Wong. En 120 días, empaques se deshacen con la luz y el oxígeno.
Más allá de la cuestión doméstica, los científicos se preocupaban verdaderamente, pues los plásticos convencionales tardan entre 100 y 600 años en desaparecer, causando un daño irreparable al medioambiente.
Para ilustrar lo grave del problema, señalaremos que anualmente en el mundo se utilizan entre 500 mil millones y billón de bolsas. De todo el plástico que se ha producido en la Tierra desde los años 30, menos de un 5 por ciento ha sido incinerado y el resto continúa en algún lugar del planeta.
Hace cinco años, en las costas de Normandía, se encontró a una ballena enana muerta con 800 kilos de bolsas de plástico en su interior. Anualmente, cientos de delfines, tortugas y aves marinas mueren asfixiadas o atragantadas por estos envases.
Efraín Wong, director de Operaciones de Corporación Wong, señala: “Esta medida complementa las campañas para el cuidado del medioambiente que siempre hemos promovido, como el reciclaje de botellas de vidrio, papel, botellas plásticas, pilas y baterías usadas”.
ADITIVO
Las bolsas que ha empezado a utilizar Wong se fabrican con tecnología Oxo-biodegradable-TDPA (Totally Degradable Plastic Additives). El aditivo lo desarrolla la empresa canadiense EPI.
Fuentes.
Total News
RPP Noticias
El Comercio