Un estudio ha relevado que fumar en los coches aumenta los niveles de partículas finas contaminantes, muy peligrosas para la salud, superando los límites recomendados por los distintos Ministerios de Sanidad del mundo.
Médicos de Gran Bretaña midieron las concentraciones de este tipo de
partículas en coches conducidos por 17 personas, 14 de ellos fumadores,
utilizando un monitor electrónico en el asiento trasero.
La investigación aparece en la revista médica británica Tobacco Control.
A los voluntarios se les pidió que tuvieran un comportamiento
normal, siguiendo sus hábitos de fumadores o no fumadores, de esta
manera se hizo un seguimiento de tres días de los
niveles de humo en los coches. De los 104 viajes que se hicieron, con
una duración de 27 minutos, 63 estuvieron libres de humo.
En los viajes en los que se fumaba, los niveles de partículas finas
fueron de media unos 85 microgramos por metro cúbico, frente a los 25
microgramos por metro cúbico para la contaminación interior establecido
por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Incluso cuando el conductor abría la ventana o encendía la ventilación para eliminar el humo, los niveles de partículas todavía estaban por encima del punto de referencia en algún momento durante estos viajes.
El pico promedio durante los viajes de fumadores fue de 385
microgramos por metro cúbico, siendo el más alto de 880. En contraste,
los niveles de partículas durante los viajes de no fumadores fueron sólo
de 7,4 microgramos por metro cúbico.
El tamaño de estas partículas medidas es inferior a 2,5 micrómetros
de diámetro. Estas partículas tan pequeñas se consideran muy peligrosas,
ya que se pueden presentar en el pulmón, causando irritación.
Los niños expuestos a estos niveles de partículas finas son propensos a sufrir sus malos efectos en la salud
Dice Sean Semple, encargado del estudio, del Scottish Centre for Indoor Air en la Universidad de Aberdeen .
Hay un número creciente de países en legislar en contra de fumar en los coches, y tales medidas pueden ser apropiadas para evitar la exposición de los niños a estos altos niveles de humo.
En España está prohibido fumar conduciendo, no por la calidad del
aire que respiramos, sino por considerarse una peligrosa distracción al
conductor.
Fuentes: