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8 de noviembre de 2007

Especial - TLC y Ciencia:
¿Un TLC sin ciencia ni tecnología?


Modesto Montoya.



En mis tiempos escolares me llamaba la atención cómo los maestros ponían énfasis en las clases sobre tratados de límites territoriales y las guerras que habían sido necesarias para llegar a ellos.

Pero comprendí mejor el tema al ver cómo los agricultores se enfrentaban entre sí por los linderos de sus chacras, las que les permitían sobrevivir. A muchos no les quedó ni una parcela. Otros apostaron por el estudio y hoy tienen mejores niveles de vida que los que ganaron todos sus juicios sobre propiedad de suelos. ¿Qué pasó? La tierra dejó de tener tanto valor y el conocimiento empezó a mostrar el suyo. La historia de los países ha tenido la misma evolución: varios son ricos porque apostaron a la investigación, y otros son pobres porque escogieron el camino de las materias primas.


Ahora los tratados de moda entre los países son los TLCs, con énfasis en la propiedad intelectual y las patentes. La buena noticia es que los conocimientos no tienen límites. Uno de los primeros países que lo comprendieron fue Estados Unidos. Comprendiendo que el conocimiento es una fuente inagotable de riqueza, EEUU practica una estrategia de atracción de científicos e ingenieros. Parte de esta estrategia la constituyen las becas de posgrado. Los países que no han comprendido el sentido de la historia han dejado o están dejando partir a sus mejores cerebros.

El TLC reconoce y promueve la generación de conocimiento. Es un tratado que favorece a los países que cuentan con laboratorios, científicos, ingenieros y técnicos capaces de generar patentes o materia de propiedad intelectual. Con el TLC, los países que no apostaron al conocimiento empiezan con desventaja.

Sin embargo, como el potencial está en todos los pueblos y el conocimiento no tiene fronteras, el TLC también constituye una oportunidad. Para aprovecharla, hay que empezar por retener o atraer los cerebros, y fortalecer las instituciones creadas para generar conocimiento científico y tecnológico.

En el Perú se han creado instituciones especializadas en la generación de conocimiento científico y tecnológico para atender las necesidades de la comunidad. Entre esas instituciones están la Comisión Nacional de Investigación y Desarrollo Aeroespacial, el Consejo Nacional de Camélidos Sudamericanos, el Instituto Antártico Peruano, el Instituto Geográfico Nacional, el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana, el Instituto del Mar del Perú, el Instituto Geofísico del Perú, el Instituto Geológico Minero y Metalúrgico, el Instituto Nacional de Becas y Crédito Educativo, el Instituto Nacional de Estadística e Informática, el Instituto Nacional de Investigación y Extensión Agraria, el Instituto Nacional de Investigación y Capacitación de Telecomunicaciones, el Instituto Nacional de Recursos Naturales, el Instituto Nacional de Salud del Perú, el Instituto Peruano de Energía Nuclear, el Instituto Tecnológico Pesquero del Perú, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología y el Servicio Nacional de Sanidad Agraria, que conforman el Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, encabezado por el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica.

Sin embargo, las prohibiciones de nombramiento de personal, establecidas por las sucesivas leyes de presupuesto, no permiten ni siquiera reemplazar a los cesantes, a pesar de que los científicos e ingenieros dedicados a la investigación y desarrollo constituyen hoy menos de la mitad del personal. Para evitar la extinción de las instituciones de ciencia y tecnología por disminución crítica del número de investigadores, debe crearse el Grupo Ocupacional Científico y Tecnológico (GOCYT) en los institutos del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología (SINACYT), y dotarlo de las mismas posibilidades de nombramiento con las que cuentan los militares, los policías, los diplomáticos, los jueces, los médicos y los docentes.

¿Es tan difícil comprender lo que nos conviene?

Fuente:

La República
Especial - TLC y Ciencia:
TLC: ¿Y la propiedad intelectual?

Se plantea un tratado separado al meramente comercial. Los expertos exponen cinco razones por las que los temas que involucran ciencia, tecnología y cultura estén desligados de los acuerdos comerciales.

