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15 de julio de 2015

EE.UU. quiere sólo energías renovables en 2050 y ya cuenta con un plan para ello

Estados Unidos ha sido desde hace varios años uno de los principales impulsores del uso de la energía renovable, por ello la proliferación de compañías que se dedican tanto a la fabricación de infraestructura en instalación de sistemas que aprovechan el uso de este tipo de energía tienen bases de operaciones en este país, esto sin mencionar las diversas iniciativas en California respecto a carga de coches eléctricospaneles solares gratuitos y por supuesto las nuevas Tesla Powerwall.
Pero esto no es suficiente y si de verdad se quiere llegar a un punto donde se elimine por completo la dependencia a las energías fósiles es necesario cambiar muchas costumbres, ya que la tecnología existe, ahora sólo falta tener un plan para para ello y en los Estados Unidos ya lo tienen.
Un futuro con energía limpia es técnica y económicamente viable, al menos en los EE.UU.
Mark Z. Jacobson, ingeniero civil y ambiental, actualmente dirige el Programa de Energía y Atmósfera de la Universidad de Stanford y acaba de publicar en Energy & Environmental Science un extenso y completo estudio donde afirma que el futuro bajo energías renovables es posible en los Estados Unidos y con el plan que propone, traza planes de trabajo para que los 50 estados lleguen a este objetivo en el año 2050.



Fuente:

2 de mayo de 2015

Chica de 14 años inventa un sistema de purificación de agua que funciona con energía solar

Deepika Kurup, de catorce años de edad, es una brillante científica y una gran conferencista, y su preocupación por el problema del agua es tan genuino que potencialmente moverá masas a tomar acción para cambiar el rumbo de la ecología.


Su idea surgió después de ver a unos niños en la India tomando agua sucia de un charco. A partir de eso, Kurup decidió, en sus palabras, “encontrar una solución a la crisis global de agua”. Su invento gano 25 mil dólares en el Discovery Education 3M Young Scientist Challenge; una competencia de ciencia para estudiantes de quinto a octavo grado (Kurup entró al concurso antes de ingresar a la secundaria).
Deepika Kurup pasó tres meses trabajando en su proyecto, revisando documentos de posgrado acerca de métodos de purificación de agua en lugar de ir de vacaciones de verano. Habló con su tutor de 3M todos los días y examinó independientemente el sistema de purificación en su jardín trasero, utilizando agua contaminada tomada de las instalaciones de tratamiento de aguas negras de Nashua, New Hampshire. Finalmente dio con un sistema que expone al sol el óxido de titanio y el óxido de zinc, creando una reacción química que genera grupos hidroxilos que a su vez matan bacterias dañinas.
En adición al resultado de sus experimentos, Kurup descubrió que en sólo cuestión de unas horas el agua que había sido filtrada por su compuesto –que cuesta alrededor de medio centavo de dólar el gramo— tenía considerablemente menos unidades de bacteria coliforme y de colonias de E.Coli.
A diferencia de los métodos populares de la actualidad para purificar el agua (usando lámparas de UV que requieren energía eléctrica o químicos que hacen que el agua sepa y huela mal), el método de Kurup puede funcionar fuera de la red, generando agua fresca y rica.
Actualmente, después de ganar el concurso, Kurup está interesada en hablar con otras compañías que podrían ayudar a patrocinar su método. “Mi próximo paso es solicitar una patente”, apuntó la niña. “Quiero empezar una organización sin fines de lucro para implementar mi innovación”. Esperemos que el mundo esté escuchando y el increíble ecométodo de Kurup comience a ser efectuado cuanto antes.
Tomado de:

20 de abril de 2015

¿Por qué son tan nocivas para el entorno las toallitas húmedas?

Son extremadamente útiles en el momento de cambiarle a un bebé los pañales. También para higienizarnos en un festival, un campamento o en cualquier otra situación en la que se complica el acceso al agua.
Tan prácticas son que nos hemos acostumbrado a utilizarlas incluso cuando no las necesitamos: para limpiarnos las manos después de comer una manzana o para sacarnos el maquillaje.
Y una vez usadas, acabamos tirándolas -casi siempre- al inodoro.
Pero lo que quizá la mayoría nosotros no sabe es que, al hacerlo, estamos causando un daño grave en los sistemas de desagües y en el medio ambiente.
Un informe reciente de una ONG británica afirma que la presencia de toallitas húmedas usadas en las playas británicas aumentó en 50% en el último año.

Manos
Hay quienes las usan por ejemplo para limpiarse las manos.

Según reporta el New York Times, la ciudad de Nueva York ha gastado más de US$18 millones para resolver problemas en sus plantas de tratamiento de aguas a causa de estas toallitas.
Y en Ecuador, por ejemplo, hace ya dos años, una empresa de agua pública pidió a los ciudadanos que no arrojasen las toallas húmedas al inodoro por los problemas que estaban generando en las estaciones depuradoras.
¿Por qué son tan nocivas? Porque, a diferencia del papel higiénico, estos paños no se desintegran con facilidad.

Robustas y duraderas


En muchas ciudades del mundo se han reportado bloqueos en las cloacas que se producen cuando las toallitas se mezclan con otros desechos.

Los paños húmedos están diseñados para durar.
En contraste con el papel común, cuando están húmedas mantienen su estructura y no se deshacen cuando las restregamos.
Esto quiere decir que no se rompen dentro del sistema de cloacas.
El artículo completo en:

2 de febrero de 2015

Claudia Cisneros: Última llamada de alerta antes de un segundo Baguazo

Estamos asistiendo a una de las más graves crisis de la Amazonía peruana desde el mortal Baguazo de Alan García. Otra vez Lima, medios de comunicación y gobernantes están preconfigurando el escenario tétrico de junio del 2009.

Algunos interesados en el tema indígena lo venimos advirtiendo ya desde hace algún tiempo, pero como en el pre Baguazo, los grandes medios solo privilegian la noticia cuando se bloquean carreteras o toman instalaciones no solo meses, sino años después de la queja, protesta y pedido de dialogo sostenidos por parte de los hermanos indígenas.
Lo que usted probablemente esté viendo en las noticias estos días es: indígenas bloquean producción de petróleo. Sin embargo, lo que los grandes medios no le cuentan es qué hay detrás, por qué se ha llegado a esta medida y hace cuánto tiempo los nativos vienen exigiendo respuestas al gobierno. Entonces, como en el Baguazo, los mercaderes presionarán para que se destraben los pozos y nuevamente se enfrentará a peruanos contra peruanos, policías contra nativos con el saldo de sangre y muerte que parió el mal manejo de la crisis en Bagua.
Es cierto que al menos 400 nativos achuares de la comunidad de Pampa Hermosa (cuenca de Río Corrientes) han cerrado las vías externas de acceso a la base de Jibarito paralizando la producción petrolífera de 14 pozos con la pérdida de producción de 3.100 barriles por día, según Pluspetrol. También es cierto que nativos kichwas de comunidades de la cuenca del río Tigre en Loreto han bloqueado el río Tigre y el acceso de embarcaciones de la empresa tras un mes de exigir ser escuchados por las vías regulares y administrativas. Hasta 14 lotes petroleros estarían paralizados. ¿Por qué? ¿Son salvajes, egoístas, ciudadanos de segunda clase como sugería el ex presidente Alan García?
Lo primero que hay que decir es que los apus de las federaciones FEDIQUEP, FECONACO, FECONAT y ACODECOSPAT, que representan a más de 100 comunidades nativas y a más de 20 mil peruanos, han reiterado una y otra vez que “no se oponen al llamado desarrollo o a la actividad petrolera; pero contra lo que están luchando es contra el abuso y la indiferencia sostenida del Estado hace 43 años. Contra una actividad petrolera que desde 1971 ha generado graves daños ambientales y sociales en las comunidades a lo largo de los ríos Pastaza, Tigre, Corrientes y Marañón. Daños oficialmente documentados por este gobierno con cuatro declaratorias de emergencia ambiental que no han servido para nada.
Cuatro instituciones públicas (OEFA, ANA, DIGESA, OSINERGMIN) lideradas por el MINAM evacuaron en el 2012 informes que confirmaron altísimos niveles de contaminación por hidrocarburos, metales pesados, arsénico, plomo, cadmio, entre otros, en lagunas, quebradas y suelos de los territorios de las comunidades.
Entre las conclusiones: comunidades enteras cuya agua no es más apta para el consumo humano, al menos 123 puntos contaminados por la mala actividad petrolera, incluidos el río Tigre, el Marañón y hasta una zona de nuestra Reserva Nacional Pacaya Samiria. Esto, en un sistema de vida en el que las aguas naturales son fundamentales para los animales y productos de la tierra de los cuales se alimentan, y por ende para la propia salud de los nativos. Cuatro declaratorias de emergencia en las cuatro cuencas entre 2013 y 2014 entrampadas en burocracia e indolencia.
Este gobierno se presentó en el 2011 como interesado al fin en resolver los graves problemas de más de 20 mil peruanos. Pero lleva más de tres años meciendo a las comunidades nativas. Los apus están cansados e indignados con este nuevo engaño del Estado peruano.
Primero fue una comisión multisectorial para recoger información, luego de dos años otra para implementar medidas desde mayo de 2014. Mesa que al día de hoy no llega a ningún puerto porque se niega a aceptar las justas, urgentes y necesarias demandas.
Demandas de titulación integral de su territorio, remediación de todas las zonas afectadas, compensación por uso de tierras, indemnización por daños y una evaluación ambiental integral independiente. Lo justo y lo que por décadas se les ha negado.
Pero para empeorar la crispación del escenario, al gobierno se le acaba el tiempo para licitar el nuevo contrato de los pozos y legalmente no puede hacerlo sin haber implementado la Consulta Previa en estos territorios. Cosa para la que también se les acaba el tiempo pues si no aceptan remediar e indemnizarlos, los nativos no accederán a la Consulta Previa y la licitación se vería detenida; por ende, la producción petrolera.
Estimada premier Ana Jara, los peruanos de bien agradecemos que retome las riendas políticas del gobierno. Agradecemos sus buenos oficios interpuestos para lograr la titulación de los hermanos de Saweto. Pero no esperemos que mueran más hermanos como Edwin Chota, o como los 34 hermanos policías y nativos del Baguazo. En sus manos, directa, política y legalmente, está el evitar no solo una nueva desgracia o derramamiento de sangre, sino lograr que la justicia, equidad, inclusión y derechos alcancen a estos peruanos históricamente maltratados.
Fuente:

24 de enero de 2015

Maya Penn: activista y empresaria de 14 años

Maya es, activista, diseñadora, animadora, programadora, conferencista, filántropa, escritora, ilustradora, entre otros talentos.


La diferencia entre la gente buena y la que cambia el mundo para bien es lo que la última se atreve a hacer. No hay una edad límite para empezar a hacer algo que modifique nuestro entorno.
Maya Penn es una chica de sólo 14 años que lleva la mitad de su corta vida emprendiendo. Ahora es diseñadora de moda ecológica, autora de libros para niños, ambientalista, animadora, programadora, filántropa, entre otros talentos.
La nota completa en:

7 de enero de 2015

¿Queda algún lugar sin contaminar en el planeta?



A donde quiera que uno vaya podrá encontrar basura. 
 
Parece que los seres humanos hemos hecho un meticuloso trabajo a la hora de contaminar los ríos, océanos y la atmósfera en la Tierra. Pero, ¿es posible que quede algún lugar sin polución en nuestro planeta?

Entre unos 1,8 millones y 12.000 años atrás nuestros ancestros consiguieron dominar el arte de hacer fuego.

Los antropólogos suelen citar este punto como el momento que nos permitió convertirnos en humanos, dándonos la oportunidad de cocinar, mantenernos calientes y construir herramientas.

Pero el fuego también marcó otro momento clave: el inicio de la contaminación hecha por el hombre.

La contaminación o polución, por definición, es algo que se introduce en el medio ambiente y que lo afecta de forma negativa.

Mientras que la naturaleza muchas veces produce sus propios contaminantes dañinos, como el humo de los volcanes o las cenizas de los incendios forestales, los humanos somos responsables de la mayor parte de la contaminación que hay en nuestro planeta.

