Latest Posts:

Mostrando las entradas con la etiqueta fideos. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta fideos. Mostrar todas las entradas

8 de febrero de 2012

De la boca al ano: fideos industriales frente a fideos caseros en su viaje por el tracto intestinal

M2A: Fantastic Voyage es un proyecto que trata de demostrar las diferencias entre los alimentos procesados industrialmente ​​y los hechos en casa, desde el punto de vista del interior del cuerpo humano.

M2A es el acrónimo de “Mouth To Anus” (de la boca al ano) y es una idea original de la artista Stefani Bardin, que ha trabajado mano a mano con el gastroenterólogo Dr. Braden Kuo, de la Universidad de Harvard, y con el Hospital General de Massachusetts (con apoyo adicional de nutricionista Lisa Sasson, de la Universidad de Nueva York).

El proyecto se centra alrededor de los datos visuales trasmitidos por una cápsula endoscópica con cámara en su interior que la persona se traga y que muestra cómo se ven los alimentos ​​durante la digestión.

El ensayo se llevó a cabo el 25 de junio del 2011 y fue la primera vez que esta tecnología se utilizaba en combinación con los alimentos para investigar y examinar el impacto de determinados comestibles en el tracto gastrointestinal. El pasado enero Stefani Bardin participó en una charla del TEDxManhattan 2012 para explicar sus conclusiones.

En el experimento se hicieron dos comidas con dos temas similares, pero fundamentalmente diferentes. Un sujeto recibió de menú un vaso de Gatorade, una taza de fideos ramen instantáneos con pollo y, de postre, unos ositos de gominola. Un segundo sujeto se comió los fideos hechos en casa, bebió té de hibisco y degustó de postre también ositos, pero de jugos naturales de granada y cereza.

Ambas digestiones quedaron registradas en la cámara de la píldora, lo que demuestra bastante visceralmente las diferencias con las que el cuerpo humano se encarga de procesar ambos tipos alimentos. Y las diferencias saltan a la vista.

En la foto de la izquierda, los fideos industriales; y en la de la derecha los fideos hechos en casa. Incluso después de hora y media los fideos comerciales siguen casi inmutables, como para sobrevivir a un Apocalipsis, mientras que los caseros prácticamente han perdido cualquier recuerdo de su antigua forma o color tras sólo 58 minutos.

El proyecto tiene como objetivo revelar el mundo oculto del comer, mostrando lo difícil que es para el cuerpo digerir los alimentos procesados. En segundo lugar, también parece que busca determinar algunos de los ingredientes sorprendentes y desconcertantes que, a menudo, están ocultos en la información nutricional de estos productos; y que son los que la mayoría de las veces les confieren el poder de la incorrupción frente a los jugos gástricos.

Ciertamente una comparativa del todo inquietante, que incluso llega a quitar el hambre.

Fuente:

La Información CienciaEnlace

1 de septiembre de 2010

¿Por qué los fideos se parten en tres o más fragmentos?

Espaguetis
Creative Commons License photo credit: HaSHe

Durante años han sido muchos los físicos, algunos tan importantes como el premio Nobel Richard Feynman (cuenta la leyenda), que han intentado resolver este fascinante enigma –al menos a ojos de ellos lo era- culinario sin éxito. Por fortuna, siempre nos quedará París. Y más concretamente el Laboratoire de Modélisation en Mecánique de la Université Pierre et Marie Curie, donde los físicos franceses Basile Audoly y Sebastián Neukirch consiguieron en 2005, por fin, dar con la explicación.

La cosa funciona, “grosso modo”, así: al doblar el espagueti llega un momento en que éste supera su límite de curvatura y se rompe en dos partes. Los extremos recién creados de ambos fragmentos liberan entonces toda la tensión acumulada y comienzan a vibrar. O, desde una interpretación más física, en cada uno de los fragmentos se originan unas ondas de flexión no lineales -tanto mayores cuanto mayor es el fragmento resultante- que viajan a lo largo del “medio-espagueti” hasta alcanzar el extremo que sujetas, donde se reflejan. Cuando las ondas de ida y las de vuelta se encuentran, se solapan. En algunas zonas se anulan entre sí, pero en otras suman sus efectos hasta el extremo de que en determinados puntos el fideo supera de nuevo su límite curvatura, originándose así un nuevo sitio de ruptura, en el que a su vez se reproduce el mismo comportamiento, aunque menos intenso debido a que los fragmentos son cada vez más pequeños y por tanto vibran menos.

En resumen, que la ruptura inicial desencadena una cascada de rupturas por obra y gracia de las ondas elásticas que sacuden cada pieza. Claro que esta secuencia de eventos sucede a una velocidad casi instantánea por lo que el efecto es que los múltiples fragmentos de espagueti se originan simultáneamente.

Información obtenida de medicinaintegrativa.net.

Aquí os dejo una aplicación didáctica y el vídeo de Proyecto G donde también lo explica.




Fuente:

Ciencia On lIne
google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0