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1 de febrero de 2019

El delfín rosado del Amazonas está cerca de la extinción

El delfín rosado del Amazonas es uno de los animales más interesantes y hermosos que encontrarás en libertad. Y ahora, está en peligro. 


El delfín rosado es una interesante especie; que, de hecho, no está tan relacionada con los delfines comunes como podría pensarse, aunque definitivamente se parecen. Estos viven en ríos y pertenecen a la familia Platanistoidea, mientras que los delfines comunes de mar pertenecen a la Delphinidae. 

Esta es una de las cinco especies de delfines de río; y de hecho, son los machos adultos los que llegan a adquirir ese color rosa pastel que tanto los caracteriza. Sí, son bonitos, pero como casi todos los animales bonitos, ahora podrían desaparecer.

El delfín rosa en peligro de extinción

Según la Unión Internacional para la conservación de la Naturaleza; luego de haber estado fuera de la lista por 10 largos años, los delfines rosados han vuelto a estar en peligro de extinción.

Y es que estudios han identificado que la población de delfines en Brasil y Colombia está disminuyendo peligrosamente. Si las cosas siguen así, en 50 años ya no existirá la mitad de estos delfines.

Pero, ¿por qué se están extinguiendo? El problema, como suele ser, es la deforestación y el deterioro de su hábitat natural. La amazonia está desapareciendo poco a poco, y con ella cientos de especies que viven ahí. 

Se espera que con esta noticia los gobiernos relacionados incluyan en su agenda la protección de estos delfines; con ayuda de programas para evitar su desaparición, así como la deforestación de la selva del Amazonas.

Fuente:

FayerWayer

4 de noviembre de 2018

Perú: Delfines de río serán monitoreados vía satélite para proteger su hábitat

Los delfines de río enfrentan un destino incierto, porque las poblaciones de esta especie se redujeron de forma severa en los últimas décadas. La contaminación del agua, la construcción de represas y su captura –dirigida o incidental– son las amenazas más graves que enfrentan estos animales que cumplen un rol clave en los ríos que habitan.


"Los delfines son como los jaguares en el bosque [...] El estado de sus poblaciones es un indicador del estado de los ecosistemas y de todas las demás especies que los habitan. Si ellos están bien, los demás lo están", afirmó el biólogo José Luis Mena, Director de Ciencias de WWF Perú.

Para conocer el estado de las poblaciones de esta especie, de la que se sabe muy poco en el mundo, es que se realizó la primera expedición científica para instalar transmisores satelitales en delfines de río rosados en Perú.

Así, un equipo de biólogos, veterinarios y geógrafos se internó en la Reserva Nacional Pacaya Samiria en Loreto, considerada uno de los lugares con mayor densidad de delfines de agua dulce en el mundo.

De la mano de los pobladores de la Comunidad 20 de enero, el equipo liderado por WWF y su socio local ProDelphinus recorrieron el río Yanayacu Pucate en busca del delfín rosado (Inia Geoffrensis). "En apenas un par de horas de recorrido, se logró capturar, examinar y colocar transmisores en tres delfines machos y una hembra", señala Mena.



Con paciencia y mucho cuidado, los habitantes del lugar, guiados por el equipo de científicos ayudaron a rodear a los delfines con una red de pesca para trasladarlos en una camilla, fuera del agua, al proceso de examinación, que incluye obtención de muestras de sangre y tejido que servirán para conocer datos sobre su salud y dieta.

Luego se colocaron los transmisores y se inició la sistematización de información de forma automática. "Hay un estricto protocolo para asegurar que los animales  retornen rápidamente al agua y con la menor incomodidad posible", dijo la bióloga Elizabeth Campbell, Investigadora Asociada de ProDelphinus.

Según la experta, gracias al seguimiento satelital "vamos a poder ver por dónde van los delfines, qué están haciendo a diario, cómo usan su hábitat, y cómo esto cambia dependiendo del clima".

Lea el artículo completo en: La Mula


1 de agosto de 2013

Los delfines se llaman por su nombre con silbidos

La especie humana no es la única en la que cada individuo tiene un nombre. Un estudio acaba de descubrir que los delfines nariz de botella emplean un silbido concreto para identificar a cada miembro de una comunidad. Así lo han comprobado científicos de la Universidad de St Andrews (Escocia) en un estudio publicado en 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS).

Investigaciones anteriores ya habían revelado que los delfines responden y se comunican mediante un amplio repertorio de silbidos, pero nunca se había demostrado que utilizan un sonido específico que designa a cada animal del grupo.

El doctor Vincent Janik, de la Unidad de Investigación de mamíferos de la universidad explica que los delfines "viven en alta mar, en un entorno sin puntos de referencia, por lo que tienen que permanecer juntos como un grupo. Ese mismo entorno es el que hace que necesiten un sistema eficaz para mantenerse en contacto".

El estudio ha sido realizado con 200 delfines nariz de botella salvajes. Recogieron los sonidos que emitían y luego procedieron a reproducirlos mediante un altavoz bajo el agua. Los investigadores concluyeron que los animales solo respondían a sus propias llamadas, cuando oían el silbido que les designaba.

Se cree que esta forma de comunicación surgió para favorecer la unidad del grupo en su hábitat. Tal y como explica Janik, "la mayoría de las veces no pueden verse entre sí ni tampoco usar el olfato bajo el agua -elemento muy importante para los mamíferos a la hora de reconocerse-. Además tampoco tienden a permanecer en un solo lugar, por lo que no tienen nidos a los que volver".

Ya se habían encontrado indicios de que algunos tipos de loros emplean sonidos para diferenciar a otros de su grupo, pero, para Stephanie King, coautora del proyecto, "ésta es la primera evidencia real de la existencia de nombres y apelativos en el reino animal".

Para el Dr. Janik es interesante cómo esta práctica es desarrollada por comunidades de delfines de muy distintos grupos, y esto puede ayudar a comprender cómo se desarrolló la comunicación en los seres humanos.
Fuente:

18 de octubre de 2012

Estudio prueba que los delfines duermen con "la mitad del cerebro"

Delfín

Los delfines duermen con un ojo puesto en la superficie y otro en los depredadores.

Científicos de la Universidad de California comprobaron que los delfines pueden permanecer alertas y activos durante 15 días o más, durmiendo con solo una mitad del cerebro a la vez.

Los expertos creen que el truco es clave para la supervivencia, pues permite que les permite dormir con un ojo fuera de la superficie para poder respirar y a la vez estar pendientes de los depredadores.

Durante el estudio, los investigadores midieron las ondas cerebrales de dos delfines nariz de botella, a través de extensas y agotadoras pruebas de localización de eco.

Fuente:

BBC Ciencia

10 de mayo de 2012

Perú bate un nuevo récord en la masacre de delfines



En la costa norte de Perú están encontrando delfines muertos en cantidades sin precedentes. Los conservacionistas dicen que estas muertes se pueden deber al resultado de pruebas sísmicas realizadas por una compañía petrolífera.





Los cadáveres de unos 3.000 animales, fundamentalmente delfines comunes de pico corto, han sido arrastrados a las playas desde principios de febrero, según unas investigaciones realizadas por el veterinario Carlos Yaipen-Llanos, fundador y director científico del grupo de conservación de vida marina Orca.

Forman parte de una masacre de delfines sin precedentes que se vive en la costa norte de Perú. Los animales no tienen signos externos de trauma, y las investigaciones continúan buscando posibles causas de su muerte.

Y si contamos a los pelìcanos la suma ascenderìa. En los ùltomos 20 dìas se han encontrado 4450 pelìcanos muertos en las costas del Perù.

Sin embargo, algunos expertos están culpando de ello a las pruebas sísmicas realizadas por la petrolera BPZ, con sede en Houston (EEUU), en esa franja del Pacífico. La tecnología implica analizar los ecos de explosiones submarinas para buscar reservas de petróleo.

Yaipen-Llanos asegura que se han encontrado burbujas y sangre en algunos de los delfines muertos. Esa es una señal de la descompresión que posiblemente sufrieron los animales en su precipitado ascenso hacia la superficie para escapar del ruido de las explosiones.





