Se trataba de una terraza ceremonial de barro y piedra, usada hace seis milenios para rituales y entierros.
En la década de 1940 había sido excavada por primera vez por el arqueólogo Junius Bird, del Museo Estadounidense de Historia Natural de Nueva York (EE.UU.).
Las ruinas se hicieron conocidas entonces por las telas de algodón que se encontraron ahí, que eran las más antiguas jamás halladas en América.
Después de 70 años
En 2007, Tom Dillehay, antropólogo de la Universidad de Vanderbilt (EE.UU.), decidió volver a excavaren el lugar."Nadie lo había tocado en 70 años", le explicó Dillehay a BBC Mundo. "Es un lugar peculiar, en el que la conservación es excepcional".
Durante la investigación, encontró restos humanos, restos de comida y más de 1.000 piezas de tejidos de algodón en buen estado, pese a los milenios que habían transcurrido.
En 2009, Dillehay le pidió al arqueólogo especialista en textiles, Jeffrey Splitstoser, de la Universidad George Washington (EE.UU.), que se uniera a su equipo.
Su misión era determinar qué tipo de tramas, estructuras y materiales habían usado los antiguos peruanos para fabricar las telas y con qué colores las habían teñido, según dijo Splitstoser a BBC Mundo.
Este científico pasó casi siete años analizando cerca de 800 ejemplares de telas, que medían entre 30 y 60 centímetros cuadrados y, que según cree, habían formado parte de bolsas o envoltorios.
El trabajo fue largo porque cuando las telas volvieron a la superficie, se encontraban "muy sucias", según Splitstoser.
Estaban cubiertas de sal, por la cercanía de Huaca Prieta al mar, y de ceniza, ya que según se cree, se practicaban incineraciones rituales en este sitio.
"Los colores se habían desvanecido", recuerda el especialista.
Después de "lavar" los tejidos con químicos especiales, Splitstoser pudo identificar partículas de tinte azul en un pequeño porcentaje del material analizado.
La pregunta entonces era de dónde había salido ese color.
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BBC