lo llaman "Shangai Mastery" (Maestría de Shangái). Y la mitad de las escuelas de Reino Unido adoptará este sistema en sus aulas de primaria, después de un período de prueba iniciado en 2014 y tras el anuncio del gobierno, esta semana, de una inversión de US$55 millones para apoyar a los maestros en la transición.

Esta técnica de enseñanza genera alumnos de alto rendimiento en porcentajes que son la envidia del resto del mundo docente.

Según algunas mediciones, los estudiantes de Shanghái alcanzan los mismos resultados que otros niños con tres años más de escolaridad en otras partes del mundo.

En las pruebas PISA de matemáticas, Shanghái-China se mantiene en el primer lugar del ranking con 613 puntos, 119 puntos por sobre la media de todos los países y economías participantes.

Y los índices muestran que el porcentaje de estudiantes de 15 años que son "analfabetos numéricos" -esto es, incapaces de realizar cálculos básicos- está 10 puntos por debajo del de países como Estados Unidos o Reino Unido.

Pero, ¿cuál es el secreto del éxito de Shanghái


Conceptos primero

Para empezar, el método chino se basa en organizar cada lección en torno a un concepto matemático único, sea el principio básico de la suma, la lógica de resolución de ecuaciones o la comprensión de una fracción como parte de un entero.

El que sea, pero uno por vez.

Esa noción única es cubierta de manera metódica y sistemática, a tal punto que la clase entera se detiene hasta que todos los niños la hayan comprendido.

"En muchos países se considera que una buena lección es una que logra cubrir mucho material. Cuanto más progreso se registre, mejor es la clase", señala Mark Boylan, experto en educación de la Universidad Sheffield Hallam, en Reino Unido, y colaborador de la revista Schools Week.

"Pero en Shanghái el énfasis está puesto en asegurarse que una idea o principio ha sido cabalmente aprendido en una lección, de tal manera que no haya que volver a enseñarlo en el futuro".

Expertos en educación consideran que el "Shanghai Mastery" es riguroso y demandante, apoyado en libros de alta calidad que se actualizan una vez al año y desplazan por completo a las fotocopias y hojas de ejercicio tan comunes en otras partes del mundo.

El artículo completo en:

BBC 

3 de julio de 2016

Experimentos: Efecto invernadero con caja de zapatos


Experimento nº 4: Efecto invernadero con caja de zapatos
 
Material necesario:
  • Caja de zapatos.
  • Termómetro (de los que miden temperatura ambiente).
  • Cristal (para tapar la caja).
  • Cartulina.
  • Pegamento.
Advertencia: este experimento requiere la ayuda de una persona adulta.

Paso a paso:

Para comprobar el efecto invernadero, te proponemos este sencillo experimento. ¡Ponte manos a la obra y verás qué fácil es!

Primero, busca una caja de zapatos o una caja que ya no necesites. Sólo necesitas la caja, así que la tapa, recíclala en el contenedor azul. Junto con la caja, también necesitarás un termómetro (pero no los que nos ponemos cuando estamos malos y vemos si tenemos fiebre), un cristal del tamaño de la tapa, una cartulina y un poco de pegamento.

Cuando tengas todo esto, coloca el termómetro dentro de la caja. Dobla la cartulina en ángulo recto, y pégala de forma que la caja quede dividida en dos partes. La idea es que cuando pongas la caja al sol, la cartulina haga que el termómetro esté en sombra.

Déjalo 15 minutos en esa posición y después anota la temperatura. Después, sin mover la caja, la tapas con un cristal o un plástico transparente. Espera otros 15 minutos. Mira la temperatura que ahora marca el termómetro, verás que ha subido considerablemente.

¿Cómo explicamos esto?

Al poner la tapa transparente, el interior de la caja se calienta mucho más que sin ella. Ese es el efecto invernadero. En este caso, el cristal deja pasar la luz que calienta el interior de la caja. Pero el cristal no deja escapar el calor, que se queda dentro y por tanto aumenta su temperatura.

En la atmósfera hay unos gases, llamados de "efecto invernadero" que hacen lo mismo que el cristal: dejan pasar la luz pero no dejan salir al calor y por lo tanto la tierra se calienta. Tal como hemos dicho más arriba, gracias a estos gases la tierra no es un témpano de hielo.

