Martes, 30 de marzo de 2010
¿Qué es un Purificador de Aire Urbano (PAU)?
El diario Correo (Perú) informó:
Lima, una ciudad ahogada por el dióxido de carbono y la falta de árboles, mejorará de manera sustancial. Esto ocurrirá luego de que el Ministerio de la Producción (Produce) implemente el proyecto del "Súper Árbol", una novedosa tecnología usada en la purificación de aire contaminado.
"Produce, mediante el Programa Innóvate Perú-Fidecom, está por aprobar este proyecto en los próximos días", afirmó ayer Iván Juscamaita, coordinador de Red IDi, institución a cargo del mencionado sistema de purificación.
El "Súper Árbol" (científicamente conocido como Purificador de Aire Urbano) es una gran estructura metálica que puede reemplazar a 800 árboles naturales. "Si una persona respira 10 m3/día, un solo equipo tiene la capacidad de purificar aire para 20 mil personas al día", puntualizó. El referido proyecto fue una iniciativa de la empresa Tierra Nuestra y participan en él prestigiosas universidades del país.
En marzo de 2009 se instaló el primer PAU en Lima (Perú), en la intersección d elas avenidas Aviación y Angamos...
Conozca más sobre el PAU en esat nota de Tendencias 21, del 2007:
Ingenieros peruanos desarrollan un Superárbol para descontaminar ciudades
Es capaz de limpiar en un día el aire que respiran 20.000 personas
Un equipo de ingenieros peruanos ha desarrollado un sistema denominado PAU-20, con el que se pueden purificar 200.000 metros cúbicos de aire al día, es decir, la cantidad diaria de aire que respiran 20.000 personas. Los contaminantes del aire quedan fijados en agua mediante un proceso que produce aire limpio. Ya hay una instalación piloto en Lima, pero sus creadores esperan que el proyecto se expanda a ciudades de todo el mundo. El depurador, conocido como superárbol, proporciona asimismo valiosa información sobre la contaminación biológica ambiental y es capaz de fijar al día tanto CO2 como una hectárea de eucaliptos.
En el caso de Lima, que se encuentra entre las 13 ciudades más contaminadas del país, el exceso de emisiones procedentes del parque automovilístico constituye una de las causas principales de esta contaminación aérea.
Esta situación animó a la compañía peruana Tierra Nuestra, especializada en la conservación del medio ambiente a través del diseño y la construcción de alternativas de energías renovables para procesos industriales, a crear el llamado Purificador de Aire Urbano PAU-20 o Superárbol.
Grandes volúmenes de aire
Según publicó el mes pasado el diario El Comercio, de Perú, se trata de un dispositivo que permite eliminar partículas en suspensión y gases contaminantes, como el dióxido de carbono, con la finalidad de limpiar grandes volúmenes de aire contaminado, en especial en aquellas zonas urbanas altamente contaminadas.
El Superárbol es capaz de purificar, eliminando polvo, gérmenes y bacterias, un volumen de aire de 8.334 metros cúbicos por hora, hasta llegar a los 200.000 metros cúbicos diarios, aseguran los ingenieros.
El aparato tiene un tamaño de cinco metros de alto por tres metros de ancho, pesa 1.200 kilogramos y precisa de 60 litros de agua para la destilación del aire contaminado. El aire y el agua, bajo condiciones termodinámicas adecuadas, logran equilibrar su entalpía (proceso de absorción termodinámico), produciendo la fijación de los contaminantes del aire en el agua en un proceso continuo.
De esta forma, el aire sucio entra por un lado de la máquina y, por el otro lado, sale aire puro. Los contaminantes quedan fijados en el agua, que es depositada en un desagüe, en forma de lodo estéril y agua no potable.
Apoyo institucional
En el año 2006, Rafael Rey, ministro de Producción de Perú, se comprometió a poner en marcha un plan piloto para llevar este sistema a los lugares más contaminados del país. Un prototipo está actualmente en funcionamiento en los exteriores de la sede el Ministerio de Industria, Comercio Exterior y Turismo, en Lima.
Sin embargo, los impulsores del PAU señalan que para extender su uso a distintos puntos de la capital se necesita aún más apoyo por parte de las instituciones privadas y estatales.
Según ha explicado uno de sus creadores, Jorge Gutiérrez Muñoz, Gerente General de Tierra Nuestra, a Tendencias21, el Superárbol tiene la ventaja adicional de monitorizar los virus diseminados en los entornos urbanos, a través del análisis del subproducto resultante de toda la operación de limpieza del aire. Esta propiedad adicional permite determinar las bacterias o virus responsables de ciertas enfermedades que afectan a la población de manera cíclica.
La información sobre virus y bacterias que flotan en el ambiente sirve a su vez para establecer tratamientos médicos con antibióticos concretos, disminuyendo el abuso de antibióticos genéricos a los que se recurre muchas veces por falta de información sobre la microbiología que origina determinadas patologías, que a la larga minan el sistema inmunológico de la población.
Una hectárea de eucaliptos
Gutiérrez señala asimismo que el Superárbol PAU-20 es capaz de fijar un 8% del dióxido de carbono del aire tratado en el agua en un día de operación, lo que equivaldría aproximadamente a la labor de una hectárea de eucaliptos en ese mismo periodo de tiempo.
El dióxido de carbono es el principal gas de efecto invernadero. Los árboles fijan carbono a través de la fotosíntesis: toman las moléculas de dióxido de carbono y las convierten en oxígeno. De esta forma, fijan el carbono en la madera del árbol y se convierten en almacenadores de carbono.
Segun la FAO, la agricultura es cada vez más una posible vía para la mitigación del cambio climático mediante el almacenamiento de carbono en los suelos y en la vegetación. La creación de un Superárbol, aunque sea artificial, puede ayudar a este proceso natural.
Según Gutierrez, esta tecnología aspira a extenderse más allá de las fronteras nacionales, dado que hasta ahora no existía una posibilidad técnica de control de los contaminantes aéreos en entornos urbanos exteriores. El precio del PAU-20 es de 100.000 dólares, aunque pueden ser pagados a través de carteles publicitarios que se pegan en su amplia superficie.
Fuente:
Tendencias 21