Aun así, el mundo es un lugar grande. ¿Habrá algún recóndito escondite libre de los males de la contaminación?

Para responder a esa pregunta lo mejor es dividir la naturaleza en cuatro grandes reinos: el cielo, la tierra, el agua dulce y los océanos.

El art{iculo completo en:

BBC Ciencia

9 de diciembre de 2014

Colombia: Conozca al hombre que se casó con un árbol

El hombre colombiano se casó con un árbol y pidió respeto a la naturaleza. (Foto: AP)

El hombre colombiano se casó con un árbol y pidió respeto a la naturaleza. (Foto: AP)


En un acto simbólico realizado en medio del Parque Nacional, en el centro de la capital colombiana, el joven declaró que con esta iniciativa se “está creando un precedente para que el ser humano se comprometa y no lapide la naturaleza".
Un jóven medioambientalista selló su amor con un árbol este domingo en Bogotá (capital colombiana) para exigir el cuidado de la naturaleza.

En un acto simbólico realizado en medio del Parque Nacional, en el centro de la capital colombiana, el hombre identificado como Richard Torres, vestido con un traje blanco y corbata roja, el joven declaró que con esta iniciativa se “está creando un precedente para que el ser humano se comprometa y no lapide la naturaleza".

"Los declaro compañeros de vida y amor puro para siempre, en nombre de los elementos de la naturaleza y de Dios", fue el discurso de ceremonia dictado por la actriz colombiana Kristina Lilley.

Unas veinte personas asistieron al acto y con instrumentos musicales en mano celebraron la unión. De esta manera, reiteraron "el llamado a conservar el medio ambiente, a dejar de talar árboles, a cuidar los animales y a vivir en paz y tolerancia".

Boda similar

En octubre de este año, en el departamento de Arequipa, Perú, (sur del país) se realizó una ceremonia matrimonial simbólica entre quien aspira a ser gobernador por el partido Vamos Perú, y el agua.

En este acto simbólico, se reflejó su intención de proteger los recursos hídricos de la región, considerada la segunda ciudad más poblada del país y un importante centro industrial y comercial.



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Candidato peruano se casó con el agua

30 de noviembre de 2014

Perú: 57 activistas asesinados desde el 2002 (según NYT)

El 27 de noviembre de 2014, a cuatro días del incio de la COP, The New York Times, el diario más importante del mundo, publicó un editorial dedicado exclusivamente al problema de la tala ilegal en el Perú. Bajo el título de “Lucha por los derechos de la tierra” el diario le dice al Perú que sus esfuerzos para enfrentarse al tráfico de madera y a la tala ilegal, no han sido suficientes. De entrada le da una recomendación para evitar que más muertes como las de Edwin Chota sigan ocurriendo sin que el Estado haga algo.
Perú tiene que hacer mucho más para proteger a sus ciudadanos más vulnerables, ayudándolos a obtener títulos de propiedad y regulando de cerca la industria maderera. Siguiendo estos dos pasos básicos avanzaría mucho en la meta del gobierno de colocarse a la vanguardia de la lucha contra el cambio climático. Así también preservaría la vida de las comunidades que han sobrevivido de la tierra por cientos de años.

57 activistas asesinados desde el 2002

Luego, el editorial se centra en la terrible cifra presentada por Foreign Policy, que daba cuenta de que Perú era uno de los países con mayores cifras de activistas asesinados.
“Desde el 2002, de acuerdo con el informe, al menos 56 activistas peruanos han sido asesinados bajo extrañas circunstancias. “

La muerte de Edwin Chota y la falta de consulta

En un ejercicio de memoria, The New York Times recuerda que también en el 2002, el gobierno peruano premió a las compañías dándoles el derecho de talar árboles. Las concesiones no tomaron en cuenta el estilo de vida de los cientos de indígenas que vívian en las comunidades afectadas y que jamás fueron consultados.  Luego, expone el doloroso caso de Edwin Chota y la inacción del Estado.
Hace más de una década y en un esfuerzo por proteger a su comunidad,  Edwin Chota pidió que el Estado les otorgue un título de propiedad. El pedido nunca fue respondido. Después de que Edwin Chota fuera amenazado, acudió a la policía y les entregó documentación acerca de la tala ilegal en su área. El gobierno no tomó ninguna medida  importante.
Foto: The New York Times
Foto: The New York Times
El editorial del diario cierra con una sentencia acerca de la falta de respuesta del Estado en el tema de las muertes de los activistas asháninkas.
Poco después de los asesinatos, los funcionarios del gobierno se comprometieron a otorgar un título de propiedad a la comunidad . Esos son pasos positivos, pero llegan terriblemente tarde y cientos de comunidades indígenas aún carecen de derechos legales sobre sus tierras.
Si Perú quiere cambiar el concepto que ahora se tiene sobre el país, tendrá que dar muestras de un cambio en cuanto a protección de comunidades indígenas y regulación de la tala ilegal. Si quieres leer el editorial completo, dale aquí 
Tomado de:

UTERO

 

12 de noviembre de 2014

ONU pide a los países que eliminen las emisiones de gases de efecto invernadero para el 2100

  • El informe sobre cambio climático servirá de guía maestra para la cumbre de París e 2015

  • Los 800 científicos que han participado piden reducir a cero las emisiones de CO2

  • "Se dice que la acción climática nos va a costar mucho, pero si no actuamos costará más"






"No hay un plan B, porque no tenemos un planeta B", ha sentenciado Rajendra Pachauri, presidente del Panel Científico para el Cambio Climático de Naciones Unidas (IPCC, por sus siglas en inglés). La presentación en Copenhague (Dinamarca) del informe científico de síntesis elaborado por más de 800 científicos durante los últimos 13 meses no ha dejado espacio para la duda ni oportunidad alguna para la inacción. "Con este informe en las manos, la ignorancia ya no puede ser un argumento para justificar la inacción", ha asegurado Michel Jarraud, secretario general de la Organización Meteorológica Mundial.