“Este es el peor caso de mortalidad en masa de delfines que conozco en las Américas”, afirma Yaipen-Llanos, quien explica que el sonido de las pruebas sísmicas puede viajar más de 100 millas en mar abierto y su frecuencia dañó el oído de los delfines.

Patricia Majluf, viceministra de Pesca, declaró en el Congreso de Perú que los ejecutivos deBPZ no han sido capaces de dar explicaciones claras sobre el efecto de sus exploraciones petrolíferas en los mamíferos marinos. “El estudio de impacto medioambiental de BPZ debería de haber incluido una descripción detallada de la zona de influencia y el nivel de decibelios que generaron las pruebas en la zona de impacto”, dijo.

BPZ no ha respondido a las preguntas de GlobalPost para este reportaje. Sin embargo, la compañía explica en un comunicado que las muertes de los delfines habían comenzado antes de que ellos iniciaran sus pruebas sísmicas. “Lamentablemente se han detectado muertes similares en todo el planeta, incluyendo Brasil y varios estados de la costa atlántica de EEUU, recientemente en Cape Cod, Massachusetts”, indica el comunicado.

Pero Sue Rocca, una bióloga marina estadounidense que trabaja con la Whale and Dolphin Conservation Society, líder internacional en la conservación de mamíferos marinos, coincide en las sospechas manifestadas por Yaipen-Llanos. “Son indicios claros de pruebas sísmicas”, asegura, añadiendo que submarinistas de la Marina de EEUU han tenido ataques después de haber sido expuestos a este tipo de experiencia.

“Es una experiencia extremadamente dolorosa para los delfines. Son animales muy acústicos, y estos son ruidos enormes, aterradores. Durante años pensamos que los mamíferos marinos no podían sufrir ‘la enfermedad del buzo’. Pero lamentablemente ahora sabemos que eso no es verdad”.

Sin embargo, Rocca advierte que las pruebas sísmicas deberían de haberse dejado sentir también en otros mamíferos marinos, como las ballenas, y de momento no se ha registrado ningún caso en Perú.

Otras posibles causas de las muertes de delfines serían el envenenamiento o una marea de alga roja, que se puede generar por la contaminación.

“De un modo u otro esto ha sido probablemente causado por los humanos”, añade. “Los ecosistemas marinos son lugares delicados, pero no dejamos de revolverlos, y los delfines son muy sensibles a estos cambios. También son muy móviles, pero hay un límite sobre a dónde pueden ir para escapar de la contaminación, las pruebas sísmicas y otras molestias en su hábitat. No es bueno cuando se tienen que desplazar por las rutas navieras, por ejemplo”.

Las muertes también han puesto en cuestión la capacidad de las autoridades de Perú para proteger el medio ambiente marino. El Instituto Marino de Perú, la agencia gubernamental a cargo de la investigación marina y de pesquerías, asegura que tan sólo hanmuerto 324 delfines, frente a los 3.000 contabilizados por expertos independientes, como Yaipen-Llanos, y confirmados por Rocca.

Tal y como BZP indica en su comunicado, las muertes de delfines en Perú son sólo las más recientes registradas en el mundo. En torno a 250 delfines han sido arrastrados a las playas en Cape Cod este año, comparados con la media anual de 38.




Además, desde principios de 2010 el número de cadáveres hallados en el Golfo de México se ha multiplicado casi por diez, una tendencia que comenzó incluso antes del vertido de petróleo de BP.

“Ha sido un año de mierda para los delfines. ¿Qué si hemos llegado a un momento crítico? No lo sabemos aún, pero es posible”, dice Rocca.

Fuente;


12 de abril de 2012

Los delfines se saludan cuando se encuentran en el mar



Cada ejemplar tiene su propio silbido, y lo usa para saludarse en el mar.

La investigación, publicada en la revista Science, ha sido llevada a cabo por biólogos de la Universidad de St. Andrews.



De todos es sabido que los delfines son capaces de interpretar el significado de las palabras emitidas por humanos en función de sus gestos. Y hasta ahora, se había estudiado la respuesta en forma de silbidos de estos animales, aunque no con resultados del todo satisfactorios. Se dudaba si eran simples cacofonías en respuesta a situaciones de estrés, aislamiento o cautividad.

