Estas sustancias se encuentran en muchos productos, como algunos plásticos. | Eugenio Torres
- Estas sustancias se encuentran presentes en muchos productos y alimentos
- El efecto por su consumo o exposición combinada no ha sido bien analizado
Un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio
Ambiente (PNUMA) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alerta
del aumento de la exposición humana a los disruptores endocrinos, por
ello han pedido con "urgencia" una investigación más completa sobre cómo
estas sustancias químicas, que pueden alterar el sistema hormonal (de
humanos y animales), afectan a la salud y al medioambiente.
"Necesitamos urgentemente más investigación para obtener una imagen más completa de los efectos sobre la salud y el medio ambiente de los disruptores endocrinos", ha afirmado la directora de la OMS para la Salud Pública y Medio Ambiente, la doctora María Neira.
El estudio sobre su efecto en conjunto requiere más investigación para entender completamente la asociación entre disruptores endocrinos (EDC) que se encuentran en muchos hogares y subproductos industriales y determinadas enfermedades y trastornos. Entre otros, se pueden encontrar en pesticidas, electrónica, productos de cuidado personal y cosméticos; también como aditivos o contaminantes en los alimentos.
Este estudio de la ONU, que es el informe más completo sobre los EDC hasta la fecha, destaca algunas asociaciones entre la exposición y problemas de salud, incluyendo la posibilidad de que esos productos químicos dificulten el desarrollo de testículos en los varones jóvenes; aumenten el riesgo de cáncer de mama, cáncer de próstata o cáncer de tiroides; y intervengan en el desarrollo del sistema nervioso en los niños con déficit de atención.
"Los productos químicos cada vez más forman parte de la vida moderna y apoya a muchas economías nacionales, pero la gestión no racional de los productos químicos se opone a la consecución de los objetivos clave de desarrollo, y el desarrollo sostenible para todos", ha afirmado el subsecretario general y director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner.
Por ello, apuesta por realizar nuevas pruebas para conocer mejor el coste sobre la salud de la exposición a estos productos químicos y ayudar en la reducción de riesgos, maximizando los beneficios, y "seleccionando las opciones más inteligentes y alternativas que reflejan la transición hacia una economía verde", añadió Steiner.
Fuente:
El Mundo Ciencia
"Necesitamos urgentemente más investigación para obtener una imagen más completa de los efectos sobre la salud y el medio ambiente de los disruptores endocrinos", ha afirmado la directora de la OMS para la Salud Pública y Medio Ambiente, la doctora María Neira.
El estudio sobre su efecto en conjunto requiere más investigación para entender completamente la asociación entre disruptores endocrinos (EDC) que se encuentran en muchos hogares y subproductos industriales y determinadas enfermedades y trastornos. Entre otros, se pueden encontrar en pesticidas, electrónica, productos de cuidado personal y cosméticos; también como aditivos o contaminantes en los alimentos.
Este estudio de la ONU, que es el informe más completo sobre los EDC hasta la fecha, destaca algunas asociaciones entre la exposición y problemas de salud, incluyendo la posibilidad de que esos productos químicos dificulten el desarrollo de testículos en los varones jóvenes; aumenten el riesgo de cáncer de mama, cáncer de próstata o cáncer de tiroides; y intervengan en el desarrollo del sistema nervioso en los niños con déficit de atención.
"Los productos químicos cada vez más forman parte de la vida moderna y apoya a muchas economías nacionales, pero la gestión no racional de los productos químicos se opone a la consecución de los objetivos clave de desarrollo, y el desarrollo sostenible para todos", ha afirmado el subsecretario general y director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner.
Por ello, apuesta por realizar nuevas pruebas para conocer mejor el coste sobre la salud de la exposición a estos productos químicos y ayudar en la reducción de riesgos, maximizando los beneficios, y "seleccionando las opciones más inteligentes y alternativas que reflejan la transición hacia una economía verde", añadió Steiner.
Fuente:
El Mundo Ciencia