"Una supernova tipo Iax es esencialmente una mini supernova", dice Ryan Foley, autor de la investigación. "Es la pequeña de la camada". Foley y sus colegas identificaron 25 ejemplos de este nuevo tipo de explosión estelar. Ninguno de ellos apareció en las galaxias elípticas, que están llenas de estrellas viejas, lo que sugiere que provienen de sistemas estelares jóvenes.
El equipo llegó a la conclusión de que una supernova tipo Iax proviene de un sistema estelar binario que contiene una enana blanca y una estrella compañera que ha perdido su hidrógeno exterior, dejándola dominada por el helio. La enana blanca acumula helio de la estrella normal.
Los investigadores no están seguros sobre qué desencadena una Iax. Es posible que la capa exterior de helio se encienda primero, enviando una onda de choque a la enana blanca. Como alternativa, la enana blanca puede encenderse primero debido a la influencia de la capa de helio.
ESCONDIDA EN LAS SOMBRAS
En cualquier caso, parece que la enana blanca sobrevive a la explosión, a diferencia de una supernova Ia, donde queda completamente destruida. "La estrella será maltratada y golpeada, pero podrá vivir para ver otro día", dice Foley.
El investigador calcula que las supernovas de tipo Iax son alrededor de un tercio tan comunes como las Ia. La razón por la que solo algunas han sido detectadas es que las más débiles tienen solo una centésima parte del brillo de las Ia. Es decir, apenas pueden detectarse.
"Las supernovas de tipo Iax no son raras, solo son débiles", explica Foley. "Durante más de mil años, los humanos han estado observando supernovas. Todo este tiempo, esta nueva clase se ha escondido en las sombras".