El documento jugará un papel principal en las negociaciones internacionales del más alto nivel que se sucederán de ahora en adelante para tratar de firmar un acuerdo mundial, un nuevo Protocolo de Kioto, en al cumbre del clima de Naciones Unidas que tendrá lugar en París en 2015. Algo en lo que la comunidad internacional, con presencia de líderes de la talla de Barack Obama (EEUU) o Hu Jintao (China) entre otros, ya falló en la cumbre de Copenhague en 2009. "Este informe es más preciso, más fuerte y el nivel de confianza que ofrece es mucho mayor", ha explicado Jarraud. "Ya no hay excusas para la inacción", ha dicho. 

La influencia del ser humano sobre los sistemas climáticos es clara y está creciendo, y sus impactos pueden notarse ya en todos los continentes. Si no se hace nada al respecto, "el cambio climático aumentará las probabilidades de sufrir impactos severos, generalizados e irreversibles para la gente y para los ecosistemas", según el trabajo. Pero, hay opciones al alcance de la comunidad internacional para adaptarse al cambio climático y para realizar acciones de mitigación que puedan asegurar que los impactos del aumento de temperatura media global permanecen en en un rango manejable.

"Tenemos los medios para limitar el cambio climático", ha dicho Pachauri durante la presentación del informe, que ha podido ser seguido en vídeo por internet. "Las soluciones son muchas y permitirán el desarrollo económico y humano. Todo lo que necesitamos es la voluntad de cambio, y confiamos en que será motivada por el conocimiento y la comprensión de la ciencia del cambio climático", sentenció Pachauri.

El artículo completo en:

El Mundo (España)

7 de noviembre de 2014

Pedibús: iniciativas para ir andando al colegio

Cada vez más ciudades de todo el mundo organizan pedibuses para que los estudiantes vayan a pie al colegio.

El coche privado protagoniza la movilidad urbana y la forma de estructurar las ciudades. El desplazamiento a los centros educativos no es una excepción. Las consecuencias: más atascos, más contaminación, y una peor salud. El pedibús pretende cambiar dicha situación. Esta iniciativa, cada vez más utilizada en todo el mundo, organiza grupos de escolares para llegar a pie a su colegio acompañados de uno o más adultos. Este artículo explica las ventajas de ir andando al colegio, cómo organizar un pedibús, y algunas iniciativas destacadas.


Ventajas del ir andando al colegio

Los impulsores del pedibús señalan las siguientes ventajas de que los estudiantes vayan a pie a sus centros educativos:
  • Ambientales: Los coches son la principal causa de contaminación atmosférica en las ciudades al emitir gases nocivos como los óxidos de nitrógeno (NOx), y también contribuyen al cambio climático al expulsar gases como el dióxido de carbono (CO2). El pedibús reduce su uso y mejora así la calidad del aire urbano. Además, es un sistema de educación ambiental que inculca a los más jóvenes las bondades de caminar y de no usar el coche. 
  • Sanitarias: El rendimiento intelectual y físico de los estudiantes mejora, a la vez que sufren menores problemas de obesidad, según diversos estudios científicos.
  • Económicas: Al reducir el uso del coche privado, sus usuarios gastan menos en combustible y mantenimiento. La reducción de la contaminación se traduce en un menor impacto para la salud ciudadana y por tanto un menor gasto para la sanidad pública. Al reducirse los atascos en las horas punta, la productividad mejora.
  • De seguridad vial: Los automovilistas conducen con más cuidado al ver a los estudiantes en grupo y con una señalización adecuada. Se benefician así tanto los integrantes del pedibús como las zonas por las que transcurre el grupo. Los accesos a los colegios se vuelven más transitables y menos caóticos y se reduce el riesgo de atropello.
  • Psicológicas: Caminar es más relajante que ir en coche. Además, según una encuesta realizada a los participantes de una iniciativa de pedibús en San Sebastián, los niños prefieren esta forma de desplazarse cuando la prueban, y se vuelven más autosuficientes y responsables consigo mismos y con los más pequeños del grupo.
  • Sociales: Los estudiantes hacen amistades e interactuan entre ellos y con los responsables del grupo.

¿Se anima a organizar un pedibús? LEA ESTO

17 de septiembre de 2014

El consumo colaborativo: Gracias a Internet, se puede cultivar el huerto de un extraño o intercambiar semillas

Un día, la francesa Catherine decidió compartir parte de su comida. Empezó colocando un enorme macetero de la verja de su jardín. En él crecían, ufanas, varias plantas de fresones. Del macetero colgaba, a su vez, un cartel: Nourriture à partager. Servez-vous librement, c'est gratuit! (Comida para compartir. Tomad lo que queráis libremente. ¡Es gratis!). Con este gesto, Catherine se estaba sumando al movimiento de origen británico Incredible Edible, que invita a quienes poseen pequeños cultivos caseros a compartir los alimentos que producen sus tierras, ya sean hortalizas, frutas, hierbas aromáticas o medicinales.



Francia es terreno abonado para este tipo de iniciativas porque es frecuente poseer un terruño, un macetero o, en su defecto, agenciarse el del vecino para hacer crecer algo que llevarse a la boca. Así, cuando un grupo de amigos visita una casa como la de Catherine, suelen aparecer con una bolsa de ciruelas porque son incapaces de consumir todo lo que produce su ciruelo. Si, por el contrario, invitan ellos a comer, la ensalada que servirán como entrante llevará rábanos de su huerto, que además habrán sido recolectados pocas horas antes del festín.

La eclosión del consumo colaborativo y las posibilidades que Internet ofrece para llevarlo a cabo han permitido un crecimiento exponencial de ese deseo ancestral de invitar a alguien a sentarse a la mesa. ¿Qué es un compañero, a fin de cuentas, sino alguien con quien compartimos el pan?

En Francia, en Reino Unido y también en España proliferan, de un tiempo a esta parte, las plataformas en la Red que permiten realizar un consumo compartido de toda la cadena alimentaria. ¿Quieres cultivar pero no tienes tierra? Huertos compartidos, Tu huerto ecológico, Huertas Lúdicas y Huertos de ocio, entre otros, ponen en contacto a los interesados con propietarios de tierras que no tienen tiempo o ganas de cultivarla y están dispuestos a cederlas o alquilarlas.





Material informativo sobre una iniciativa para compartir semillas. / A. A.

Terreno más desconocido es el de las semillas. En Francia nació en 2012 Graines de Troc, una iniciativa que promueve el intercambio de simientes. Hasta la fecha, más de 2.000 personas de 30 países han participado a través de una plataforma en Internet. Pero no todo se queda en lo virtual. Graines de Troc ha impulsado además la creación de grainothèques o granotecas, es decir, espacios físicos donde se pueden dejar o recoger semillas libremente. La mediateca de la localidad de Lagord (en el departamento francés de Charente-Maritime) acogió en enero de 2013 la primera del país y hoy ya existen unas 60 repartidas por toda Francia. La última iniciativa de Graines de Troc busca sensibilizar a los niños sobre la importancia de la biodiversidad. Así, Drôles de graines (semillas raras o divertidas, en español) tiene por objetivo que los menores de la región de La Rochelle planten hasta 1.000 tomateras de 200 variedades diferentes que también ellos recolectarán llegada la hora. Recuperarán, además, las semillas plantadas para compartirlas con otros.

Un consumo colaborativo clásico es el que proponen desde hace años los grupos de consumo de proximidad: comprar entre varias personas a un mismo productor local para conseguir un mejor precio, favorecer la economía del entorno y consumir alimentos de mayor calidad y de temporada. Internet y las plataformas que se han creado para ello han logrado modernizar y aumentar su potencial. En España acaba de aterrizar La colmena que dice sí, una iniciativa creada en Francia que ahora busca expandirse también en Gran Bretaña con el nombre de The food assembly. Los promotores utilizan Internet para poner en contacto a productores locales y consumidores organizados en grupos de consumo. Yo compro sano, por otra parte, ayuda a crear grupos de consumo de proximidad y Ecoagricultor, otro ejemplo, reúne a agricultores, productores ecológicos, grupos de consumo y particulares.

En Francia también se han propuesto compartir los electrodomésticos que mantienen los alimentos en buenas condiciones con el objetivo de reducir el desperdicio alimentario. Partage ton frigo (Comparte tu frigorífico) anima los usuarios a intercambiar los productos de la nevera y así aprovecharlos al máximo. Incluso incita a dar un paso más allá: que instalen un frigorífico compartido en el edificio o la comunidad donde viven, o en su espacio de trabajo. La empresa que hay detrás de este nombre se encarga de la instalación del aparato, de su mantenimiento y limpieza, así como de la formación de los usuarios del servicio compartido.





Cartel de la iniciativa de compartir nevera.

¿Qué alternativa hay para quien no quiere semillas, ni tierra ni frutas, ni alimentos, sino a alguien cocine en su lugar? Compartoplato.es permite sacar partido del buen hacer gastronómico de los vecinos a un precio módico. ¿Por qué no comprar una porción de puchero cuando no hay ganas de trastear en la cocina? Super-marmite.com es la misma idea, que ha calado muy bien en la sociedad francesa.

Y si el puchero no es suficiente, ya que el consumidor aspira a sentarse a la mesa de alguien y que le sirvan, existen iniciativas como Eatwith, SocialEaters o Cookflat. Todas parten de la idea de ir a comer a casa de alguien, aunque con diferentes matices: se puede ir a hacer amigos, a encontrarse con extranjeros o a que esos extranjeros conozcan a autóctonos. En resumidas cuentas, quien quiera encontrar compañeros, oportunidades no te faltan.

Fuente:

El País Ciencia

12 de agosto de 2014

La cogeneración: un futuro más eficaz

La cogeneración es un ejemplo de alta eficiencia pues utiliza el calor surgido de la producción de electricidad en el mismo centro o instalaciones próximas. Sin aplicar esta tecnología de alta eficiencia, el calor generado al producir electricidad se perdería disipado en el ambiente. Por ello, la cogeneración en una opción atractiva tanto para el bolsillo como para el medio ambiente.

cogeneracion grafico La cogeneración: un futuro más eficaz



Las grandes centrales térmicas solo buscan generar electricidad. Al generarla, estas centrales solo aprovechan del 25 al 46% de la energía del combustible, perdiendo el resto en forma de calor que debe disiparse fuera de la central. Esto produce un fuerte impacto medioambiental debido a los problemas generados por la contaminación térmica.

En la cogeneración se busca un sistema distribuido de producción de electricidad. Con más plantas de pequeña potencia cerca de los centros de consumo se reducen las pérdidas por su transporte y distribución que son casi del 10%. Esto supone una gran mejora de la eficiencia energética, herramienta fundamental en la lucha contra el cambio climático y es que además la cogeneración ahorra un millón y medio de tep/año (tonelada equivalente de petroleo consumida en un año) evitando la emisión de 7 siete millones de toneladas de dióxido de carbono al año.

La cogeneración asegura el abastecimiento, gracias a la reducción de las perdidas generadas por el transporte y la utilización de la energía calorífica cerca de la central, permitiendo un acceso permanente a las fuentes de energía primaria a precios asequibles. La eficiencia energética por su parte potencia el crecimiento económico y el empleo, mejorando el bienestar social, además de contribuir a cuidar el medioambiente por la reducción del consumo de energía.

Pero la cogeneración no solo está pensada para centrales térmicas, cualquier actividad en la que se necesite energía térmica puede beneficiarse de esta tecnología. Desde procesos productivos, climatización o tratamiento de residuos. Con este sistema se reducen los costes energéticos pues maximiza el aprovechamiento de la energía primaria del combustible, e incluso permite obtener ingresos extra si se opta por inyectar a la red parte de la energía eléctrica producida.

En España, esta tecnología de alta eficiencia, está sufriendo muchas trabas para su desarrollo debido a las políticas tomadas en referencia al sistema eléctrico. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competividad (CNMC) exige a las industrias cogeneradoras que financien los desajustes del sistema eléctrico abonandoles solamente el 25% de sus facturas. Además, siguiendo la regulación del Gobierno, la CNMC retrasa los pagos de las facturas de venta de electricidad a los cogeneradores, lo cual unido a los recortes que sufre la industria desde 2013, hace imposible la supervivencia de las mismas.