Ahora, un equipo de biólogos marinos de la Universidad de St. Andrews, en el Reino Unido, ha detectado que estos silbidos son algo más que repeticiones de sonidos, en un estudio hecho en el hábitat natural del delfín y que se recoge en la revista Science. Vincent Kanik asegura que "los delfines son comparables a los grandes simios en sus capacidades cognitivas, pero todo lo que sabíamos era lo que realizaban en un laboratorio".

Así, los investigadores trataron de detectar cómo utilizan estos animales su inteligenica al margen de las tareas que les encomiendan los hombres. Para ello, se adentraron en las aguas de Escocia en una pequeña embarcación en busca de grupos de delfines mulares, con micrófonos submarinos que introdujeron a dos metros bajo la superficie para registrar los sonidos de estos animales.

La conclusión es que los delfines utilizaban silbidos únicos propios de cada uno cuando se reunían con otro grupo, a modo de saludo y presentación. Y lo que era más llamativo, este sonido sólo era emitido cuando realmente se integraba en el grupo; si no era así, no lo emitía. Pero más interesante aún, según publica Science, fue descubrir que en ocasiones sólo un miembro del grupo era el que emitía este silbido característico.

Ante esto, los científicos tienen varias explicaciones: que haya un líder en el grupo que sea el que 'hable', que los delfines se identifiquen unos a otros mediante el eco de este único silbido y que así el sonido sea algo más que un ritual; o simplemente que ya hubieran estado juntos antes y que sólo uno fuera el 'nuevo' del grupo.

Se sabe que los delfines aprenden a copiar el silbido propio de cada ejemplar, pero los científicos se preguntan ahora si al imitarlo se están refiriendo a él en su 'conversación'. También puede ser que usen los silbidos únicos de cada uno para gestionar las integraciones o disgregaciones del los grupos en los que viven.

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29 de febrero de 2012

Reconstruyen el fósil de un pingüino prehistórico gigante

Ilustración que muestra a dos pingüinos y un delfín de hace 25 millones de años. | Chris Gaskin / Otago University

Ilustración que muestra a dos pingüinos y un delfín de hace 25 millones de años. | Chris Gaskin / Otago University

Después de 35 años, se ha logrado completar la reconstrucción de un fósil gigante de pingüino, ofreciendo a los investigadores nueva información sobre la diversidad de los pingüinos prehistóricos. Los huesos fueron recogidos en 1977 por el doctor Ewan Fordyce, paleontólogo de la Universidad de Otago, en Nueva Zelanda. En 2009 y 2011, el doctor Dan Ksepka, de la Universidad Estatal de Carolina del Norte, y el doctor Paul Brinkman, viajaron a Nueva Zelanda para ayudar en la reconstrucción del fósil de pingüino; y ahora, han publicado sus hallazgos en el 'Journal of Vertebrate Paleontology'.

Los investigadores apodaron Kairuku al pingüino, una palabra maorí que se traduce como "buzo que regresa con comida". Ksepka se interesó en el fósil porque su forma corporal es diferente a la de todos los pingüinos conocidos, tanto vivos como extintos. Además, el investigador también estaba interesado en la diversidad de las especies de pingüinos que vivían en lo que hoy es Nueva Zelanda, durante el período Oligoceno, que tuvo lugar hace, aproximadamente, 25 millones de años.

Según Ksepka, "Nueva Zelanda fue un lugar ideal para los pingüinos en términos de alimentos y seguridad. La mayor parte de la isla estaba bajo el agua en ese momento, dejando masas rocosas aisladas que mantenían a los pingüinos a salvo de los depredadores, y les proporcionaban comida abundante". Kairuku fue una de las, al menos, cinco especies diferentes de pingüinos que vivieron en Nueva Zelanda durante el mismo período -esta diversidad de especies fue lo que hizo difícil la reconstrucción.

Otago University

Otago University

Uno de los fósiles usados para la reconstrucción

"Kairuku era un ave elegante para los estándares de los pingüinos, con un cuerpo delgado y aletas largas, pero patas cortas y gruesas", explica Ksepka. Los investigadores realizaron la reconstrucción a partir de dos fósiles de Kairuku, por separado, utilizando el esqueleto de un pingüino rey actual, como modelo. El resultado fue un pájaro alto, de pico y aletas alargados - sin duda, la mayor de las cinco especies que eran comunes en la zona durante el Oligoceno.

