29 de abril de 2013
Chip que simula al cerebro, supera a supercomputadores
20 de noviembre de 2012
Curiosidades de la química y la vida que probablemente no conocías
* Un pequeño protóstomo, el tardígrado u osito de agua es un poliextremófilo capaz de sobrevivir a 6.000 atmósferas de presión y a más de de 5.000 grays de radiación, 500 veces más de lo necesario para aniquilar a los humanos.
- Hay organismos capaces de soportar temperaturas altísimas y temperaturas muy bajas (ideales para habitar el lugar con el rango de temperaturas más amplio del mundo). En el calor, nadie como los organismos pertenecientes al género Pyrolobus, microorganismos capaces de prosperar en temperaturas de 113 ºC e incluso sobrevivir diez horas a 121 ºC. En el frío, una bacteria llamada Colwellia psychrerythraea, capaz de resistir temperaturas de hasta -196 ºC, la temperatura del nitrógeno líquido.
- Las bacterias pertenecientes al género Geobacter son capaces de alimentarse de uranio. El Deinococcus radiodurans puede resistir radiaciones 2.000 veces mayores que la dosis letal para un ser humano.
- Si agrandáramos la molécula de agua hasta el tamaño de una moneda de 10 centavos, una molécula de ácido nucleico tendría una anchura de 10 centímetros y varios cientos kilómetros de longitud. Ello se debe a que el agua está formada por moléculas simples, de solo tres átomos cada una. Hay moléculas de tamaños muy variables: las que tienen peso molecular mayor de 10.000 se conocen como macromoléculas. Por ejemplo, la celulosa tiene peso molecular de al menos 570.000. El ADN es una de las macromoléculas más grandes. El ADN de la E. coli, una bacteria común, contiene alrededor de 3 millones de pares de bases: su peso molecular ronda los 1.8000 g/mol.
- Con todo, incluso las moléculas más grandes son microscópicas. Las cadenas de ADN son tan pequeñas que 5 millones de ellas cabrían en el ojo de una aguja.
Si todo el ADN de un cuerpo humano se uniera para formar una única cadena, tendría más de 300.000 millones de kilómetros de longitud; suficiente como para ir a la Luna y volver 390.000 veces, o como para ir al Sol y volver 1.000 veces. (...) Si los 3.000 millones de “letras” del genoma humano se colocaran en fila, separadas por un milímetro, la longitud sería 7.000 veces mayor que la altura del Empire State Building.Fuente:
Xakata Ciencia
11 de octubre de 2012
Experimento busca determinar si vivimos en una simulación por computadora
10 de octubre de 2012
El cerebro no es hardware ni software: es wetware
El cerebro no es, en modo alguno, una máquina que recibe instrucciones, como un ordenador. El cerebro de cada ser individual es más bien como una selva tropical en la que abundan el crecimiento, la decadencia, la competición, la diversidad y la selección.
existe una forma de demencia que destruye las áreas anteriores (de la parte delantera) del cerebro, y los pacientes con este trastorno pierden la capacidad de hablar; sin embargo, las áreas posteriores de cerebro son capaces de funcionar con una mayor capacidad para compensar, provocando a veces un torrente de creatividad en el arte o la música.
2 de marzo de 2012
La torre de fotografías de todos tus antepasados equivale a 40 rascacielos neoyorquinos
Y es en este libro de texto, titlado La magia de la realidad, donde he tenido la oportunidad de leer una de las mejores comparaciones gráficas para hacernos una idea de nuestra posición en el mundo.
Lo que propone Dawkins es que cojamos una fotografía nuestra. Y que encima pongamos la fotografía de nuestro padre. Y encima, la de nuestro abuelo. Y así sucesivamente, retrocediendo generación tras generación, apilando fotografía sobre fotografía. Hasta que lleguemos a tener apilados 185 millones de antepasados, que son los necesarios para tener una fotografía de un pez.
Pero ¿qué altura tendría esta torre de fotografías?
Bueno, si cada fotografía estuviera impresa en una tarjeta postal, 185 millones de fotos formarían una torre de unos 4 877 metros de altura, es decir, más de 40 rascacielos neoyorquinos colocados unos encima del otro.
Unas cuántas páginas más adelante, Dawkins propone un juego para asimilar mejor el tamaño del universo y nuestra posición en el mismo:
1. Acércate hasta un campo bien grande con un balón de fútbol y colócalo en el suelo para representar el sol.
2. Camina después 25 metros y deja caer un grano de pimienta para representar el tamaño de la Tierra y su distancia al sol.
3. La luna, para mantener la misma escala, debería ser una cabeza de alfiler, y estaría a tan solo cinco centímetros del grano de pimienta.
4. Pero la siguiente estrella más cerca, Próxima Centauri, manteniendo la misma escala, sería otro balón de fútbol (aunque algo más pequeño) ubicado digamos… a unos… ¡6 500 kilómetros de distancia!
Lo que dije: ojalá hubiéramos tenido libros de texto como éste.
Fuente:
27 de enero de 2011
¿Cuánto terreno se necesita para enterrar a toda la gente que muere en un año?
Para calcular realmente el terreno necesario para alojar a los muertos, vamos a averiguar el terreno que se necesita para enterrar a toda la gente que muere en un año.
Si bien algunos cadáveres son incinerados y otros son enterrados en nichos, vamos a fijarnos exclusivamente en los muertos que se entierran en tumbas cavadas. Vamos a escoger una nación como Gran Bretaña, donde es más costumbre usar tumbas cavadas, a diferencia de otros países en que se coloca a los muertos en nichos.
Para empezar con los cálculos, necesitamos conocer la proporción de personas incineradas y, también, la superficie de tierra que ocupa una tumba. Ah, y el número de muertos anuales en Gran Bretaña: 800.000.
