Cientos de manifestantes salieron a las calles de la ciudad, en la provincia de Sichuan, y hubo enfrentamientos en los que varios policías y manifestantes resultaron heridos.
El gobierno de Shifang dijo que consultaría a la población local sobre sus preocupaciones, pero también advirtió que se enfrentan a un severo castigo si no detienen las protestas, a las que calificó como ilegales.
Fuente:
BBC Ciencia