Este artículo complementa el post anterior relacionado con la aparición, y desaparición, de patologías... (vía El Comercio).
Por primera vez en 20 años se han incluido algunos cambios en la considerada “biblia” que los psiquiatras usan para diagnosticar.
A partir de ahora la adicción a la comida será reconocida como una enfermedad mental. El padecimiento, que antes figuraba entre las condiciones que requieren “estudios adicionales” en la considerada “biblia” que usan los psiquiatras para diagnosticar a sus pacientes, ahora es descrito en el libro como una enfermedad en toda regla.
Según apunta el portal de la revista “Time”, incluir al problema en el libro Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DMS) traerá múltiples consecuencias. Por ejemplo, los comedores compulsivos podrán solicitar, al menos en Estados Unidos, un reembolso en el seguro cuando se vayan a atender. Asimismo, el cambio “va a crear un mercado nuevo e importante” para el tratamiento de este cuadro.
Asimismo, en un comunicado, los encargados del DSM indicaron que ahora se busca “representar mejor los síntomas y comportamientos de las personas con esta condición”.
Cabe indicar que el texto de los psquiatras incluyó otros importantes cambios. Por ejemplo, ahora ya no se hablará de asperguer o autismo, ya no serán considerados por separado. Todos estos términos serán incluidos dentro del diagnóstico de trastorno del espectro autista. Asimismo, los niños que hacen berrinches constantemente podrían ser diagnosticados con una enfermedad que acaba de incluirse: el trastorno de desregulación disruptiva del estado de ánimo (DMDD).
Fuente:
El Comercio (Perú)