Además se restringiría el acceso del Perú a información para la producción de fármacos y agroquímicos.



Santiago Roca y Benjamín Marticorena.

Las negociaciones para un Acuerdo de Promoción Comercial con los Estados Unidos –más conocido como Tratado de Libre Comercio (TLC) – pusieron sobre la mesa la discusión sobre la inconveniencia de incorporar un capítulo de propiedad intelectual en estos acuerdos. En su momento se presentó al gobierno –en forma confidencial– cinco argumentos para que el tema sea materia de un tratado separado.

La situación adquiere relevancia en la discusión de los nuevos tratados comerciales que el Perú negocia con la Unión Europea, Canadá, China y otros países. Estos son los cinco argumentos esgrimidos:

1) Los TLC están destinados a facilitar que los exportadores de los países contratantes tengan acceso irrestricto a sus recíprocos mercados. La protección de la propiedad intelectual, por su parte, es una herramienta de los Estados para garantizar la innovación e inventiva en sus respectivos países, con la finalidad de lograr el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la cultura. Es una acción del Estado en tutela de la actividad creativa destinada a favorecer la generación de valor y riqueza en su territorio.

Al ser la propiedad intelectual y el comercio dos ámbitos disjuntos de actividad, no hay obligatoriedad de incluir compromisos de propiedad intelectual dentro de los TLC. Tal inclusión obedece a una estrategia de los países con sistemas consolidados de propiedad intelectual, para lograr mayores beneficios y estándares de protección que los aceptados en los convenios multilaterales, ofreciendo a cambio, el acceso de los países menos desarrollados a sus mercados. En la práctica, los países avanzados en propiedad intelectual terminarán beneficiándose en demasía, acrecentándose las diferencias con los países menos desarrollados.

2) La inclusión de temas de propiedad intelectual en una negociación internacional bilateral, requiere que los países hayan definido y consensuado de manera previa sus intereses nacionales sobre esa materia, e identificado las posibles consecuencias de los compromisos que se proponen asumir. Tan indispensable proceso no se ha terminado, por lo que los negociadores peruanos carecen de ese imprescindible instrumento.

3) Los intereses de EEUU en materia de propiedad intelectual, hacen indispensable que el Perú defina previamente sus propias posiciones en las tres áreas que constituyen ese ámbito, patentes, marcas y derechos de autor (ver recuadro).

4) En el estudio comparativo del crecimiento económico de los países destacan los que poseen tecnología avanzada que les permite incorporar trabajo menos intenso en tiempo y energía, para colocar en el mercado internacional productos de alto valor. En cambio, los países de escaso desarrollo tecnológico tienen procedimientos de producción intensivos en tiempo y energía, y una producción de reducido valor de transacción. Estas asimetrías en el desarrollo de la ciencia y tecnología y de la propiedad intelectual entre países desarrollados y en desarrollo exige un trato con equidad, especial y diferenciado, lo cual es difícil de lograr en el marco de un acuerdo de comercio.

5) Por último, el Perú posee una riqueza biológica y cultural de excepcional diversidad, con enorme valor económico potencial, que debiera asegurar que los países desarrollados le reconozcan la debida compensación económica y el acceso legal correspondiente, protegiendo los derechos de las comunidades. Eso será muy difícil de lograr dentro de un tratado de libre comercio.

Por estas razones, no es conveniente que el Perú negocie un capítulo de propiedad intelectual dentro de un tratado de comercio, en donde los países desarrollados van a ofrecer la apertura de sus economías a cambio de extensiones en los derechos de propiedad intelectual.


Sobre patentes y marcas

Patentes de Invención

Estados Unidos plantea ampliar el plazo de protección de una patente más allá de los 20 años que los tratados internacionales reconocen. Por otra parte, EEUU pretende establecer las denominadas "patentes de segundo uso". De admitirse, restringiría el acceso del Perú a información empleada en la producción de fármacos genéricos y de productos agroquímicos muy importantes.

