Da igual que sea su camiseta preferida o el jarrón que llevan viendo desde pequeños en su casa. Quienes sufren agnosia visual
no reconocen las caras ni los objetos aunque si lo cogen y lo
manipulan sí que son capaces de reconocerlo. Se trata de una extraña
enfermedad que apenas afecta a ocho personas en todo el mundo.
Una lesión en el cerebro
es la causante de que, quienes sufren agnosia visual, no reconozcan
absolutamente nada de lo que ven. No es un problema del lenguaje porque
quienes lo sufren conocen todas las palabras y los objetos que hay a su
alrededor; y tampoco es un trastorno de la memoria, pues sí que
recuerdan los objetos igualmente si los perciben con otros sentidos. Se
trata simplemente de una disfunción entre el cerebro y la visión que hace que todo lo que hay a su alrededor sea continuamente nuevo.
Por ejemplo, si se le enseña una raqueta de tenis no sabrá qué es ese
objeto ni para qué se utiliza pero en cuanto la coja, sabrá que es una
raqueta y que sirve para golpear una pelota.
La lesión cerebral que provoca este extraño problema puede provocarla desde un traumatismo craneoencefálico o un accidente cerebrovascular como un ictus, hasta una meningitis.
De momento no existe ningún tipo de cura para la agnosia visual, pero
una rehabilitación puede mejorar sensiblemente la situación de quienes
lo sufren. También existen otras agnosias relacionadas con otros sentidos como la agnosia gustativa o la agnosia olfativa (anosmia)
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