El problema es que en los últimos 200 años el hombre ha arrojado un exceso de estos gases (dióxido de carbono, metano, óxido nitroso, clorofluorocarbonos...) con lo que la temperatura de la tierra podría estar aumentando, con los perjuicios que ya hemos indicado y otros más que explicaremos en otra ocasión.

Este experimento fue tomado de la web de la Junta de Andalucia

Variantes:

 El experimento anterior es para nios pequeños de hasta 6 o 7 años.

Para niños mayores se pueden hacer las siguientes variantes, en el siguiente video puedes ver como hacer más experimentos con una caja, un pedazo de vidiro y un termómetro. Si bien el video no especifica los materiales el video se puede ver muy bien:


Y eso es todo amigos, cuídense mucho...


Leonardo Sánchez Coello
Prof. de Educación Primaria

19 de junio de 2016

El fracaso escolar no está en los genes



Dibujo20160515 gwas snp dna neuroendoimmune wordpress com
Un análisis del genoma de unas 300.000 personas descubre 74 variantes genéticas relacionadas con el logro educativo: el número de años de escolarización completados. A pesar de que podría parecer que el rendimiento educativo viene influido por los genes, resulta que las variantes genéticas solo dan cuenta de una pequeña fracción de las diferencias entre individuos en educación. El entorno y el origen socioeconómico influyen muchísimo más.

El artículo es Aysu Okbay, Jonathan P. Beauchamp, …, Daniel J. Benjamin, “Genome-wide association study identifies 74 loci associated with educational attainment,”Nature (11 May 2016), doi: 10.1038/nature17671; también recomiendo Cornelius A. Rietveld, Sarah E. Medland, …, Philipp D. Koellinger, “GWAS of 126,559 Individuals Identifies Genetic Variants Associated with Educational Attainment,” Science 340: 1467-1471 (21 Jun 2013), doi: 10.1126/science.1235488.

Más información divulgativa en Javier Sampedro, “¿Fracaso escolar? No culpen a los genes”, Ciencia, El País, 11 May 2016; Judith de Jorge, “No culpe a los genes de las malas notas”, Ciencia, ABC, 12 May 2016.

Dibujo2016015 Manhattan plot for EduYears associations nature17671-f1
Mucha gente piensa que los genes tienen un papel importante en el fracaso escolar. Sin embargo, los profesores suelen afirmar que el entorno y el origen socioeconómico son más relevantes. ¿La ciencia le da la razón a los profesores? Se han realizado un gran número de estudios sobre el papel de los genes en el rendimiento educativo. Para medirlo lo más habitual es usar el número de años de escolarización completados. Uno bastante famoso se publicó en la revista Science en el año 2013; estudió más de 100.000 personas pero solo encontró tres variantes genéticas relacionadas con el éxito educativo, pero solo permitían explicar el 2% de la variación observada. Esta semana se ha publicado en la prestigiosa revista Nature el artículo más completo hasta ahora sobre este tema. Daniel Benjamin, de la Universidad de Southern California en Los Ángeles, ha coordinado a 253 científicos que han estudiado casi 300.000 personas (en concreto, 293.723) de 15 países, aunque todos con ascendencia europea. La edad de los voluntarios fue superior a 30 años y la media de años de escolarización fue de 14,3 años. Este nuevo estudio ha descubierto 74 variantes genéticas que afectan al logro educativo o, lo que es lo mismo, al fracaso escolar. Pero estas variantes genéticas sólo dan cuenta de una pequeña parte, del orden del 3,2%, de las diferencias entre individuos en educación. Una persona que lleve dos copias de la variante genética que tiene el efecto más fuerte conocido lograría completar nueve semanas más de escolarización durante toda su vida que una persona sin ninguna de dichas copias. 