Derecho de Marcas

La proliferación de marcas y patentes extranjeras no dejaría de tener impacto negativo sobre la producción, precios y el empleo doméstico. El Perú debe proponer el reconocimiento de su legislación sobre denominaciones de origen y la obligatoriedad del registro de los contratos de licenciamiento de las marcas.

Derechos de Autor

De acuerdo con los tratados internacionales, los plazos de vigencia de la protección de la propiedad intelectual terminarán en algún momento y, con ello, se extinguirán los derechos de exclusividad, trasladando las obras al uso libre y público. Perú no debe aceptar la extensión de dichos plazos más allá de los estándares internacionales.


Fuente:

La República

7 de noviembre de 2007

¡Salvemos Candamo! Por Guillermo Giacosa

¡Salvemos Candamo!
Por Guillermo Giacosa

Muchos creemos que la humanidad ha perdido la poca cordura que hasta hace poco parecía exhibir. Quizá no se haya tratado de cordura sino de falta de medios para terminar de destruir un planeta que agoniza lentamente por causa de esta plaga llamada especie humana. Hoy, con todos los medios tecnológicos a su alcance, parecen dispuestos a continuar con la obra de demolición que iniciaron rudimentariamente nuestros ancestros para ponerle fin a las actuales formas de vida. Sin duda en un futuro que somos incapaces de imaginar la vida ésta retornará bajo otras modalidades que, ojala, sean menos destructivas que las practicadas por el ser humano.

Esta reflexión, que es válida para todos los rincones de la Tierra donde se busca crear riqueza sin pensar en las consecuencias, nos duele hoy especialmente en el Candamo peruano, habitat de inusitada diversidad biológica y casi una prueba viviente de toda la maravilla que la Naturaleza ha sido capaz de crear. Quienes vimos la maravillosa película de Daniel Winitzky, que batió records de audiencia en la TV peruana, no olvidaremos jamás la sensación de plenitud y de agradecimiento a la vida que dicho filme nos dejó. ¡Esa maravilla era la vida, estaba al alcance de nuestra mano y era nuestra responsabilidad responder por ella! A los creyentes les recuerdo que atentar contra la vida, a menos que sea para sobrevivir, es quizá el pecado más aborrecible del ser humano pues, al fin de cuentas, la vida es lo único que realmente tenemos. Quienes no hemos sido tocados por la fe, por otra parte, sabemos de sobra que esa vida es nuestro único bien y que su abundancia, diversidad y riqueza es un motivo que parece justificar la existencia.

Embebidos en esta nueva religión idiotizante de explotar, explotar y explotar todos los recursos existentes, se pretende sustraer 200.000 hectáreas al Candamo para buscar minerales que, además de enriquecer a unos pocos dañará toda la flora y la fauna de la región.

Nadie en su sano juicio objeta el progreso pero ¿es eso progreso? ¿Destruir un habitat con capacidad para producir en el largo tiempo muchos más dinero que todo los minerales que logren extraer es realmente progreso? ¿Malograr un espacio que oxigena un territorio agobiado por la polución, es progreso? Eso no es progreso, eso es simplemente un disparate de quienes creen que crecer es inflarse para luego reventar. Ese es sólo un negocio cortoplacista más como tantos otros que se le pasan por la cabeza a todos quienes viven en el agobiante y enceguecedor día a día de la política.

Hace treinta años que se vienen anunciando las catástrofes que hoy ocurren y no escuchamos a quienes lo advertían. Hoy, si pasan Candamo, algunos delirios brasileros sobre la Amazonía y otros proyectos igualmente destructivos estaremos pasando el punto más allá del cual no habrá existencia alguna que defender.

Súmese a la protesta. Entre a www.salvemoscandamo.com e inscriba su nombre entre quienes rechazan la propuesta de quitarle 200.000 hectáreas más a la vida.

Fuente:

Informalisimo


Archivos de "Conocer Ciencia":¿En concesión el Parque Nacional Bahuaja Sonene? (septiembre)

Gobierno insiste en explotar gas en parque natural (octubre)
Ciencia sin perro lazarillo.

El Estado parece haber condenado a muerte a los centros de investigación científica y tecnológica.

Por Modesto Montoya *Físico

El presidente Alan García, en su artículo "El síndrome del perro del hortelano", enumera las resistencias que existen a la explotación de los innumerables recursos naturales peruanos. Al final de su artículo, en un párrafo pequeño, se refiere al tema de la educación señalando a "los malos profesores y malos funcionarios que exigen no ser evaluados para esconder su mediocridad y así el sistema sigue produciendo resultados sin valor".

Es bueno que tratemos de explotar los recursos naturales. Pero eso no es suficiente. Los países que pretenden crecer, con el menor impacto ambiental posible, apuestan al conocimiento científico y tecnológico. La presidenta Michelle Bachelet, en ocasión de la duodécima Semana Nacional de Ciencia y Tecnología, dijo a los chilenos: "Creo que es evidente para todos nosotros que en un país como el nuestro, que requiere seguir desarrollándose, un tema como la innovación, la ciencia y la tecnología es clave". Y en la reciente inauguración del Centro de Estudios en Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Universidad de Santiago, la presidenta Bachelet anunció que, desde ahora hasta su bicentenario, Chile iba a subir de 0,6% a más de 1% del PBI su inversión en ciencia y tecnología (el Perú invierte apenas el 0,11 % del PBI para estos fines).

Chile está decidido a innovar. La sola presencia del primer mandatario de un país en actividades de ciencia y tecnología incentiva a los profesionales jóvenes para iniciarse o seguir en ellas.

En el Perú, en la reciente conferencia internacional Universidad y Empresa, organizada por Universia, se mostró, una vez más, lo poco que el Perú invierte en innovación, y la poca confianza que tienen los empresarios en la universidad y los centros de investigación. La consecuencia lógica de una situación como esta es la dependencia tecnológica y la pobreza que se vive.

Más aun. El Estado parece haber condenado a muerte a los centros de investigación científica y tecnológica, cuyos investigadores tienen una edad promedio de 50 años. A pesar de ello, cada año la Ley de Presupuesto Público prohíbe nombrar a nuevos investigadores. En julio del 2006 se promulgó una ley de crédito suplementario, una de sus cuyas cláusulas levantaba esa prohibición. Desafortunadamente esta fue repuesta en agosto de ese mismo año. ¿En esas condiciones, cómo atraer a nuestros talentos del extranjero? ¿Cómo vamos a generar valor agregado a nuestras materias primas? ¿Competiremos en el mercado internacional con 'viejas glorias'?

Algunos grupos de funcionarios públicos se oponen a ser evaluados, incluso en las universidades y centros de ciencia y tecnología. Sin embargo, el presidente García tiene el poder para legitimar su voluntad, aplicando criterios meritocráticos en la asignación de los cargos de confianza de instituciones de investigación científica y tecnológica del Estado, según créditos universalmente reconocidos: 1) Grados de doctor en ciencia y tecnología obtenidos en universidades de prestigio. 2) Producción certificada por artículos publicados en revistas internacionales indexadas o inventos patentados. 3) Liderazgo reconocido por la sociedad y por el empresariado, que es el que finalmente invertirá en proyectos de riesgo con las universidades o institutos.

Esto debe ir acompañado de la reestructuración del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología, tendiendo a la optimización del uso de los recursos; y del establecimiento de la carrera de investigador científico y tecnológico, con un reglamento que asegure que los más competentes y productivos tengan mejores remuneraciones y responsabilidades de dirección.

Con la firma del TLC con Estados Unidos, la ciencia y la tecnología se convierten en urgencias nacionales. La competitividad nacional requiere decisiones coherentes que incentiven los esfuerzos y la creatividad de todos los peruanos. La ciencia no puede avanzar como ciego sin perro lazarillo.
* MIEMBRO DE LA ACADEMIA NACIONAL DE CIENCIAS

Fuente:

Diario El Comercio

4 de noviembre de 2007

¡Salvemos el programa "Redes"!

Difundamos esta carta y unámonos a la cruzada en Internet para salvar el programa Redes. Ya la TVE habó de resstructurar e incluso de eliminar este boletín científico de su programación habitual.

