Fotografía donde se aprecia una vista de deshielo en el oeste de Groenlandia.
Las capas de hielo de Groenlandia y la Antártida están perdiendo su masa a un ritmo más acelerado de las predicciones hechas hasta ahora que repercutirá en la subida del nivel del mar mundial, según un estudio difundido este miércoles por la NASA.
Los resultados del estudio sugieren que las capas de hielo se están deshaciendo más rápido que los glaciares de las montañas y serán el principal factor que contribuya a una subida global del nivel del mar, mucho antes de lo previsto.
Como ejemplo, en 2006 los polos perdieron una masa combinada de 475 gigatoneladas al año en promedio, una cantidad suficiente para elevar el nivel global del mar en un promedio de 1,3 milímetros al año frente a las 402 gigatoneladas que perdieron de promedio los glaciares de la montaña.
LA NASA ha analizado datos de sus satélites entre 1992 y 2009 y ha descubierto que cada año durante el curso del estudio, las capas de hielo de los casquetes polares perdieron un promedio combinado de 36,3 gigatoneladas más que el año anterior.
"Que las capas de hielo serán la principal causa del aumento del nivel del mar en el futuro no es sorprendente, ya que poseen una masa de hielo mucho mayor que los glaciares de montaña", señaló el autor del estudio, Eric Rignot, de la Universidad de California.
"Lo sorprendente es que esta mayor contribución de las capas de hielo ya está sucediendo", advirtió el científico que llevó a cabo la investigación con la colaboración del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA.
Las mediciones realizadas indican que "si continúan las tendencias actuales, es probable que el aumento del nivel del mar sea significativamente mayor que los niveles proyectados por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático en 2007", agregó.
Consecuencias
"No es sorprendente que las capas de hielo dominen el futuro incremento del nivel del mar, ya que tienen una masa de hielo mucho mayor que los glaciares de montaña", dijo el autor principal de la investigación, Eric Rignot, del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL, por sus siglas en inglés) de la agencia espacial estadounidense, NASA, en Pasadena, California.
"Lo que sí es sorprendente es que esta contribución creciente de las capas de hielo ya está ocurriendo", añadió.
Si se realiza una proyección de ese ritmo de pérdida de hielo hasta 2100, la contribución a la subida del nivel del mar solamente de las dos capas de hielo se calcula en 56 centímetros.
Como contraste, el IPCC proyectó en 2007 una subida máxima de 59 centímetros, aunque reconoció que probablemente era una subestimación debido a que el conocimiento de los procesos que tienen lugar en las capas de hielo era insuficiente para permitir hacer estimaciones confiables.
Desde 2007, varios otros grupos de investigación, usando métodos diferentes, han concluido que una cifra entre uno y dos metros es probable, lo que tendría graves consecuencias para las islas y países con costas largas y bajas, como Bangladesh.
"Si continúan las tendencias actuales, es probable que el nivel del mar sea perceptiblemente más alto que lo proyectado por el IPCC", dijo el Dr. Rignot.
"Nuestro estudio ayuda a reducir la incertidumbre en las proyecciones a corto plazo de la subida del nivel del mar", agregó.
Metodologías
En la nueva investigación se utilizaron dos metodologías diferentes.
Una calcula el aumento y la pérdida de hielo, mediante la combinación de varios tipos de lecturas satelitales y datos adquiridos en el terreno, por ejemplo el grueso de la capa de hielo y la velocidad de desplazamiento de los glaciares.
El segundo grupo de datos proviene de la misión "Grace" de la NASA, que utiliza satélites gemelos para medir variaciones en la gravitación de la Tierra.
La pérdida de hielo causa una reducción fraccionaria de la gravedad en ese punto de la superficie terrestre.
Hace dos años, esta misión sorprendió a algunos en la comunidad de investigación al mostrar que incluso la enorme y frígida capa de hielo del este antártico estaba perdiendo parte de su masa en los océanos.
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