La Fuerza G
es una medida intuitiva de la aceleración que soporta el piloto de uno
de estos cazas expresada en múltiplos de la gravedad terrestre. La
fuerza 9G es la que se experimenta en el interior de jets de combate
como el F-16 durante virajes al máximo, y equivale a unos 88 metros por
segundo. Bunting lo explica así:
Dejadme que os intente explicar qué se siente al experimentar 9G. En primer lugar, no es algo cómodo. Ni siquiera se le acerca. Lo primero que sientes es como si te arrancaran la piel de la cara a medida que mis mejillas parecieran querer refugiarse dentro de la boca. Lo siguiente que sientes es como la visión del color se desvanece. Primero los tonos rojos, después los verdes. Totalmente "espachurrado", intentas meter algo de aire en los pulmones a medida que la aceleración se reduce.
Viéndolo todo como si fuera a través de un televisor de los años 50, lo siguiente que notas son ondas en la visión que producen un extraño efecto de viñeteado en la periferia del campo visual. Mientras tanto, escuchas respirar al piloto y tratas de seguir su ritmo. Si hubiera decidido relajarme un instante, creo que me hubiera desmayado y despertado en una camilla de la base aérea, pero me estaba obligando a que eso no pasara. A medida que la fuerza de gravedad afloja un poco, se vuelve a una cierta normalidad, pero, de nuevo, si te relajas, la sangre que se agolparía en la cabeza probablemente te dejaría inconsciente, así que te obligas a permanecer alerta y comprimido hasta que el cuerpo puede recuperar parte de la normalidad que acabas de dejar atrás.
El
vuelo de Bunting culminó sin incidentes, y el fotógrafo terminó su
trabajo fotografiando a los pilotos y sus aviones de este escuadrón de
demostraciones acrobáticas. En el blog de Blair podéis leer (en inglés)
una descripción más detallada de esta experiencia tan aterradora como
maravillosa. [Blair Bunting].
Fuente: