Circunstancia equivalente a estar de camping, en la playa o en una excursión campestre y encontrarnos con el mismo problema: todas las latas de refrescos están a temperatura ambiente. No hay fallo. Sólo hace falta un poco de hielo y sal para enfriar tú bebida en tan sólo dos minutos.
Necesitarás un recipiente o bol para poner los hielos, añadir una cucharada sopera de sal y, a continuación, meter dentro uno de los refrescos. Tan sólo habrá que dar un par de vueltas a la lata para que la sal se disuelva y esperar dos minutos. ¡Bajarás su temperatura ambiente en más de 15 grados!
Como explican en este vídeo de Upsocl, la segunda ley de la termodinámica establece que “dos sustancias con diferentes temperaturas alcanzan el equilibrio térmico entre ellas”. Química pura y dura. La mezcla de la sal y el agua produce una reacción endotérmica –que absorbe energía– de tal forma que, una vez disuelta, la sal absorberá el calor de la lata de tal forma que el frío de los hielos pasará más rápido al recipiente que está a temperatura ambiente. En tan sólo 120 segundos.
Fuentes:
ElConfidencial
60minutos