Durante los distintos conflictos que salpicaron los siglos XVIII y
XIX, en las llamadas Guerras Indias entre los colonos blancos y los
indios norteamericanos, perecieron casi 50.000 indios y unos 19.000
invasores blancos.
Los indios de las praderas asentados en las grandes llanuras de la
zona central de Norteamérica eran pueblos nómadas que seguían la grandes
manadas de búfalos y, ocasionalmente, se establecían en algún
asentamiento en el que cultivaban maíz. La invasión del hombre blanco,
la fiebre del oro, la profanación de las Black Hills (Colinas
Negras), el exterminio de las manadas de búfalos… no les dejaron otra
salida que enfrentarse al hombre blanco.
Entre estos pueblos indios
existía la costumbre de protagonizar los llamados counting coup
(se podía traducir por actos o muestras de valentía) para demostrar su
valor en la batalla y, también, para superar la niñez y convertirse en
guerreros. Entre las distintas pruebas de valentía estaba tocar al
enemigo durante la batalla con la mano o con un palo y robar armas o
caballos de sus campamentos. Y como el torero Luis Miguel Dominguín la
primera vez que se acostó con Ava Gardner, lo mejor no era hacerlo sino
que los demás lo supieran… cuando se salía ileso de estas
locuras se podían poner una pluma de águila en la cabeza y si salían
heridos se la podían pintar en el cuerpo.
Tomado de:
Historias de la Historia