Dibujo20150515 Genetic correlations between EduYears and other traits nature17671-f2

Se ha estudiado variantes genéticas de 300.000 personas, pero secuenciar el genoma completo de cada persona tiene un coste muy alto. ¿Exactamente cómo se ha realizado este estudio genético? En genética, para identificar la relación entre los genes y algún rasgo observable, se usan los estudios de asociación de genoma completo (en inglés, GWAS, por Genome-Wide Association Study). En estos estudios se identifican ciertas marcas génicas llamadas polimorfismos de un solo nucleótido (SNP, siglas en inglés de Single Nucleotide Polymorphism, pronunciado snip). Se trata cambios en la secuencia de ADN que afectan a una sola letra, una sola base, sea adenina (A), timina (T), citosina (C) o guanina (G). El lugar donde se encuentra un snip se llama locus, o en plural loci; algunos loci están dentro de la secuencia de un gen, pero muchos otros están en regiones intergénicas. Se han identificado unos 9,3 millones de snips en sendos loci gracias al Proyecto 1000 Genomas. Los estudios de asociación de genoma completo comparan los datos genéticos obtenidos de miles o cientos de miles de personas con diferentes variantes de un rasgo y se busca desvelar qué genes están ligados a dichos caracteres. Por ejemplo, si ciertas variaciones genéticas son más frecuentes en personas con cierta enfermedad, se dice que estas variaciones están “asociadas” con dicha enfermedad. Estas variaciones son consideradas como señales de la región del genoma humano donde podría estar el factor causante de la enfermedad. La gran ventaja de los estudios de asociación de genoma completo es que no requieren secuenciar el genoma completo de los voluntarios. El genoma humano completo está repartido en 23 pares de cromosomas y contiene unos 3200 millones de pares de bases de ADN. Pero en estos estudios basta estudiar 9,3 millones de loci para cada individuo mediante un análisis estadístico usando herramientas bioinformáticas, aunque solo se han encontrado 74 loci con una asociación suficientemente significativa.

Dibujo20150515 Overview of biological annotation nature17671-f3
Se han encontrado 74 marcadores genéticos en sendos genes relacionados con el éxito educativo. ¿Se sabe cuál es la función que tienen estos 74 genes? Las bases de datos genómicas permiten descubrir los procesos biológicos implicados en cada snip, o variante de una sola letra en el ADN. Los 74 snips descubiertas por este estudio publicado en la revista Nature se encuentran en ciertas regiones del genoma que regulan la expresión de genes relacionados con el desarrollo del tejido nervioso del feto que da lugar al cerebro. Tanto el desarrollo de las neuronas durante el periodo prenatal como los procesos básicos de la construcción del cerebro. En concreto, están relacionados con la proliferación de las células madre precursoras de las neuronas, la migración de las neuronas recién formadas a las diferentes capas del córtex cerebral (que tiene seis capas), la proyección de los axones a sus dianas en otras neuronas, la forma en que brotan las dendritas y sus espinas en cada neurona, y la señalización neuronal y la plasticidad de las sinapsis, las conexiones entre neuronas, durante toda la vida. La identificación de estas variantes genéticas asociadas al desarrollo del cerebro y su funcionamiento sugiere que la correlación causa-efecto con el éxito educativo es relevante. Sin embargo, al cuantificar la capacidad conjunta de los 74 snips a la hora de predecir el rendimiento educativo se obtiene un valor muy bajo, de sólo el 3,2%. Por tanto, los 74 genes descubiertos no son los determinantes principales del rendimiento educativo.

Dibujo2015015 Gene-level biological annotation nature17671-sf9

Los genes descubiertos en el nuevo estudio solo explican parte del éxito educativo de los jóvenes. Sin embargo, los factores sociales y culturales influyen más que los genes. ¿Cómo se miden estas influencias? Para saber cómo influyen las variaciones genéticas en el rendimiento educativa se usa una herramienta matemática llamada análisis factorial. Esta herramienta permite cuantificar la significación estadística de las correlaciones entre variables, por ejemplo, entre las posibles causas y sus posibles efectos. El estudio de Daniel Benjamin, de la Universidad de Southern California en Los Ángeles, y sus colegas ha buscado correlaciones estadísticas entre las variaciones genéticas estudiadas y el número de años de escolarización completados. En esta nueva investigación no se han estudiado otros factores que tienen un impacto mucho mayor en los logros individuales, como la salud, la actitud de los padres y la calidad de la enseñanza. Sin embargo, a la hora de interpretar sus resultados, dado que la genética parece influir sólo un 3,2% en el éxito educativo, los investigadores han destacado el papel de la influencia social. La asociación genética con el nivel de estudios queda eclipsado por otros factores, como el nivel socioeconómico y educativo de la familia del niño. Muchos estudios de asociación de genoma completo han obtenido resultados similares en los últimos años. Los efectos genéticos no operan de forma independiente de los factores ambientales. Y muchas veces su efecto se puede calificar de secundario.

