Miércoles, 10 de marzo de 2010
Confirmado: El iPhone es adictivo
El iPhone
El iPhone, de la compañía Apple Inc., es un teléfono inteligente multimedia con conexión a internet, pantalla táctil (con tecnología multitáctil) y una interfaz de hardware minimalista. Ya que carece de un teclado físico, se muestra uno virtual en la pantalla. El iPhone 3GS dispone de una cámara de fotos de 3 Megapixeles y un reproductor de música (equivalente al del iPod) además de software para enviar y recibir mensajes de texto y mensajes de voz. También ofrece servicios de internet como leer correo electrónico, cargar páginas web y conectividad por Wi-Fi.
Apple anunció el iPhone el 9 de enero del 2007. El iPhone se introdujo inicialmente en los Estados Unidos el 29 de junio de 2007. Fue nombrado «Invento del año» por la revista Time en el 20O8. El 11 de julio de 2008 el iPhone 3G salió a la venta, esta versión soporta la transmisión de datos por 3G a una velocidad más rápida y tecnología AGPS.
Existen varias aplicaciones en la pantalla principal del iPhone: SMS (mensajes de texto), Calendario, Fotos, Cámara, YouTube, Bolsa, Mapas (Google Maps), Tiempo (proporcionado por Yahoo!), Reloj, Calculadora, Notas, Ajustes e iTunes Store. Otras cuatro aplicaciones, en una subsección gris debajo de la pantalla principal, son las principales del iPhone: Phone (teléfono), Mail (correo electrónico), Safari e iPod.
Una encuesta de la Universidad de Stanford (y publicada por LiveScience) acaba de confirmar lo que muchos usuarios de un iPhone ya sospechaban desde hace tiempo: que el teléfono ideado hace ya tres años por Steve Jobs puede crear adicción. La investigación fue llevada a cabo sobre 200 estudiantes propietarios de un iPhone. El 70% de ellos sólo lo tenían desde hace menos de un año.
Esa es precisamente una de las tendencias más sorprendentes del estudio, lo rápido que un iPhone puede llegar a convertirse en una parte imprescindible de la vida de sus propietarios, así como el hecho de que la mayoría de ellos confiesa abiertamente que se sentiría perdido si de pronto tuviera que prescindir de él.
Pero veamos algunos datos interesantes. Cerca del 85% de los dueños de un iPhone utilizan el teléfono como reloj, y hasta un 89% lo usan como despertador. De hecho, el 75% de los jóvenes participantes en el estudio admiten que se meten con su iPhone en la cama al irse a dormir, y hasta un 69% aseguran que es mucho más probable que se olviden de la cartera al salir de casa que de su preciado teléfono.
Muchos de los estudiantes son perfectamente conscientes de su dependencia, y cuando se les pidió que la valoraran en una escala del uno al cinco, el 10% de ellos no dudó en elegir el valor máximo, el 34% se quedó en un cuatro y sólo un 6% afirmó no ser adicto en absuluto. Entre los que no se consideraron del todo "enganchados" al dispositivo, un 32% mostraron su preocupación ante la posibilidad de convertirse en adictos en algún momento.
«Una ventana abierta al mundo»
Tres de cada diez encuestados no dudaron en calificar su iPhone como "una ventana abierta al mundo". Casi el mismo porcentaje calificó el invento de "peligrosamente encantador" y un 41% admitió sin tapujos que perder su iPhone supondría "una tragedia".
Para Tanya Luhrmann, profresora de antropología de la Universidad de Stanford y máxima responsable de la investigación, "una de las cosas más llamativas que pudimos comprobar durante las entrevistas fue el grado de identificación de los encuestados con su iPhone. Y no era tanto por el objeto mismo, sino sino por la cantidad de información personal que contenía, tanta que se había convertido en una especie de extensión de su mente y de su vida social. De algún modo, era como si (el iPhone) hubiera capturado una parte de su identidad".
Los investigadores se encontraron también con la tendencia a "humanizar" sus teléfonos de un modo muy diferente al habitual con otros dispositivos electrónicos. Por ejemplo, el 3% de los estudiantes aseguró que no permitía a otras personas tocar su iPhone. Otro 3% le había puesto un nombre a su teléfono. Otro 9% lo había acariciado en alguna ocasión y hasta un 8% admitió haber pensado en alguna ocasión que "mi iPod está celoso de mi iPhone".
La encuesta también sugiere que la creación telefónica de Apple puede llegar a afectar a las relaciones personales de sus propietarios. Muchos de ellos, en efecto, relataron discusiones con amigos y parientes causadas por el excesivo tiempo que dedicaban a manipular sus dispositivos.
Un 7% de los estudiantes entrevistados afirmó tener un compañero de cuarto o una pareja que se siente abandonado a causa de la excesiva atención prestada a su iPhone. Según Luhrmann, para ilustrar esas situaciones algunos llegaron a utilizar la expresión "viudas del iPhone".
«iPhonedependencia»
A pesar de todo, y de que los expertos aún no se ponen de acuerdo sobre si las varias adicciones a la tecnología deben o no ser consideradas como un problema médico, la investigadora duda a la hora de calificar la del iPhone como una "adicción insana". "No creo que sea perjudicial -asegura la experta- y pienso que realmente les gustan sus iPhones".
Por el contrario, Luhrmann destaca algunos hechos positivos de esta "iPhonedependencia". Más del 70% de los estudiantes entrevistados aseguraron que su teléfono ha hecho de ellos personas más organizadas, y el 54% afirma que también más productivas. Aparte del hecho, claro, de que un 74% de ellos se siente más "cool" por el simple hecho de poseer el teléfono con la manzana mordida. ¿Quién, en su sano juicio, podría resistirse a tantos encantos?
Fuentes:
ABC.es
Muy Móvil