Yamanaka y Gurdon, en un simposio celebrado en Tokio en 2008.| Reuters
- El japonés Yamanaka y el británico Gurdon han sido los galardonados
- Su logro: conseguir dar marcha atrás al 'reloj' celular
"Sus hallazgos han revolucionado nuestro conocimiento sobre cómo se desarrollan las células y los organismos", ha señalado la organización en un comunicado.
"Este premio", continúa el texto, "reconoce a quienes descubrieron que las células maduras, especializadas, pueden reprogramarse para volver a ser células inmaduras, capaces de convertirse en todos los tejidos del cuerpo", subraya.
Desde 1901, la academia sueca concede anualmente esta distinción, dotada con 10 millones de coronas suecas (1,08 millones de euros), a la figura que haya realizado el descubrimiento más importante en el campo de la fisiología o la medicina.
Entre los favoritos para el galardón de 2012 figuraban también David Allis y Michael Grunstein, por sus avances en epigenética. Además, sonaban con fuerza los nombres de Anthony Pawson y Anthony Hunter, quien ya recibió el Premio Príncipe de Asturias en 2004 por sus aportaciones en el conocimiento del crecimiento y división celular.
Sin embargo, finalmente, han sido Yamanaka y Gurdon los elegidos por sus avances que "han hecho cambiar los libros de texto" y "han creado nuevas oportunidades para el estudio de las enfermedades y el desarrollo de métodos para diagnósticos y terapias", tal y como ha avanzado la organización.
Dar marcha atrás al 'reloj' celular
Hasta los años 60, se creía que, en el desarrollo, la especialización de las células era unidireccional. Es decir, que una vez que aparecían las células nerviosas o musculares en un ser vivo, no se podía dar marcha atrás al 'reloj' biológico y volver a convertir este material en células pluripotenciales (capaces de convertirse en cualquier tejido), como las de la etapa embrionaria.En 1962 Gurdon echó por tierra esa creencia al demostrar, en un experimento en ranas, que una célula madura intestinal podía proporcionar a un organismo primigenio toda la información necesaria para su correcto desarrollo.
Cuatro décadas más tarde, Shinya Yamanaka dio un salto en este camino y demostró que, sin necesidad de manipular embriones, era posible reprogramar células maduras de ratones para que volvieran a su etapa inicial.
Agradecimientos
Al conocer el galardón, el científico japonés ha afirmado que su "objetivo es llevar la tecnología de las células madre a los pacientes, a las clínicas", como ya señaló en una entrevista que concedió a este periódico en 2011.En una rueda de prensa celebrada en Kioto, Yamanaka, ha asegurado que no habría conseguido el premio de no haber sido por el apoyo de su país natal, Japón. "Era un investigador desconocido. Si no hubiera recibido el apoyo de mi país no habría conseguido el premio. Fue el país de Japón el que obtuvo el premio", ha señalado, antes de atender en directo la felicitación del primer ministro nipón, Yoshihiko Noda, al que ante las cámaras y micrófonos agradeció "el apoyo de todo Japón" y aseguró que continuará esforzándose para avanzar en sus investigaciones.
De hecho, el director del Centro para la Investigación y la Aplicación de Células iPS de la Universidad de Kioto no dedicará mucho tiempo a celebraciones a juzgar por sus palabras: "a partir de la semana que viene debo concentrarme en la investigación y atender a los estudiantes cuyas tesis dirijo".
Gurdon, por su parte, se ha mostrado "inmensamente honrado" por lo que ha calificado como "un espectacular reconocimiento". El biólogo, pionero en el campo de las células madre y la clonación, se ha confesado "encantado" de recibir este premio junto a Yamanaka. "Es particularmente agradable ver cómo simples investigaciones, que buscaban originalmente probar la identidad genética de diferentes tipos de células madre en el cuerpo, se han convertido en una clara posibilidad para la salud humana", señaló Gurdon
Otros Nobel
En la edición del año pasado, compartieron el premio Bruce A. Beutler, Jules A. Hoffmann y Ralph M. Steinman (fallecido días antes de la concesión del premio) por sus investigaciones en el ámbito de la inmunología y las vacunas.Por su parte, en 2010 el premiado fue Robert Edwards, que, junto a Patrick Steptoe, hizo posible el desarrollo de la fecundación 'in vitro'.
Desde su fundación, el Nobel de Medicina ha recaído en una sola persona en 38 ocasiones. Dos han sido los galardonados en 31 ocasiones y un grupo formado por tres científicos se ha llevado la distinción en otras 33 ediciones.
En los próximos días se conocerá a los ganadores del premio de Física y de Química, mientras que el viernes se concederá el único Nobel que se otorga y entrega en Oslo, el de la Paz.
Fuente:
El Mundo Ciencia