La cogeneración es una mirada al futuro que apuesta por la eficiencia energética, ahorrando combustible al generar de forma simultanea calor y electricidad. Además, la construcción de centrales menos potentes más cercanas a los centros de consumo permite minimizar las perdidas y generar un ahorro del cual nos beneficiamos todos. Sin embargo, debido a los impagos del Gobierno y la situación de incertidumbre, se han parado hasta un 40% de las plantas cogeneradoras, suponiendo un descenso del 35% de la electricidad producida por cogeneración.
Fuente:
Conciencia Eco

10 de agosto de 2014

Permacultura y la utopía práctica



Lucho Iglesias en Permacultura Caña Dulce. Foto: C.F.

Los lugares te reclaman. Lucho Iglesias, nacido en el barrio de La Concepción y criado en Moratalaz, llevaba tiempo dándole vueltas al mapa buscando un nombre que le invocara. A él y a su "compañera de vida", Matricia Lana, a quien había conocido en Brunete, en un curso permacultura y agricultura sinérgica de Emilia Hazelip. Allí vivieron en comunidad y fueron forjando poco a poco su sueño de vivir en plena naturaleza en algún rincón de nuestra geografía.

     Lucho y Matri se dejaron tentar por nombres como Arroyo de Luz, en Extremadura, pero al final encontraron su lugar en el mundo en Coín y a orillas del Río Grande, en una finca que había estado abandonada durante 14 años y en la que crecían sin embargo los naranjos y brotaban por doquier las cañas.
  

 Así nació Caña Dulce, un vergel incomprable en el Valle del Guadalhorce, a treinta kilómetros escasos de Marbella y a tiro de piedra del paraíso, que lo tenemos a la vuelta de la esquina y no queremos darnos cuenta.

    "Tenemos todas las herramientas para hacer posible el paraíso", asegura Lucho Iglesias, 44 años, tres cuartas de partes de su vida dedicadas a esta hectára y media de terreno donde crece ahora una fronda comestible de almendros, pacanos, manzanos , perales, olivos, granados, higueras y nísperos. Lucho tuvo muy claro lo que quería ser en esta vida desde que vio un documental sobre el australiano Bill Mollison, el "padre" de la permacultura...

    "Descubrí de pronto que había una manera de diseñar asentamientos humanos sostenibles y en armonía con la naturaleza. Y que podemos hacer crecer maravillosos bosques comestibles, y cultivar nuestros propios alimentos con el máximo respeto a la tierra, y encontrar todo tipo de soluciones sobre la marcha. Porque la permacultura es ante todo muy práctica, ideal para constuir poco a poco nuestra utopía".

   
 "Utopía" es una de esas palabras que crean división sin remedio. Para unos, es poco menos que lo imposible o lo inalcanzable. Para otros, es simplemente un lugar al que aún no hemos llegado, pero no tardaremos. Lucho se encuentra sin duda entre estos últimos, y ahí está cabo de 14 años, dando forma todos los días a su utopía práctica.

      "Utopía" dio también título al documental de Lucho Iglesias y Alex Ruiz, ahí queríamos llegar. "Utopía" se estrenó hace apenas seis años, antes de que atizara la crisis, cuando hablar de la agricultura ecológica, de la banca ética o de los tejados verdes era como remar contra la corriente del cercano Río Grande.

   Y sin embargo la película -premiada en el Festival Internacional de Cine de Medio Ambiente- tuvo una acogida entusiasta, duró cuatro meses en la cartelera del Pequeño Cine Estudio y supo sembrar a tiempo las semillas del gran cambio que ya despuntaba en el horizonte.

  
Lucho Iglesias ha vuelto a sentir ahora la llamada del comunicador que lleva dentro y está ya avanzando por la senda de una segunda película, que aspira a salir adelante por financiación colectiva y será sin duda mucho más que una simple secuela...

El artículo completo en:

Los blogs de El Mundo (España)

31 de julio de 2014

¿Quién tiene miedo de la agricultura ecológica? (II)

La primera parte AQUÍ


La agricultura ecológica ha despertado en los últimos tiempos las más variadas "iras", siendo objeto de todo tipo de calumnias. Su éxito y múltiples apoyos han sido proporcionales a las críticas recibidas. Sin embargo, ¿quién tiene miedo de la agricultura ecológica? ¿Por qué tanto esfuerzo en desautorizarla? 

Todas estas preguntas fueron formuladas en un artículo anterior, donde analizábamos las mentiras detrás de afirmaciones como "la agricultura ecológica no es más sana ni mejor para el medio ambiente que la agricultura industrial y transgénica”. Hoy, abordaremos otras en relación a su eficiencia, el precio y la falsa alternativa que significa una "agricultura ecológica" al servicio de las grandes empresas. Como decíamos entonces: ante la calumnia, datos e información. 

De la eficiencia y el precio 

"La agricultura ecológica es poco eficiente y cara", dicen sus detractores. Quienes realizan esta afirmación olvidan que es precisamente el actual modelo de agricultura industrial el que desperdicia anualmente un tercio de los alimentos que se producen para consumo humano a escala mundial, unos 1.300 millones de toneladas de comida, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Se trata de una agricultura de "usar y tirar". En consecuencia, ¿quién es aquí el ineficiente? Aunque, más allá de estas cifras, es obvio que el actual modelo de agricultura industrial, intensiva y transgénica no satisface las necesidades alimentarias básicas de las personas. El hambre, en un mundo donde se produce más comida que nunca, es el mejor ejemplo, tanto en los países del Sur como aquí. 

Por su parte, la agricultura ecológica y de proximidad se ha demostrado que garantiza mejor la seguridad alimentaria de las personas que la agricultura industrial y permite una mayor producción de comida especialmente en entornos desfavorables, en palabras del relator especial de las Naciones Unidas para el derecho a la alimentación Olivier de Schutter, apoyándose en su informe La agroecología y el derecho a la alimentación. A partir de los datos expuestos en este trabajo, la reconversión de tierras en países del Sur a cultivo ecológico aumentaba su productividad hasta un 79%, en África, en particular, la reconversión permitía un aumento del 116% de las cosechas. Las cifras hablan por sí solas. 

Si hablamos del precio, y sobre todo lo comparamos con la calidad, una vez más la agricultura ecológica sale en mejor posición. Tal vez no lo parezca a primera vista, porqué hay un discurso único, que se repite y se repite y se repite, que nos dice que lo ecológico es siempre más caro. Sin embargo, no es así. A menudo depende de dónde y qué compremos. No es lo mismo comprar en un supermercado ecológico o en una tienda 'gourmet' que comprar directamente al campesino, en el mercado o a través de un grupo o cooperativa de consumo agroecológico, en los primeros los precios acostumbran a ser mucho más caros que en los segundos, donde su coste puede ser igual o incluso inferior que en el comercio tradicional por un producto de la misma calidad. 

A parte, nos tendríamos que preguntar cómo puede ser que determinados productos o alimentos en el supermercado sean tan baratos. ¿Estamos pagando su precio real? ¿Cuál es su calidad? ¿En qué condiciones han sido elaborados? ¿Cuántos kilómetros han recorrido del campo a la mesa? A menudo, un precio muy bajo esconde una serie de costes invisibles: condiciones laborales precarias en origen y destino, mala calidad del producto, impacto medioambiental, etc. Se trata de una serie de gastos ocultos que acabamos socializando entre todos, porqué si la comida recorre largas distancias y agudiza el cambio climático, con la emisión de gases de efecto invernadero, ¿esto quién lo paga? Si comemos alimentos de baja calidad que tienen un impacto negativo en nuestra salud, ¿quién lo costea? En definitiva, como dice el refrán: Pan para hoy y hambre para mañana. 

Y no solo eso, ¿cuándo entramos en el 'súper', qué compramos? Se calcula que entre un 25% y un 55% de la compra en el supermercado es compulsiva, fruto de estímulos externos que nos instan a comprar al margen de cualquier raciocinio. ¿Cuantas veces hemos ido al supermercado a comprar cuatro cosas y hemos salido con el carrito a reventar? El supermercado es una máquina de vender, no nos quepa la menor duda, uno de los espacios más estudiados de nuestra vida cotidiana, para que nuestra compra nunca quede al azar. 

Otra afirmación mil veces repetida es la que dice que "la agricultura ecológica es solo para ricos", o si quien habla busca el insulto, algo frecuente entre el sector "antiecológico", nos dirá que "la agricultura ecológica es solo para pijos". Ya sea en un caso como en otro, quienes afirman dichas palabras, les bien aseguro, que nunca han puesto un pie en un grupo o cooperativa de consumo agroecológico porque sus miembros, en general, pueden ser calificados con mucho adjetivos, pero de "ricos" y "pijos" tienen más bien poco. Se trata de personas que apuestan por otro modelo de agricultura y alimentación, a partir de informarse, tomar conciencia, buscar datos contrastados sobre los impactos de aquello que comemos en nuestra salud, en el medio ambiente, entre el campesinado. En esta vida nos "instruyen" para pensar que "gastamos" dinero en comida, pero ¿se trata de "gastar" o "invertir"? La educación es clave. De aquí, que sea fundamental hacer llegar los principios, y las verdades, de la agricultura ecológica al conjunto de la población. Comer bien, y tener derecho a comer bien, es cosa de todos. 

Una "agricultura ecológica" al servicio del capital 

"La agricultura ecológica no tiene fines sociales y agudiza la huella de carbono", dicen sus detractores. Aquí la pregunta clave es, ¿de qué agricultura ecológica estamos hablando? Como decíamos en el artículo anterior, una de las amenazas a la agricultura ecológica es precisamente su cooptación, la asimilación de su práctica por parte de la industria agroalimentaria. Y es que cada vez son más las grandes empresas del agribusiness y los supermercados que apuestan por este modelo de agricultura libre de pesticidas y aditivos químicos de síntesis, pero vaciándola de cualquier atisbo de cambio social. Su objetivo es claro: neutralizar la propuesta. Se trata de una "agricultura ecológica" al servicio del capital, con alimentos kilométricos, escasos derechos laborales en la producción y la comercialización. Ésta no es la alternativa de quienes apostamos por un cambio en el modelo agroalimentario. La agricultura ecológica, a mi entender, solo tiene sentido desde una perspectiva social, local y campesina, como han defendido siempre la mayoría de sus impulsores. 

Por otro lado, me sorprende que los detractores de la agricultura ecológica se preocupen tanto por la huella de carbono y el impacto de los gases de efecto invernadero en el medio ambiente, cuando su apuesta por una agricultura industrial es precisamente una de las principales responsables de los mismos. Según el informe Alimentos y cambio climático: el eslabón olvidado de GRAIN, entre el 44% y el 55% de los gases de efecto invernadero son provocados justamente por el conjunto del sistema agroalimentario global, como consecuencia de sumar las emisiones provocadas por el cambio en el uso del suelo y la deforestación; la producción agrícola; el procesamiento, el transporte y el empaquetado de los alimentos; y los desperdicios generados. Si a los críticos de la agroecología tanto les inquieta el cambio climático, les sugeriría que apostaran por una agricultura ecológica, local y campesina. 

¿Quién impone qué? 

"Nos imponen la agricultura ecológica. Yo quiero comer transgénicos, y no me dejan", dicen algunos, aunque parezca una broma. Sin embargo, ¿quién impone qué? La agricultura industrial sí fue resultado de una imposición, la de la Revolución Verde, promovida desde los años 40, y en décadas posteriores, por gobiernos como el de Estados Unidos y fundaciones como la fundación Ford y Rockefeller, y que implicó la progresiva sustitución de un modelo de agricultura tradicional, donde los campesinos tenían la capacidad de decidir sobre qué y cómo conreaban, a una agricultura industrial "adicta" al petroleo y a los fitosanitarios, que llevó a la privatización de los bienes comunes, y en particular de las semillas. Muchos campesinos no tuvieron elección. Hoy, vemos las consecuencias de este modelo agrario: hambre, descampesinización, patentes sobre las semillas, acaparamiento de tierras, etc. 

Aunque la principal imposición agraria ha sido sin lugar a dudas la del cultivo transgénico, y la imposible coexistencia entre agricultura trasgénica y agricultura convencional y ecológica es el mejor ejemplo. Los cultivos transgénicos a través del aire y la polinización contaminan a otros, así funciona lo que podríamos llamar "la dictadura transgénica". En Aragón y Catalunya, las zonas donde más se cultiva transgénico, en concreto la variedad de maíz MON 810 de Monsanto, la producción de maíz ecológico prácticamente ha desaparecido debido a los múltiples casos de contaminaciones sufridas. Las evidencias son irrefutables, y quien diga la contrario miente. 