Dibujo20150515 The distribution of effect sizes of the 74 lead SNPs nature17671-sf2

 
Este tipo de estudios a gran escala cuestan mucho dinero y en este caso no se han encontrado los “genes del éxito educativo”. ¿Para qué aplicaciones prácticas sirven estos estudios genéticos? El rendimiento educativo es un fenómeno muy complejo en el que influyen muchos factores, luego parece razonable que esté más allá de los genes. Hace unos 20 años en los estudios genómicos era habitual en los medios que se hablara de los “genes de algo”, por ejemplo, los genes de la homosexualidad, o los genes de la obesidad. Sin embargo, hoy en día se considera un asunto muy polémico y que puede dar lugar a interpretaciones engañosas. Por ello los genetistas prefieren evitar usar el término de “genes de algo” y prefieren hablar de “predisposición genética”, o de “influencia genética”. Varios estudios han observado cierta correlación entre el nivel educativo y la salud mental durante la senescencia. Por ejemplo, que la educación parece ser un factor protector contra el Alzheimer. Los resultados de este estudio y el futuros trabajos que se basen en ellos nos permitirán comprender mejor cómo interaccionan los genes relacionados con el éxito educativo y con el envejecimiento del cerebro. Sin lugar a dudas, entenderemos mejor cómo mejorar nuestra salud en la tercera edad y qué cosas nos benefician mientras somos jóvenes en función de nuestros genes. Lo apasionante de la genómica hoy en día es que promete grandes avances en un futuro no muy lejano

Fuente:

La ciencia de la mula Francis

30 de enero de 2016

¿Podría conservar recuerdos una cabeza congelada?

El caso de Kim Suozzi, una joven cuya cabeza ha sido criopreservada después de morir, ha desatado una intensa polémica entre científicos. Si un día consiguen reanimarla, ¿conservará sus recuerdos? El debate implica cuestiones fundamentales sobre los límites entre la vida y la muerte.

Fotograma de la película "The Brain That Wouldn't Die" - Foto VP

El 17 de enero de 2013 la joven Kim Suozzi, de 23 años, falleció en su apartamento de Scottsdale, en Arizona, después de dos años de lucha contra un glioblastoma, uno de los tumores más letales. Minutos después, dos enfermeras y un médico introdujeron su cuerpo en una bañera con hielo y lo transportaron hasta las instalaciones centrales de la empresa. Seguidamente los técnicos cambiaron la sangre de Kim por un criopreservante y cortaron su cabeza para introducirla en una cuba metálica donde se conservará en nitrógeno líquido a la espera de que, en un futuro, alguien sea capaz de devolverla a la vida.
Kim pidió ayuda en redes sociales para conservar su cabeza
El caso de Kim conmocionó la opinión pública de EE.UU. después de la joven pidiera ayuda para sufragar los gastos de la preservación en redes sociales. "Congélame, Reddit", rezaba el cartel con el que se retrató y que le sirvió para conseguir el apoyo y el dinero para pagar a la empresa Alcor. Sus últimos días fueron filmados por un equipo de periodistas del diario The New York Times que acaban de publicar un mini documental sobre su caso y han vuelto a poner su historia de actualidad.  Tras leer el reportaje, el neurocientífico Michael Hendricks publicó un durísimo artículo en la revista MIT Technology Review en el que, bajo el título "La falsa ciencia de la criónica", atacaba a los gurús del transhumanismo que jalean este tipo de prácticas y argumentaba la falta de fundamentos científicos de la criopreservación de tejidos. "Nadie que haya vivido la experiencia de perder a un ser querido dejará de simpatizar con alguien que paga 80000 dólares para congelar su cerebro", escribía Hendricks. "Pero la reanimación o la simulación es una forma miserable de dar falsas esperanzas que va más allá de lo que puede prometer la tecnología y resulta imposible con el tejido congelado y muerto que ofrece la industria 'criónica'". "Aquellos que se benefician de esta esperanza", remataba, "merecen nuestra ira y desprecio".



