31 de julio de 2014
Londres, ¿más contaminada que Pekin?
Las altas presiones de los últimos días han sacado a relucir el "sucio secreto" de Londres, con los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) más altos de todas la capitales europeas, superiores incluso a los de Pekín. El récord se ha registrado en Oxford Street, con 135 microgramos por metro cúbico: cuatro veces más de los 40 microgramos recomendados por la Unión Europea (un límite superado habitualmente por otras siete ciudades británicas).
Las mediciones realizadas recientemente por expertos del Kings College a las puertas de los famosos grandes almacenes Selfridges han disparado las alarmas. El otro punto "negro" de la geografía londinense en Marylebone Road, entre el Museo de Cera de Madame Tussaud y el museo de Sherlock Holmes, donde se han medido niveles de hasta 94 microgramos de NO2 por metro cúbico.
En contraste, Pekín registró el año pasado una concentración de 56 microgramos de NO2 por metro cúbico, según datos del Ministerio de Protección del Medio Ambiente. La contaminación causada por las partículas en suspensión (otro subproducto de los procesos de combustión del tráfico) es sin embargo tres veces mayor en China.
En cualquier caso, los datos de Oxford Street, una calle con circulación restringida y dentro del perímetro del "peaje de congestión" londinense, han creado estupor entre los expertos. La circulación incesante de "black cabs" y de autobuses de dos pisos son la principal causa.
"Los motores diésel son los principales causantes del empeoramiento de la calidad del aire en Londres", sostiene David Carslaw, investigador del Kings College. "Que tengamos noticia, los niveles registrados este año en Oxford Street son los más altos de los que tenemos constancia en la larga historia de la contaminación en Londres".
El "smog" fue parte inconfundible del paisaje en el ciudad del Támeses desde la revolución industrial hasta mediados del siglo XX. En 1952, la nube contaminante conocida como el Gran Smog provocó 4.000 muertes y sirvió para impulsar la primera ley del "aire limpio" de las grandes ciudades europeas.
Se estima que el efecto combinado del N02 y las partículas en suspensión pudieron causar la muerte de 3.389 personas afectadas con enfermedades respiratorias en el 2010, según la agencia estatal Public Health England. En abril pasado, la ciudad decretó la alerta sanitaria por la alta contaminación (nivel 8, de un máximo de 10), suspendió las al aire libre en los colegios como medida preventiva y previno a las personas mayores y con problemas de asma que se quedaran en sus casas.
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El Mundo Ciencia