Seguramente se me dirá que en Gran Bretaña hay un 70 % de incineraciones por un 30 % de enterramientos. En las ciudades son más numerosas las primeras, mientras que en el campo abundan más los segundos. Si sólo el 30 % de las personas que fallecen cada año son enterradas, habrá un 30 % de 800.000 entierros anuales, lo que nos da 240.000 sepulturas en el mismo periodo.
Vayamos ahora con la superficie del terreno. En la mayor parte de cementerios de Gran Bretaña, las tumbas están dispuestas en hileras. Una tumba está separada de la siguiente por unos 2 metros. Y cada hilera está separada de la siguiente por unos cuatro metros. Eso significa que cada tumba precisa de una superficie de 4 × 2 = 8 m2.
Ahora sólo basta multiplicar esos 8 metros por los 240.000 muertos anuales. El resultado es 1.920.000 m2. Es decir, y para redondear, 2 millones de metros cuadrados.
Para imaginar cuánto terreno representa esta superficie, comparémosla con la de un campo de fútbol. El terreno de juego suele tener 100 metros de largo por 50 de ancho, esto es, 5.000 metros cuadrados. De modo que para enterrar a los muertos no incinerados en Gran Bretaña necesitamos cada año 560 campos de fútbol.
560 campos de fútbol llenos de muertos. Suena muy macabro. Y más sonará imaginar cuántos campos de fútbol haría falta para enterrar a todos los muertos anuales del planeta Tierra. Sólo imaginar los guarismos resultantes me parece una cifra enorme. ¿Alguien se atreve a hacer una estimación?
Fuente:
Xataca Ciencia
15 de noviembre de 2010
¿Cuánto tardarías en llegar en auto a un planeta del sistema solar?
Cuando conduzco de noche por alguna carretera, envuelto en la música de la radio, sin apenas tráfico en la carretera, suelo imaginarme que piso el acelerador y que, sencillamente, persigo el horizonte sin otro objetivo que comprobar hasta dónde sería capaz de llegar. Quizá a otro continente. Quizá dar la vuelta al mundo. Pero, cuando de verdad estoy en plan aventurero, entonces imagino algo más ambicioso.
Imagino que unos ingenieros nanotecnológicos han construido una autopista estelar de miles de años luz de longitud (aunque de apariencia de asfalto de toda la vida), y que acelero a toda velocidad por ella rumbo a las estrellas. Con un combustible infinito, y pisando siempre a fondo, ¿cuánto tardaría en llegar a otros planetas?
Si viajara a 100 km/h, tardaría nada menos que 160 días en llegar a la Luna. 5 meses. Si viajara a una velocidad de 120 km/h, entonces tardaría 3.200 horas cubrir los 384.000 kilómetros. Eso significa un total de 133 días de conducción sin parar, más de 4 meses.
Lo cierto es que el viaje se haría un poco largo. Imaginemos que piso a fondo y que alcanzo los 193 km/h. Llegar a Marte me representaría 134 años de viaje. Incluso a toda la velocidad que puede desarrollar mi coche, moriría de viejo antes de llegar al planeta más cercano a la Tierra (bien, teniendo en cuenta que allí fuera no hay gravedad ni rozamiento del aire sin duda desarrollaría velocidades mucho más altas, pero dejadme seguir con mi fantasía…).
A los 193 km/h de mi coche alcanzaría Júpiter en 459 años.
Saturno está casi el doble de distancia: 842 años de conducción ininterrumpida.
Si no bajara del coche ni para ir al aseo, llegaría finalmente a Neptuno en 2.497 años. Así que indudablemente resulta una empresa un poco infructuosa alcanzar las estrellas con un coche, por muy aventurero que se sienta uno.
Tomado de:
Gen Ciencia
9 de noviembre de 2010
Toda nuestra historia (económica) resumida en 365 días
Imagínese que comprimimos el último millón de años de la historia de la humanidad en sólo un año.
Cada día equivale, entonces, a 3.000 años. 2 años es un minuto.
En esta escala temporal comprimida, nuestros ancestros usaron el fuego por primera vez en algún momento durante la última primavera. Hasta finales de octubre, nuestros antepasados todavía manipulaban las herramientas de piedra más básicas; los seres humanos biológicamente similares a nosotros, los Homo sapiens, aparecieron más o menos a mediados de noviembre.Alrededor del 19 de diciembre surgieron los comienzos de la civilización: pinturas rupestres y sepulturas. No fue hasta el 27 de diciembre cuando hubo pruebas de la existencia de agujas de coser, lanzas arrojadizas o el arco y la flecha..
En las últimas horas del 30 de diciembre, la economía mundial era diez veces mayor que veinticuatro horas antes, un período abarcado por el colosal reinado de los faraones egipcios. El Imperio chino duró la mayor parte del 31 de diciembre, tiempo durante el que se produjo el auge y la caída del Imperio romano, y luego Europa avanzó a través de la Edad Media. El tamaño de la economía mundial aumentó otras diez veces entre el comienzo de la víspera de Año Nuevo y las siete y media de la tarde, momento en el que Colón descubrió América. Entonces, el crecimiento se volvió aún más rápido, y la economía mundial creció otras diez veces entre las siete y media de la tarde y las once y veinte de la noche, cuando comenzó la Primera Guerra Mundial.En los últimos cuarenta minutos (el resto del siglo XX), la economía mundial se expandió otras 10 veces. Si se mantienen los ritmos de crecimiento, la próxima expansión del orden de 10 veces más se habrá completado aproximadamente a los 25 minutos pasada lamedianoche.
Fuente:
Gen Ciencia