Latest Posts:

1 de octubre de 2007

El cielo, las galaxias y el Vaticano

Especial: Astronomía - El cielo, las galaxias y el Vaticano.


BBC Ciencia

 
Galileo Galilei nunca hubiera soñado con asistir a una conferencia internacional como la que se celebra estos días (2007) en Roma. 

Galaxia vista por el Hubble
Los astrónomos discutirán los últimos descubrimientos sobre la evolución de las galaxias.
Mucho ha cambiado desde que la Santa Inquisición de la Iglesia Católica condenó al que muchos consideran el padre de la astronomía. 

Entonces el científico italiano afirmaba que la Tierra giraba alrededor del Sol y, por lo tanto, no era el centro del Universo. 

Hoy la Iglesia Católica afirma que no tiene ninguna hostilidad hacia la ciencia como la tuvo hace cuatro siglos cuando llevó a juicio a Galileo. 

Y por eso ha reunido en Roma a más de 200 astrónomos de 26 países para discutir los últimos descubrimientos sobre la formación y evolución de las galaxias. 

Entre los científicos que asisten a la reunión de cinco días están los sacerdotes jesuitas que trabajan en el propio observatorio astronómico del Vaticano. 

En busca del Universo

Galileo Galilei
La iglesia llevó a juicio a Galileo por sus ideas sobre el Universo.
Hace siete años, el Vaticano organizó la primera conferencia de este tipo, para tratar de entender cómo han evolucionado las galaxias que se formaron cuando se formó el universo. 

Desde 2000 ha habido numerosas nuevas observaciones y descubrimientos que ahora compartirán los astrónomos congregados en Roma. 

"Los astrónomos reunidos en esta conferencia hemos estado estudiando los discos galácticos", dijo a la BBC el padre Guy Consolmagno, del Observatorio Astronómico del Vaticano. 

"Las galaxias sabemos son las unidades fundamentales del unvierso y cada galaxia contiene unos mil millones de estrellas", agrega el científico. 

Y un "disco" es uno de los componentes de la galaxia, formado por estrellas, gases y polvo. 

Ciencia y religión

El observatorio de la Santa Sede, donde trabajan 13 astrónomos que también son sacerdotes jesuitas, colabora con muchas universidades prestigiososas en todo el mundo. 

Mucha gente no sabe que la teoría del Big Bang (o gran explosión) fue propuesta por primera vez por un sacerdote católico belga llamado Georges Lemaitre en los 1920
Padre Guy Consolmagno, Observatorio Astronómico del Vaticano
Para muchos es soprendente que el Vaticano financie investigaciones científicas después de siglos de disputa y desacuerdo sobre el papel que ha jugado la ciencia y la religión en los orígenes del universo. 

Según el padre Consolmagno, esta conferencia "es para que el mundo sepa que la iglesia no tiene miedo de la ciencia". 

"Mucha gente no sabe que la teoría del Big Bang (o gran explosión) fue propuesta por primera vez por un sacerdote católico belga llamado Georges Lemaitre en los 1920", dice el astrónomo. 

"Y desde entonces el Vaticano ha estado apoyando a la astronomía", afirma.
Según el sacerdote, desde la edad media, una cuarta parte de los observatorios astronómicos del mundo estaban dirigidos por sacerdotes jesuitas.
"En realidad, no hay ninguna razón para pensar que existe un conflicto entre la Iglesia y la astronomía -afirma Consolmagno- porque la fe que tiene miedo de la verdad, no es fe". 

Fe y verdad

Aunque la Iglesia tardó cuatro siglos en en admitir finalmente que la Galileo había estado en lo correcto, lo cierto es que desde entonces ha intentado borrar la persistente percepción de hostitlidad hacia la ciencia.
Galaxia espiral (Imagen NASA-Google)
En la conferencia se discutirán los discos de galaxias y la materia oscura.
El primer observatorio astronómico del Vacticano fue establecido en 1789 en un edificio cerca del Palacio Apostólico, llamado la Torre de los Vientos. 

Un siglo después, en 1891, el Papa León XIII estableció otro pequeño observatorio en una colina detrás del la Basílica de San Pedro. 

Éste sin embargo fue abandonado en 1930 debido a que la contaminación lumínica en Roma obstaculizaba el estudio de las estrellas más lejanas. 

El nuevo Observatorio del Vaticano con telescopios fabricados en Alemania fue establecido en Castelgandolfo, a 25 kilómetros al sureste de Roma.
Pero la expansión de la capital italiana obligó a los astrónomos a reubicarse nuevamente. 

Y desde 1993 el Telescopio de Avanzada Tecnología del Vaticano funciona en una colina cerca de la ciudad de Tucson, Arizona, en Estados Unidos. 

Entre los temas que ocuparán a los astrónomos en esta conferencia están abstrusas fórmulas matemáticas sobre los orígenes físicos del universo, y conceptos como la fría materia oscura y los agujeros negros.

Fuente:

BBC en español

Observatorio del Vaticano

Formación y evolución de las galaxias
Libro - La Guerra de los Mundos (H. G. Wells)

En este especial de astronomía me pareció qyue era el mejor momento para compartir con ustedes, amables lectores, el enlace a la novela H. G. Wells "La Guerra de los Mundos" en cómic.



La guerra de los mundos es una novela de ciencia ficción escrita por H.G. Wells, publicada por primera vez en 1898. Es una de las primeras novelas sobre contactos extraterrestres y la primera que narra una invasión a gran escala.

Esta novela ha sido la base para crear posteriores novelas, historietas, películas y seriales televisivos que relatan invasiones extraterrestres que amenzan a la humanidad.

Lea el libro on-line (en versión cómic y en inglés) en el siguiemnte enlace:

War of hte World
Especial: Astronomía - Astrónomos descubren un hueco colosal en el universo.

Un grupo de astrónomos halló un hueco colosal en el universo.



El vacío cósmico, que se extiende a lo largo de mil millones de años luz, no contiene galaxias, estrellas, agujeros negros y ni siquiera la misteriosa materia oscura que está por doquier, anunció un equipo de la Universidad de Minnesota.

Los astrónomos sabían desde hacía tiempo que hay sectores del universo sin nada, uno de los cuales está cerca de nuestra Vía Láctea, apenas a dos millones de años luz.

Pero lo que el equipo de Minnesota descubrió, utilizando dos tipos diferentes de observaciones astronómicas, fue un vacío mucho mayor que el que hubiese podido imaginar.

"Esto es mil veces más grande que lo que hubiésemos esperado", observó el profesor de astronomía Lawrence Rudnick, autor del informe que será publicado por el Astrophysical Journal. "No está claro que tengamos todavía el término preciso. Esto es una verdadera sorpresa".

Rudnick examinaba una encuesta celestial del Observatorio Nacional de Radioastronomía, que básicamente toma fotografías radiales de una vasta expansión del universo.

Pero un sector del universo tenía radiofotos que sugerían hasta un 45% menos de materia, dijo Rudnick. El resto de la materia podía explicarse como estrellas y otros cuerpos cósmicos entre el lugar de observación y el vacío, que se encuentra entre 5.000 y 10.000 millones de años luz de distancia.

Rudnick después revisó las observaciones de la radiación de trasfondo de microondas cósmicas y encontró un lugar frío. La única explicación, conjeturó, es que carece de materia.

Podría ser una paradoja estadística, pero eso es menos probable que un hueco gigante, dijo James Condon, astrónomo en el Observatorio Nacional de Radioastronomía. Condon no formó parte del equipo de Rudnick pero está siguiendo la investigación.

"Parece algo que se debe tomar en cuenta", dijo Brent Tully, astrónomo de la Universidad de Hawai y tampoco integrante del equipo, pero que estudia el vacío más próximo a la Tierra.

Tully dijo que los astrónomos podrían hallar algunas pocas estructuras cósmicas en el hueco, pero que de todos modos estaría casi vacío.

Los huecos en el universo probablemente ocurren cuando la gravedad de áreas con mayor gravitación jala materia de zonas menos densas, explicó Tully. Después de 13.000 millones de años "están perdiendo la batalla frente a las mayores concentraciones de materia", agregó.

Fuentes:

PanActual.com
Especial: Astronomia -
Polémica por intento de acabar con el telescopio más poderoso del mundo.


Septiembre 29 de 2007 -
Clic para ampliar

Foto: Archivo / EL TIEMPO

Con un radar 300 m de diámetro, Arecibo es el radiotelescopio más grande del mundo. Allí fue filmada buena parte de la película 'Contacto', con la actriz Jodie Foster (arriba), basada en un libro de Carl Sagan.

Políticos, astrónomos y buscadores de vida en otras galaxias luchan para impedir el cierre de Arecibo, previsto para el 2009.

Ha escudriñado el universo como ningún otro objeto en la Tierra. Con sus 300 metros de diámetro, el Radioobservatorio de Arecibo (Puerto Rico) se asemeja a un ojo gigantesco, gracias al cual se descubrieron planetas más allá del sistema solar.

Por eso, astrónomos de todo el mundo han criticado a la Fundación Nacional de la Ciencia (NSF, por su sigla en inglés), una dependencia del gobierno de E.U., que ha anunciado un recorte del 33 por ciento en el presupuesto de Arecibo que, en la práctica, podría conducir a su cierre, al menos parcial, en octubre de 2009.

Ubicado al norte de la isla, donde se aprovechó una depresión natural para instalar sus más de 38.000 paneles de aluminio, Arecibo es el radiotelescopio más grande del planeta, sin el cual no habría sido posible determinar el período de rotación de Mercurio o la composición de los gélidos anillos de Saturno.

A los astrónomos, se sumó la semana pasada José E. Serrano, congresista demócrata de Nueva York, de origen puertorriqueño, quien en una carta a la NSF dijo que Arecibo "tiene todavía un papel vital que desempeñar en la comunidad científica de E.U. y el resto del mundo".

Así lo cree también José Alonso, astrónomo y jefe de Programas Educativos del Observatorio, quien aseguró que Arecibo es irremplazable para la astronomía y las ciencias atmosféricas y que su presupuesto, de cerca de 12 millones de dólares al año, está más que justificado.

"Podemos estudiar objetos tan cercanos como la Luna y tan lejanos como las fronteras del propio universo", indicó el experto.

Un mensaje en una botella

Más allá de su función en la observación del universo cercano, Arecibo es una importante fuente de ingresos en la economía puertorriqueña, que crea empleo en el área de su influencia y atrae a más de 120.000 personas al año.

Pero lo que le ha valido el estrellato mundial, además de que fue escenario de películas como Contacto (1997), es su papel en el proyecto Seti (Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre).

La superantena de Arecibo es un instrumento idóneo para intentar comunicarse con las estrellas. Como quien lanza un mensaje en una botella en medio del océano, los investigadores han dirigido sus señales hacia sistemas que, se cree, pueden albergar formas de vida.

En años más recientes, Seti se dedica a examinar los registros que llegan a Arecibo, con la esperanza de encontrar alguna que asemeje a algún tipo de lenguaje. Para eso, diseñaron el proyecto seti@home, que se vale de más de tres millones de voluntarios en todo el mundo para analizar, gracias al poder combinado de sus computadores personales, las señales que recibe a diario el radar.


Fuente:

El Tiempo (Colombia)
Descubierto el umbral de la conciencia visual.

La percepción consciente ocurre 270 milisegundos después de un estímulo.

Un equipo de científicos franceses ha podido observar, a través de imágenes cerebrales, cómo se activa la conciencia a partir de un estímulo provocado. Ha descubierto que la percepción consciente ocurre 270 milisegundos después de la aparición de un estímulo visual. También ha comprobado que hay percepciones registradas por el cerebro que no llegan a la conciencia, al quedar por debajo de este umbral. Esta investigación ayudará a comprender mejor algunas enfermedades mentales y contribuye a sentar las bases del pretendido modelo científico de la conciencia. Por Eduardo Martínez.

Las dos etapas cerebrales de la percepción visual. CEA

La percepción consciente, que conduce a la conciencia visual, ocurre alrededor de 270 milisegundos después de la presentación de un estímulo y es precedida de una serie de etapas neuronales no conscientes que han podido ser caracterizadas con precisión, según una investigación cuyos resultados han sido publicados esta semana en la revista
Plos Biology.

La proeza la ha conseguido un equipo francés formado por investigadores del CEA, del Inserm de NeuroSpin y del CNRS, que han difundido un comunicado conjunto.

El equipo ha pretendido averiguar el papel del cerebro en la percepción consciente y cómo reacciona cuando se alcanza el umbral de la conciencia. Según el Diccionario Larousse, la conciencia es la percepción más o menos clara de los fenómenos que nos informan de nuestra propia existencia y lo que este equipo ha conseguido es identificar algunos de los procesos cerebrales que sustentan la percepción consciente.

Para la investigación, los investigadores propusieron a voluntarios sanos dos tipos de estímulos experimentales. El primer estímulo era una cifra que constituía el objetivo de la percepción consciente. El segundo estímulo consistía en muchas letras que desempeñan la función de encubrir el primer estímulo (la cifra).

Es decir, los voluntarios veían simultáneamente una cifra y muchas letras y tenían que estar atentos para descubrir la cifra en medio de tantas letras. Lo que variaba era el intervalo entre la aparición de las cifras y las letras, provocando este lapsus de tiempo diferentes reacciones cerebrales y diferentes niveles de percepción consciente.

Imágenes cerebrales

La actividad cerebral de los voluntarios era seguida a través de la electro-encefalografía de alta densidad, que permite medir a nivel de la superficie craneal la actividad eléctrica cerebral. A través del análisis de las imágenes cerebrales obtenidas durante el experimento de percepción alfanumérico, fue posible observar dos fases distintas en el transcurso de la actividad de la corteza cebrebral.

En la primera fase de la actividad del córtex, que ocurre antes de 270 milisegundos (un milisegundo es el período de tiempo que corresponde a la milésima fracción de un segundo) se activaban las regiones cerebrales posteriores asociadas al reconocimiento de los estímulos visuales.

Lo sorprendente es que esta activación puede ocurrir incluso en ausencia de cualquier percepción consciente, manifiestando así el cerebro una especie de percepción no consciente. Es decir, aunque el sujeto no registre la percepción, el cerebro sí lo hace, evocando así la percepción subliminal.

En la segunda fase de la actividad observada en el córtex, después de 270 milisegundos, las regiones más profundas del lóbulo frontal y parietal se movilizaron para la propagación y amplificación de la actividad cerebral desencadenada con el experimento, originando así la percepción consciente.

Lapsus de tiempo

De esta forma, pudo comprobarse que la percepción del primer estímulo (numérico) depende del período de tiempo de presentación transcurrido entre los dos estímulos. Es decir, cuanto más tarden las letras en aparecer, más fácil resulta percibir conscientemente la cifra.

Cuando la presentación de los estímulos es casi simultánea, el primer estímulo ni siquiera es percibido por la conciencia, a pesar de que el cerebro registra actividad, permaneciendo misteriosamente “invisible” a la conciencia. Por el contrario, cuando el tiempo transcurrido entre la presentación de los dos tipos de estímulos es mayor, el sujeto percibe conscientemente el primer estímulo.

De esta forma, ha podido evaluarse el umbral de acceso a la percepción de los estímulos (la así llamada conciencia visual) y estudiar los cambios de actividad cerebral cuando se franquea este umbral consciente.

Este trabajo, según sus autores, podría ayudar a comprender mejor los mecanismos neuronales que constituyen el origen de algunas enfermedades asociadas a un déficit de los procesos conscientes, como ya había demostrado este equipo al abordar la esquizofrenia.

30 años de investigaciones

El estudio científico de las bases cerebrales de conciencia ha alcanzado significativos progresos en los últimos treinta años, particularmente a través de la comparación entre cerebros sanos y cerebros enfermos.

Muchas enfermedades neuropsicológicas se originan por disociaciones a veces importantes que han permitido identificar los principios generales de una neurofisiología de la conciencia, particularmente la asociada con la percepción visual.

Al tema de la conciencia nos hemos referido ya en diversas ocasiones. Ya sabemos, por ejemplo, que la conciencia se genera en la parte posterior del córtex cerebral, según explicamos en otro artículo, y que incluso la conciencia puede asociarse con los procesos cuánticos (ver nuestro artículo sobre el Quantum Mind).

Respecto a la comprobación de una percepción cerebral ajena a la conciencia, también sabemos ya que el cerebro utiliza de manera consciente la información subliminal para el desarrollo correcto de tareas completamente conscientes, según explicamos en otro artículo.

De estas y otras aproximaciones se ha intentado sentar las bases de un modelo científico de la conciencia, que todavía está lejos de haberse conseguido, si bien trabajos como el de estos científicos franceses constituyen un progreso considerable.

La posibilidad de estudiar las bases neurológicas de la conciencia es sin embargo objeto de polémica debido a las dificultades del método científico clásico para integrar la experiencia de un sujeto a sus marcos de referencia.

Sin embargo, algunos avances significativos se han producido debido por un lado a las nuevas tecnologías, que permiten observar en directo las reacciones cerebrales, y por otro al mejor conocimiento de las enfermedades asociadas a mecanismos cerebrales. Pero todavía queda un largo camino para sentar las bases neurológicas de una realidad tan sutil como es la conciencia.

Fuente:

Tendencias 21
Se rompe una de las barreras de la transmisión cuántica.

Físicos norteamericanos consiguen enviar información de un qubit a otro dentro de un mismo chip.

Físicos norteamericanos han conseguido utilizar un fotón para transferir el estado cuántico de un qubit a otro qubit gracias a un cable (en realidad un surco) que guía al fotón a modo de rail. Es la primera vez que se consigue esta transferencia a una distancia significativa y un tiempo suficiente, lo que constituye un significativo paso adelante en la perseguida construcción de los ordenadores cuánticos. Por Vanessa Marsh.