From: Miguel Artime
Date: 01-nov-2007 16:07
Subject: Contra la desaparición del programa Redes
To: consultas.rne@rtve.es

Estimados señores gestores de la programación de TVE,

Les escribe uno más de sus jefes, puesto que como saben, su sueldo sale parcialmente de mis impuestos.

Antes de nada debo sincerarme; ya entendía que un programa de temática científica de la solera y calidad de Redes debiera emitirse en horarios donde hiciera poco daño, por ejemplo los domingos a la 1 de la mañana, pues de lo contrario (llegando a más gente en un horario decente) este país podría llegar a descubrir que ahí fuera hay algo más que fútbol, enfrentamientos políticos, famosos de vidas dudosamente glamurosas y series de ficción. Así pues entiendo perfectamente que ahora, ante semejante peligro, hayan decidido eliminarlo.

También entiendo que yo, y el resto de miles de españoles interesados en la ciencia, no somos rentables. De hecho somos un estorbo y una lacra económica puesto que los programas que nos gustan no rinden publicitariamente, razón por la que muchos hemos tenido que aprender inglés para poder ver los programas de la BBC, un magnífico canal de televisión público europeo. No sería justo no darles las gracias por preocuparse tanto por promover la cultura anglosajona entre sus conciudadanos.

Así mismo comprendo que los rizos del señor Punset no tienen la gracia de los de la Duquesa de Alba (asidua en “Corazón Corazón”), y que su deje catalán no es tan simpático como el gracejo andaluz del inteligente Jesulín de Ubrique (que se bajó los pantalones en uno de sus programas conducido por Mercedes Milá). Está claro que Redes toca temas marginales, y que provoca bostezos en un elevado porcentaje de los que se acercan a la caja tonta con el único fin de dejar de pensar y dormitar sobre el sofá. (¿Dónde quedó aquello de “la 2, televisión para la inmensa minoría”?)

Pero me estoy desviando… debo darles de nuevo las gracias por pensar en la salud laboral de los trabajadores de este país. Desde ahora, por fin llegaré el lunes por la mañana en buenas condiciones al trabajo tras una noche completa de sueño reparador… la verdad es que estaba harto de quedarme hasta tan tarde los domingos viendo a Punset, ¡me dejaba molido!

De todos modos, a pesar de su indudable acierto al retirar a Redes de la parrilla y como experimento, me gustaría que pensaran ustedes en ponerse en contacto con la Agencia Tributaria. ¿Para qué? Pues para que en los próximos formularios de la declaración de la renta aparezca una nueva casilla en la que se nos consulte si queremos que parte de nuestros impuestos vayan a parar a ONGs, a la Iglesia, o a TVE, la misma que televisa puntualmente la misa dominical mañanera, caiga quien caiga, en este laico país, o que televisa esa sangrienta costumbre llamada “fiesta nacional”. Yo por supuesto, les agradecería este nuevo acto de sensibilización y acercamiento al pueblo. Sería interesante ver el resultado.

Ya en serio… parecen ustedes de los pocos que ignoran que la ciencia y la tecnología son aspectos fundamentales de la cultura occidental. De hecho, es precisamente gracias a esa tecnología que ustedes ningunean, que no necesito pedir la nacionalidad británica o mudarme de país solo para ver buena televisión, y que tampoco necesito acercarme a un buzón de correos para hacerles llegar mi opinión al respecto de su nefasta política de programación.

Me despido enviando mi más sincero agradecimiento al Sr. Punset por tantos años de calidad televisiva. Afortunadamente podré seguir leyendo su blog.

Saludos cordiales,

Miguel A. Artime Menéndez
Avilés - Asturias


Fuente:

Maikelnai´s Blog
Especial - Comportamiento:
El rumor influye más que los hechos en la formación de una reputación.


Aumenta o disminuye la cooperación entre personas hasta un 20%, aunque sea falso.

