Aquellos que hayan visitado un campus universitario no habrán tenido
mucha dificultad para encontrar estudiantes pasando el rato jugando a
los malabares. Otra cosa fácil de encontrar en una universidad es
empollones de todo tipo. En algunas ocasiones incluso ambos personajes
resultan ser el mismo: un empollón malabarista. Y un empollón
malabarista es precisamente lo que era Paul Klimek, que además de tener
gran habilidad con las bolas era matemático en la Universidad de
California en Santa Cruz. Klimek, y posteriormente otros matemáticos, desarrollaron una
notación numérica para trucos de malabares conocida como notación
Siteswap (también llamada a veces Quantum Juggling o Cambridge
Notation), que además de simple es bastante bonita. La idea consiste en registrar la acción de cada mano en una secuencia
temporal, como si las manos actuasen por turnos (izquierda, derecha,
izquierda, derecha, …). Se visualiza mejor mediante un diagrama como
este, en el que se supone que el tiempo “fluye” de arriba a abajo:
Las acciones posibles son mano vacía, mano con bola, o lanzar bola (a diferentes alturas y cambiando o no de mano). Cada acción se puede codificar con un número entero, contando para
ello el número de pasos durante los cuales la bola se mantendrá en el
aire. Lo mejor es verlo en un ejemplo:
El siguiente diagrama también puede ser útil:
Vemos algunas características de esta notación:
Cuando aparece un número par, la bola se recogerá con la misma mano con la que es lanzada.
Si es impar, la bola cambiará de mano.
El número tiene que ver con el tiempo que pasa volando la bola, y por tanto con la altura a la que se lanza
Un 0 representa una mano sin bola, y un 2 una mano que sostiene una bola sin lanzarla.
Hay que aclarar que normalmente los trucos no son tan complicados
como el de este ejemplo. Habitualmente son secuencias muy cortas, como
por ejemplo 333 o 40, y se da por hecho que se repiten periódicamente. El artículo completo en: Cultura Científica