Los reproches de Hendricks se centraban básicamente en dos aspectos: en la afirmación de algunos transhumanistas de que nuestros pensamientos y consciencia no son más que una serie de datos que podrían trasladarse incluso a un soporte físico y contra el uso de la 'conectómica' como argumento para defender que cuando una persona crionizada despierte en el futuro seguirá siendo ella misma. El neurocientífico negaba que un mapa detallado de las conexiones neuronales (el llamado conectoma) sea suficiente para restaurar la mente de una persona con sus recuerdos y su personalidad, y citaba sus investigaciones con el gusano nemátodo C. elegans, uno de los animales más estudiados y mejor descritos en biología. "Conocemos con detalle la identidad y todas las conexiones de sus 302 neuronas", explicaba Hendricks. "Si se pudiera cargar o simular un cerebro, ése sería el de C. elegans", insistía, "pero incluso con el conectoma en la mano, un modelo estático de la red de conexiones carece de la información necesaria para simular la mente del gusano. En resumen, la actividad neuronal no puede ser inferida de la neuroanatomía sináptica".
La criónica es una forma miserable de dar falsas esperanzas, asegura Hendricks
Las afirmaciones de Hendricks provocaron la reacción y respuesta de un equipo de investigadores que trabajan precisamente con C. elegans y entre los que se encuentra el español Ramón Risco, líder del grupo de investigación de la Universidad de Sevilla Cryobiotech. "Ante las afirmaciones de Hendricks hablando de la falsa ciencia de la criónica", explica a Next, "decidimos escribir un artículo respuesta bajo el título 'La ciencia alrededor de la criónica'". En este escrito, Risco y sus compañeros sostienen que "hay mucho más en la mente que la mera conexión sináptica entre las neuronas" e insisten en que sí que existen "pruebas que apoyan la posibilidad de que las características del cerebro que codifican los recuerdos y determinan el comportamiento pueden conservarse durante y después de la criopreservación".

"Lo que nos resultó más chocante", relata Risco, "fue que Hendricks citara el gusano C. elegans, cuando nuestro equipo ha demostrado precisamente que conserva los recuerdos después de congelarlo y descongelarlo". En el experimento realizado hace unos meses por Natasha Vita-More y Daniel Barranco, los científicos condicionaron a un grupo de nemátodos para que identificaran el olor característico de la butanona (un olor a cereza amarga como el de las piruletas) con la presencia de comida. A continuación, criopreservaron a los gusanos con la técnica de vitrificación - la misma que se emplea en criónica- y comprobaron que al revivirlos, los animales seguían conservando el recuerdo y acudían a la comida ante la presencia del olor. "Ponías solamente el odorante, sin comida, y se iban derechos a la butanona", explica Risco. "Es evidente que conservan el recuerdo".



Pero, ¿cuánto dura un recuerdo?

El artículo completo en: Vox Populi

26 de enero de 2016

Aprender nuevas palabras tiene el mismo efecto que el sexo

El placer también puede ser asociado al aprendizaje. Según acaba de revelar un nuevo estudio de las universidades de Barcelona (España) y la Otto von Guericke de Magdeburg (Alemania), que recoge la revista Current Biology, aprender nuevas palabras nos otorga el mismo placer que tener relaciones sexuales o comer chocolate.

El equipo de científicos realizó un experimento con 36 adultos con objeto de ver hasta qué punto el hecho de aprender un lenguaje podría activar el centro del placer y recompensa del cerebro. Así, los voluntarios participaron en dos sesiones de resonancia magnética en las que tenían que aprender el significado de palabras nuevas deduciéndolo a través del contexto.

Los investigadores reconstruyeron las fibras de sustancia blanca que conectan las diferentes regiones cerebrales de los participantes, descubriendo que aprender palabras nuevas activaba áreas del cerebro relacionadas con el placer y la recompensa (las mismas conexiones que responden a estímulos tan gratos como una comida preferida, el sexo o las drogas) y que que las personas con una mejor conexión en este área eran capaces de memorizar más palabras y también a más velocidad. Además, si esas palabras tenían asociadas una carga emocional, el resultado era aún mejor, evidenciando el valor de las emociones en el proceso de aprendizaje.

“La investigación muestra un posible aspecto emocional en el desarrollo del lenguaje”, afirma Antoni Rodríguez Fornell, coautor del estudio. Las conclusiones del trabajo abren la puerta a la exploración a lo largo de la evolución del ser humano de uno de los instintos más básicos: el de comunicarse.

Tomado de:

Muy Interesante

19 de enero de 2016

¿Sabías que la dislexia no tiene cura?

Ibone Saralegui, investigadora en Osatek / Hospital de Galdakao (Bizkaia), señala que la dislexia no tiene cura, pero que un tratamiento correcto y precoz puede mejorar notablemente la capacidad lectora y de comprensión de los afectados por esta alteración. Por otra parte, el porcentaje de disléxicos es muy superior entre los hablantes de lenguas opacas, tales como el inglés y el francés.

image_gallery

“La dislexia es la dificultad que presentan algunos niños para adquirir las destrezas lectoras, dificultad que les impide alcanzar con normalidad los aprendizajes relacionados con la escritura, independientemente de sus otras destrezas cognitivas, tales como la inteligencia, el razonamiento o la memoria”, explica la neurorradióloga Ibone Saralegui. Históricamente, se ha asociado la dislexia a problemas de percepción visual, pero las investigaciones más recientes desmienten dicha asociación.

Saralegui es la autora de una de estas investigaciones, llevada a cabo junto con el oftalmólogo Ricardo Martínez, realizada mediante resonancia magnética funcional (en inglés, fMRI, functional Magnetic Resonance Imaging) para evaluar la red neuronal relacionada con la lectura en niños con dislexia que no hayan recibido tratamiento específico con anterioridad. Los resultados del estudio muestran que los lectores con dislexia parecen tener una red neuronal para la lectura diferenciada de los normolectores y de aquellos con alteraciones de la motilidad (movilidad) ocular.

Subraya la investigadora que la dislexia no tiene una única causa, y que, probablemente, intervienen varios factores en su aparición. “En cualquier caso, uno de sus principales causantes es una alteración en la ruta fonológica para la lectura de los niños, lo que tiene una gran incidencia en la terapia que se les debe aplicar. Las terapias visuales y auditivas, por ejemplo, no son adecuadas en el tratamiento de estos niños”. Según Saralegui, “la dislexia no se cura. Muchos padres van a la consulta del oftalmólogo o del logopeda pensando que, tras un buen tratamiento, su hijo va a dejar de ser disléxico. Pero un niño (o un adulto) es disléxico siempre. Eso sí, con un tratamiento precoz y correcto, puede mejorar notablemente su habilidad lectora y su capacidad de comprensión”.

Lenguas opacas y lenguas transparentes

El estudio se ha realizado con niños castellanoparlantes, “aunque sus conclusiones podrían extrapolarse a los vascoparlantes” según Saralegui, “ya que el euskera y el castellano tienen un nivel de semitransparencia muy parecido. Las lenguas transparentes son aquellas en las que el grafema coincide con el fonema, es decir, en los que a una letra le corresponde, por lo general, un sonido. En las opacas (inglés, francés…), por el contrario, un grafema (la letra A, por ejemplo), puede pronunciarse de varias formas (‘a’, ‘ei’…). En la lectura el primer paso fundamental es este ensamblaje entre los fonemas y los grafemas”.

Las lenguas opacas presentan, por tanto, un problema añadido: hay que aprender varios fonemas para un mismo grafema. “Por eso, en dichas lenguas se duplica, casi, el porcentaje de niños disléxicos. En las lenguas transparentes y semitransparentes hay una menor incidencia de la dislexia, y ésta se presenta más tarde, aunque el problema de comprensión persiste”, señala la investigadora.

Referencias:

Differences in effective connectivity between children with dyslexia, monocular vision and typically developing readers: A DTI study. B. Garcia-Zapiraina, Y. Garcia-Chimenoa, I. Saralegui, B. Fernandez-Ruanova, R. Martinez. Biomedical Signal Processing and Control. 2016; 23: 19-27

Reading networks in children with dyslexia compared to children with ocular motility disturbances revealed by fMRI. I. Saralegui, JM Ontañón, B. Fernández-Ruanova, B. García-Zapirain, A. Basterra, E. Sanz-Arigita. Front Hum Neurosci. 2014; 8 (936): 1-15.

