Latest Posts:

11 de noviembre de 2010

El secreto de la lengua de los gatos


Ágiles, seductores, solitarios y de mirada inquietante. Los felinos son elegantes por naturaleza, incluso para beber. Mientras que los perros utilizan la lengua colocándola en forma de cuchara invertida, los gatos utilizan dos fuerzas físicas, la gravedad y la inercia, para succionar de forma delicada los líquidos con la punta de sus lenguas. Al igual que las trompas del elefante y los tentáculos del pulpo, la lengua de los gatos son muy ágiles, según un estudio publicado en Science Express.

Durante la investigación, Pedro Reis y sus colegas del Instituto de Tecnología de Massachusetts en Cambridge (Estados Unidos), usaron imágenes de alta velocidad para captar el equilibrio de fuerzas que utiliza el gato mientras bebe y la mecánica del agua que está bebiendo. Descubrieron que los gatos curvan su lengua hacia atrás de modo que la superficie superior toque ligeramente el líquido. Cuando el gato levanta su lengua con rapidez, el agua sube dentro de su boca en forma de columna líquida y va creciendo por inercia. A continuación, el gato cierra la mandíbula para capturar el líquido antes de la gravedad rompa esta columna.

Para tener una mejor idea del mecanismo que hay detrás de sus lengüetazos, el equipo realizó experimentos de física. Tras analizar las diferentes velocidades de 'lengüetazos' de los felinos, los investigadores pudieron cuantificar las funciones de la gravedad y la inercia para fijar la frecuencia óptima del movimiento de su lengua.

Esta secuencia reveló algunas sorpresas, como el descubrimiento de que los lengüetazos que realizan los gatos al beber son muy diferentes de los de los perros. Otra sorpresa fue la rápida velocidad con que se mueve la lengua de un gato, casi un metro por segundo. Esto implica que la tensión superficial del líquido no juega ningún papel en el proceso. El líquido es dominado por las fuerzas de la gravedad y la inercia. Los autores también descubrieron que cuanto más grande es el felino, más lento bebe.

Fuente:

El Mundo Ciencia

google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0