La Unión Europea aprobó el uso
de una controvertida cepa de maíz genéticamente modificado en el
continente, pese a que la mayoría de los países miembro habían votado en
contra de levantar las restricciones sobre la semilla.
Actualmente, sólo una semilla genéticamente modificada -también una variedad del maíz- tiene el visto bueno para ser cultivada en suelo europeo.
Bajo las reglas de la Unión, y dado que no hubo suficientes votos a favor de una autorización expresa, la decisión sobre el transgénico 1507, producido por la multinacional Dupont, deberá ser tomada ahora por la Comisión Europea.
Pero se anticipa que podría conseguir fácilmente luz verde, en tanto el organismo del bloque encargado de evaluar la seguridad alimentaria no presentó objeciones en su dictamen previo.
Fuente:
BBC Ciencia