Automatic classification of dyslexic children by applying Machine Learning to fMRI images. Y. García Chimeno, B. Garcia-Zapirain, I. Saralegui, B. Fernández-Ruanova. Bio-Med Mater Eng. 2014; 24(6): 2995-3002.

Tomado de:

Cultura Científica

14 de diciembre de 2015

Robert Swartz: los exámenes prueban la memoria y no la inteligencia

El profesor emérito de la Universidad de Massachusetts (EEUU) Robert Swartz considera en una entrevista con Efe que el sistema de evaluaciones escolares puede probar puntualmente la memoria del alumnado, pero no muestra su inteligencia y creatividad y tampoco contribuye a su desarrollo.


Swartz, que participa en un seminario en el colegio Peleteiro de Santiago de Compostela sobre "Creatividad, pensamiento crítico e innovación en el currículum", opina que ese tipo de pruebas "suelen poner a prueba la memoria" de los alumnos, pero no sus capacidades, habilidades y conocimientos.

Advierte además de que a menudo se da la circunstancia de que el profesorado llega, incluso, a "preparar a los alumnos para las pruebas", mediante un método que consiste en repetir una serie de conocimientos aprendidos, para lo que es necesario que tengan que "repasar", y eso puede conllevar que olviden luego lo interiorizado para ese fin examinador y que, por ende, "el aprendizaje se vuelva un aburrimiento".

Filósofo y director del Centro Nacional para la Enseñanza del Pensamiento (NCTT, siglas en inglés), una especie de 'think-tank' o laboratorio de ideas para fomentar un aprendizaje más participativo y creativo de los alumnos, Swartz apunta que en Estados Unidos "los exámenes se han convertido en un negocio" para algunas empresas que son vendedoras de ese tipo de productos.

Indica así, con añoranza, que la iniciativa primigenia del programa internacional de evaluación de estudiantes, conocido como "PISA", estaba inicialmente diseñada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) para contrastar los resultados en unos y otros países, y para mostrar "algo más que memoria".

Confiesa ser consciente de que eso ha suscitado muchas críticas en diversos países de los que ven que esos exámenes obvian, precisamente, muchas de las potencialidades de los alumnos. Sin embargo, estima que PISA es una herramienta indicativa para ver la evolución y los progresos, aunque considera conveniente un debate profundo sobre ese tipo de pruebas para "poder mejorarlas".

En cuanto al hecho de que los resultados en España figuren en algunos indicadores por debajo de la media de países de la OCDE, que incluye a los estados más desarrollados del planeta, señala que "hay que tomarse seriamente la manera en que se educa" a las generaciones futuras.

Swartz explica que hace medio siglo que visitó España como estudiante y tuvo la oportunidad de viajar a diversos puntos de la Península Ibérica, aunque nunca a Galicia, pero observa que en los últimos años, en los que ha regresado para impartir programas de formación dirigidos a profesores a cargo del NCTT, ha constatado que los educadores aseguran que el modelo actual "no está funcionando".

"Algunos me dicen incluso que es un fracaso completo", comenta el profesor estadounidense, que trata de persuadir de que el papel del docente sea más de "guía de aprendizaje" para "abrir la mente" a los alumnos e invitarlos a tener "capacidad crítica" y a descubrir por sí mismos.

Afirma este especialista que las tecnologías han permitido abrir nuevas ventanas al conocimiento y constituyen una "verdadera revolución", por lo que el papel del profesorado está cambiando y debe adecuarse también a proporcionar "referencias" para que los alumnos puedan distinguir por sí mismos, porque "deben ser conscientes de que en internet cualquiera puede poner lo que quiera".

"No se trata de censurar" sino de facilitar que esas nuevas tecnologías, que entrañan también "riesgos", puedan ser "herramientas útiles" que susciten el interés por el conocimiento, enfatiza. Swartz asegura que sus propuestas de aprendizaje, que impartirá en un taller junto a la profesora Carol McGuinness de la norirlandesa Queen's University, llevan a los alumnos a estar "más felices, más comprometidos y más interesados en sus tareas" y, asimismo, a tener "mejores resultados en los exámenes".

Tomado de:

google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0