No solo eso. El estudio encontró que el 60% de los gérmenes hallados en los recipientes tenían el potencial de enfermar a una persona. La doctora Marilyn Glenville dijo que los productos químicos allí encontrados "pueden tener efectos en cada sistema del cuerpo" y recomendó que, en lugar de reutilizar las botellas de plástico, se las recicle antes.
El estudio despertó dudas. Se desconoce el tratamiento que tuvieron las
botellas. Si estuvieron en contacto con el suelo u otras superficies
contaminantes. Tampoco establece una comparación entre los recipientes
que se lavaron antes de reutilizar y los que no. Sin embargo, no es la
primera investigación que sigue esta línea.
Otro estudio de 2002, publicado en la revista Canadian Journal of Public Health, determinó
que dos tercios de las 76 botellas de agua que utilizaban estudiantes
de primaria superaban los límites de bacterias recomendados. Algunos de esos recipientes habían pasado hasta seis meses sin lavarse.
De acuerdo a la BBC, "los expertos coinciden en que el mayor riesgo
para la salud asociado a la reutilización de las botellas de plástico es
microbiológico". Es decir, se produce por el deterioro habitual que
provoca su uso diario: una pequeña rotura o grieta en el material
resultan lugares ideales para la concentración de bacterias.
En caso de reutilización, Glenville aconsejó comprar botellas de
plástico sin Bisfenol A o BPA -un producto químico recurrente en los
envases de policarbotano- y enjuagar el recipiente, pero no con agua
demasiado caliente ya que libera estos productos químicos 55 veces más
rápido de lo normal. Las botellas de plástico sin Bisfemol A las encuentras con el dibujo de un triángulo negro o con el siguiente logo: