El hallazgo apoya el origen extraterrestre de la bioquímica
El origen de la vida en la Tierra aún esconde secretos para la ciencia. Uno de los puntos de debate es si los bloques de la química de la vida se formaron in situ o si llegaron a bordo de meteoritos. De ser cierta esta segunda hipótesis, sería más fácil explicar cómo surgieron las enormes y complejas moléculas bioquímicas, ya que nuestro planeta se habría encontrado con parte del trabajo hecho, incluyendo componentes posiblemente escasos en la Tierra primitiva. Pero, además, esta siembra de semillas químicas pudo disparar la evolución de la vida no sólo aquí, sino en lugares como Marte, cuya primera infancia fue muy similar a la de la Tierra.
Un equipo de científicos de la NASA y de la Institución Carnegie de Washington ha allanado el camino a este posible origen extraterrestre de los ladrillos básicos de la vida. Analizando extractos de 12 meteoritos caídos en suelo terrestre, han hallado restos de nucleobases, los eslabones de la cadena del ADN. Hasta ahora había sido difícil determinar si la búsqueda de estos compuestos nitrogenados en los meteoritos podía dar con verdaderos ingredientes importados del espacio o con simples contaminantes terrestres, ya que tales elementos son omnipresentes en este planeta. Los investigadores creen haber establecido sin duda alguna que las nucleobases de las rocas espaciales son foráneas. Lo sustentan en dos pruebas: primero, tres de las moléculas encontradas son muy raras en la Tierra. Según el geofísico de Carnegie James Cleaves, uno de los autores del estudio que hoy publica PNAS, "encontrar compuestos de nucleobases que no son típicos en la bioquímica terrestre apoya fuertemente el origen extraterrestre". Segundo, estasnucleobases no se encontraron en muestras de los suelos y hielos donde se rescataron los meteoritos.
En paralelo, y para confirmar su hipótesis, los científicos simularon un entorno químico rico en cianuro de amonio, como el que debía de reinar cuando se formaron las moléculas espaciales, y el resultado fue un conjunto de nucleobases similar. En su estudio, los científicos señalan que, con este hallazgo, ya se ha confirmado la presencia en los meteoritos de ladrillos para construir proteínas, membranas celulares y, ahora, material genético. "Los meteoritos pueden haber servido como kits moleculares que suministraron ingredientes esenciales para el origen de la vida en la Tierra y posiblemente en otros lugares", concluyen los investigadores.
Fuente