Creatividad del cable cuántico. NIST.

Dos equipos de físicos, integrado el primero por Johannes Majer y Robert Schoelkopf, de la Universidad de Yale (USA), y el segundo por Raymond Simmonds, del National Institute of Standards and Technology, (también de USA), han conseguido transferir información de un bit cuántico a otro (qubit) a una distancia significativa, a través de una especie de cable o cavidad sobre un circuito supraconductor, consiguiendo así una aproximación significativa a los pretendidos ordenadores cuánticos.

Los resultados de esta investigación han sido publicados esta semana en la revista Nature, al mismo tiempo que el National Institute of Standards and Technology de Estados Unidos ha difundido un interesante comunicado explicando la complicada relevancia de esta descubrimiento.

En los ordenadores cuánticos que imaginan los físicos, la información no se almacena en forma de trenes de números con valores de 1 y 0, sino en forma de bit cuánticos (qubits) que pueden contener los dos valores a la vez merced al principio de superposición de estados característico de la física cuántica.

La superposición de estados describe un fenómeno cuántico según el cual las partículas elementales (como los fotones) no están diferenciadas individualmente entre sí, como las gotas de agua dispersas en una mesa, sino en una superposición de estados, como las gotas contenidas en un vaso de agua, con una probabilidad de materializarse (de convertirse en gota de agua) para cada uno de esos estados superpuestos, dependiendo de determinadas circunstancias. En informática, el qubit representa la superposición de estados, al integrar los bits 0 y 1 de la misma forma que ocurre en el mundo cuántico.

Etapa fundamental

Una etapa fundamental para la construcción de un ordenador cuántico es conseguir transmitir información de un qubit a otro qubit situado más lejos en el interior de un chip. Para ello es preciso producir de manera precisa fotones individuales, que son los transportan la información cuántica.

Las fuentes de fotones son múltiples, pero la dificultad estriba en que las fuentes de fotones los emiten en grupo, no aisladamente. Además, los fotones son poco comunicativos entre sí y pueden afectarse recíprocamente, por lo que es difícil trabajar con ellos de manera eficiente. Asimismo, son tan minúsculos que jamás podrían chocar unos con otros.

Para superar éstas y otras dificultades, el equipo de científicos de Yale ha concebido una fuente de ondas electromagnéticas, en la gama de las microondas, que genera un solo fotón por impulso y lo guía sobre un circuito supraconductor, a temperaturas próximas al cero absoluto. (Las microondas se identifican a las ondas electromagnéticas en el espectro de frecuencias comprendido entre 300 MHz y 300 GHz.)

Para aislar el fotón y transmitir la información, el surco del circuito tuvo que ser enfriado concretamente hasta diez miligrados por encima del cero absoluto (la temperatura teórica más baja posible, que en la práctica nunca ha sido alcanzada), es decir, a -273,13 grados centígrados.

Por su lado, el equipo del National Institute of Science and Technology construyó el singular circuito que unió a los dos qubits, y que almacenó la información necesaria durante 10 nanosegundos (un nanosegundo es la milmillonésima parte de un segundo).

Tiempo y espacio suficientes

De esta forma, ambos equipos han demostrado que en un universo cuántico de estas características, la señal que transporta la información puede ser conservada durante una distancia larga y el tiempo suficiente, gracias a fotones generados por microondas, que son los que su frecuencia sitúa en la gama de las microondas, correspondiente a algunos centímetros.

Lo que han conseguido por tanto es utilizar un fotón para transferir el estado cuántico de un qubit a otro qubit gracias a un cable (en realidad un surco) que guía al fotón a modo de rail.

Los dos qubits del experimento son de la talla de un cabello humano y han sido colocados en un chip de zafiro, que a su vez ha estado cerrado en una caja de 8 milímetros cúbicos. El cable mide 7 milímetros y serpentea entre los dos qubits, separados entre sí por un espacio de 1,2 milímetros.

Los dos equipos de físicos han sido los primeros en demostrar que, sobre un circuito supraconductor, una especie de autobús cuántico puede transportar datos entre dos qubits a una distancia tan significativa, lo ha llevado a hablar figuradamente de una metamorfosis del cable digital al cable cuántico.

Estos físicos consideran al respecto que este principio de transmisión cuántica verificado con esta distancia puede ser extendido a un número mayor de qubits para formar un chip destinado a los ordenadores cuánticos, para lo que es preciso, sin embargo, unir miles de qubits, algo que de momento no está tan próximo.


Fuente:

Tendecias 21
google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0