Nueva Zelanda contiene fósiles excepcionales, que dan pistas importantes sobre la historia de los pingüinos y otras criaturas marinas. Ksepka espera que la reconstrucción de Kairuku dé a otros paleontólogos más información acerca de otros fósiles en la misma zona, así como un mejor conocimiento sobre las especies de pingüinos gigantes.

Fuente:

El Mundo Ciencia



23 de agosto de 2011

Los delfines tienen un nuevo sentido (y van 7)

Delfín

Ya era conocida la capacidad de los delfines de encontrar presas mediante ecolocalización (sonar). Pero los delfines de Guyana han desarrollado la capacidad de detectar los campos eléctricos generados por los peces que les rodean.

Unos investigadores de la Universidad de Rostock en Alemania notaron algo raro en las imágenes térmicas de los orificios de las mandíbulas superiores de estos delfines. Así que lo estudiaron y descubrieron que dichos animales tienen “electro-percepción sensorial“. Esta cualidad ya se había encontrado anteriormente en algunos peces y anfibios, además de en el ornitorrinco.

Examinaron el cadáver de un delfín fallecido y entrenaron a otro vivo para que detectara campos eléctricos. De esta forma consiguieron probar que los delfines de Guyana han evolucionado logrando un nuevo sentido.

Se podría decir que esta electro-percepción es un complemento al sonar habitual en estos cetáceos. En las distancias cortas, el sonar no tiene buenos resultados, pero la detección de campos eléctricos es perfecta.

Wolf Hanke (miembro del equipo) asegura que esta habilidad de los delfines es muy reciente y afirma que es relativamente fácil evolucionar convirtiendo los mecanoreceptores (como las células de nuestro oído) en electroreceptores. De hecho se sugiere que todos los mamíferos tienen el potencial de evolucionar. Quién sabe si algún día los humanos podrán “sentir la presencia” de otros.

Fuentes | NewScientist

2 de agosto de 2011

La electrorrecepción, el séptimo sentido de los delfines

  • Al menos una especie puede detectar los campos eléctricos de sus presas
  • Sienten la electricidad con los agujeros de sus bigotes situados en el morro
  • Es la primera vez que esta habilidad se demuestra en un 'mamífero verdadero'
Vista de los órganos 'electro-sensoriales' del delfín costero estudiado durante la investigación

Vista de los órganos ’electro-sensoriales’ del delfín costero estudiado durante la investigaciónW. HANKE

Los delfines costeros de Guayana (Sotalia guianensis) parece que no tienen suficiente con un sexto sentido. Además de la ecolocación, un equipo de científicos sugiere que estos cetáceos también son capaces de detectar a sus presas gracias a sus campos magnéticos.

Esta habilidad, conocida como electrorrecepción, es habitual en otras especies de peces y anfibios, pero es la primera vez que se ha demostrado en un 'mamífero verdadero', según recoge NewScientist.

Como todos los cetáceos dentados cazan y localizan a sus presas a través del sonido, pero los investigadores han demostrado que los delfines también lo pueden hacer a partir de señales eléctricas, aunque no son tan sensibles como las rayas o los tiburones.

Al examinar las estructuras de un delfín muerto y entrenando a un ejemplar criado en cautividad, los investigadores comprobaron que estos animales también responden a las señales eléctricas.

"La electrorrecepción es buena para detectar presas en distancias cortas en las que la ecolocación no es tan eficaz", explica el responsable del proyecto, Wolf Hanke, de la Universidad de Rostock (Alemania).

Según el estudio, publicado en la revista Proceedings of the Royal Society B, sus órganos 'electro-sensoriales' están situados en las pequeñas cavidades que los cetáceos tienen en el morro, que "se derivan de los bigotes de los animales ancestrales", señala Hanke.

Las investigaciones se llevaron a cabo con un delfin del zoo alemán de Muenster, por lo que los científicos planean "viajar hasta América del Sur para estudiar a los delfines en estado salvaje" y conocer si otros cetáceos poseen la misma capacidad.

Fuente:

RTVE

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