Los chismes afectan profundamente a la reputación de una persona y condicionan el comportamiento de los demás hacia ella por encima de la información objetiva, señala un estudio realizado en Alemania. Un experimento llevado a cabo con más de un centenar de estudiantes demostró que éstos condicionaban sus actitudes hacia el resto de los participantes en función de la información que les llegaba acerca de los otros en las conversaciones entre ellos. El experimento demostró que los rumores podían aumentar o reducir la cooperación porque los estudiantes ajustaban su propia visión del mundo a la que le daban los demás.

Por Olga Castro-Perea.


El rumor influye más que los hechos en la formación de una reputación

Los rumores afectan a la reputación de cualquiera, en el buen o en el mal sentido, incluso cuando esté constatado que son falsos, asegura una investigación reciente.

Científicos alemanes han descubierto que lo que se rumorea acerca de un individuo concreto entre un grupo de personas tiene más poder en el comportamiento y juicio de éstas hacia dicho individuo que las observaciones directas acerca del mismo.

Los rumores son las especulaciones no confirmadas acerca de un objetivo determinado. Se consideran información no contrastada, que rara vez se difunde abiertamente, lo que no impide su rápida expansión, y suelen carecer de una fuente original bien definida. A pesar de todo, parece que nos los creemos sin dudarlo.

En sentido positivo, los rumores refuerzan las normas grupales y los lazos sociales, según han señalado diversos estudios, mientras que la reputación ayuda a determinar la cooperación entre los grupos humanos. Desde una perspectiva evolutiva, son funcionales como herramienta para construir y manipular las reputaciones, así como una manera de entretenimiento. Pero, también, pueden originar comportamientos negativos hacia otras personas porque afectan a las opiniones que nos formamos sobre los demás.

Reciprocidad indirecta

Para determinar hasta qué punto condicionan dichos comportamientos, un estudiante de doctorado del Instituto Max Planck de Biología Evolutiva, en Plön, Alemania, llamado Ralf Sommerfeld, en colaboración con investigadores de la universidad de Viena, realizaron un estudio basado en un juego, cuyos resultados han sido publicados en la revista Proceedings of The National Academy of Sciences.

El experimento consistió en dar 10 euros por cabeza a un total de 126 estudiantes (14 grupos de nueve estudiantes cada uno) para llevar a cabo un juego en el que iban por parejas cambiantes. Cada vez que tenían una nueva pareja le tenían que ofrecer a ésta 1,25 euros. Si llegaban a un acuerdo, los investigadores sumaban además otros 75 céntimos, por lo que el receptor finalmente ganaba 2 euros.

Si el primer jugador se negaba a dar dinero, ahorraba 1,25 euros, pero si los otros descubrían su tacañería podían posteriormente no ser generosos con él. Según iba progresando el juego, y se iban alternando las parejas y sus papeles como donantes y receptores, los jugadores iban dando información a los demás acerca de las decisiones que sus antiguos compañeros habían tomado.

Así, cuanto más generoso había sido anteriormente un compañero, más tendentes a darle eran el resto para con él y viceversa: si tenía “fama” de tacaño, los demás se resistían a darle el dinero. Hasta aquí, como se predecía, el rumor propiciaba la reciprocidad indirecta, según se explica en el citado artículo: el comportamiento generoso inducía a la cooperación del resto del grupo.

Más fuertes que la verdad

Lo desconcertante fue, sin embargo, que en varias rondas de este mismo juego, a cada uno de los donantes se le hizo llegar tanto rumores –positivos o negativos- sobre los demás jugadores receptores como hechos probados, con un registro del comportamiento previo de éstos como donantes.

Así, se descubrió que los jugadores seguían estando influenciados por los rumores a la hora de tomar sus decisiones, aunque desconocieran su fuente o fiabilidad, e incluso teniendo acceso a la información directa u objetiva, que podía contradecir al rumor: de media, la cooperación aumentó en un 20% si el rumor era positivo, y decayó en el mismo porcentaje si el rumor era negativo.

Los científicos señalan que el estudio evidencia que los rumores tienen un enorme potencial manipulador porque la gente tiende a ajustar su propia visión del mundo a la percepción de éste que tienen los otros. Además, transmiten con enorme eficiencia la información social.


Fuente:

Tendencias 21
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