La enumeración de frases con el único propósito de desautorizar la agricultura ecológica podría continuar. Son tantas las falsedades vertidas que este artículo podría tener tres, cuatro y hasta cinco partes, pero lo dejo aquí. Espero que las informaciones y los datos aportados puedan ser de utilidad a aquellos que frente a verdades únicas se preguntan y cuestionan la realidad que nos imponen. 

Fuente:

Rebelión

La primera parte AQUÍ.

¿Quién tiene miedo de la agricultura ecológica? (I)

La agricultura ecológica pone muy nerviosos a algunos. Así lo constatan, en los últimos tiempos, la multiplicación de artículos, entrevistas, libros que tiene por único objetivo desprestigiar su trabajo, desinformar acerca de su práctica y desacreditar sus principios. Se trata de discursos plagados de falsedades que, vestidos de una supuesta independencia científica para legitimarse, nos cuentan las "maldades" de un modelo de agricultura y alimentación que suma progresivamente más apoyos. Sin embargo, ¿por qué tanto esfuerzo en desautorizar dicha práctica? ¿Quién tiene miedo de la agricultura ecológica?
Cuando una alternativa cuaja socialmente dos son las estrategias para neutralizarla: la cooptación y la estigmatización. La agricultura ecológica es torpedeada por ambas. Por un lado, cada vez son más las grandes empresas y los supermercados que producen y comercializan estos productos para dar cobertura a un floreciente nicho de mercado y "limpiarse" la imagen, a pesar de que sus prácticas no tienen nada que ver con lo que defiende este modelo. Su objetivo: cooptar, comprar, subsumir e integrar esta alternativa en el modelo agroindustrial dominante, vaciándola de contenido real. Por otro lado, la estrategia del "miedo": estigmatizar, mentir y desinformar acerca de la misma, confundir a la opinión pública, para así desautorizar este modelo alternativo.

Y, ¿si alzas la voz en su defensa? Insultos y descalificaciones. Si un científico se posiciona en contra de la agricultura industrial y transgénica, es tachado de "ideológico". Como si defender este tipo de agricultura no respondiera a una determinada ideología, la de aquellos que se sitúan en la órbita de las multinacionales agroalimentarias y biotecnológicas, y que a menudo cobran de las mismas. Si un "no científico" la crítica, entonces, su problema es que no sabe, que es un ignorante. Según estos parece que solo los científicos, y en particular aquellos que defienden sus mismos postulados, pueden tener una posición válida al respeto. Una actitud muy respetuosa con la diferencia. Otra práctica habitual es calificar a quien crítica de "magufo", sinónimo despectivo, según la jerga de esta "elite científica", de anticientífico. Se ve que defender una ciencia al servicio de lo público y lo colectivo implica estar en contra de la misma. Una argumentación de locos.

Veamos, a continuación, alguna de las afirmaciones más repetidos para descalificar y desinformar sobre la agricultura ecológica, y que ampliaremos en siguientes artículos. Porque hay quienes creen que repetir mentiras sirve para construir una "verdad". Ante la calumnia, datos e información.

El peligro de los agrotóxicos

"La agricultura ecológica no es más sana ni mejor para el medio ambiente", dicen. Nos quieren hacer creer que una agricultura industrial, intensiva, que usa sistemáticamente productos químicos de síntesis en su producción, es igual a una agricultura ecológica que prescinde de los mismos. Increíble. Si las prácticas agroecológicas emergen es precisamente como respuesta a un modelo de agricultura que contamina la tierra y nuestros cuerpos.

Desde hace años, la retirada y prohibición de fitosanitarios, agrotóxicos, utilizados en la agricultura convencional ha sido una constante, después de demostrarse su impacto negativo en la salud del campesinado y los consumidores y en el medio ambiente. Quizá el caso más conocido sea el del DDT, un insecticida utilizado para el control de plagas desde los años 40 y que debido a su alta toxicidad ambiental y humana y escasa o nula biodegradabilidad fue prohibido en muchos países. En el año 1972, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos vetó su uso al considerarlo un "cancerígeno potencial para las personas". Otras agencias internacionales como el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, la Agencia Internacional de Investigación en Cáncer, entre otras, han denunciado también dichos efectos. Aún así, quienes mantienen la afirmación inicial -aquí rebatida- se muestran todavía, y aunque pueda sorprender, partidarios del DDT, y lo siguen defendiendo, a pesar de todas las evidencias.

Sin embargo, el DDT no es un caso aislado. Cada año, productos químicos de síntesis utilizados en la agricultura industrial son retirados del mercado por la Comisión Europea. Sin ir más lejos, en el 2012 el Tribunal de Gran Instancia de Lyon concluyó que la intoxicación del campesino Paul François y las consiguientes secuelas en su salud fueron debidas al uso y manipulación del herbicida Lasso de Monsanto, que no informaba ni de la correcta utilización del producto ni de sus riesgos sanitarios. La misma Organización de las Naciones Unides sobre Agricultura y Alimentación (FAO) sentenciaba en el artículo Control of water pollution from agriculture, en el año 1996, que el uso de pesticidas en la agricultura tenía efectos negativos en varios niveles: 1) En los sistemas acuáticos, ya que su alta toxicidad y la persistencia de químicos degradaba las aguas. 2) En la salud humana, pues la inhalación, la ingestión y el contacto con la piel de dichos productos químicos incidía en el número de casos de cáncer, deformidades congénitas, deficiencias en el sistema inmunitario, mortalidad pulmonar. 3) En el medio ambiente, con la muerte de organismos, generación de cánceres, tumores y lesiones en animales, a través de la inhibición reproductiva, y la disrupción endocrina, entre otros. ¿Qué fitosanitarios serán prohibidos mañana? Imposible saberlo. ¿Hasta cuando permitiremos seguir siendo cobayas?

El artículo completo en REBELIÓN

La segunda parte AQUÍ.
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