La prensa alemana señala a Jörg Kerner, exresponsable de motores de Porsche, que trabajaba en Audi cuando estalló el escándalo.
Un directivo de Porsche, el emblemático fabricante de coches deportivos y filial de Volkswagen, ha sido detenido en Alemania a raíz de unos registros en dicha empresa por el escándalo por el trucaje de motores diésel para falsear emisiones que azotó a Volkswagen en 2015, conocido como Dieselgate,
según ha indicado este viernes a France Presse un portavoz del
fabricante de automóviles. El consejero delegado de Porsche informó a
los empleados de que la fiscalía de Stuttgart había decretado "detención
preventiva para un directivo", ha añadido dicho portavoz. Según los
diarios alemanes Bild y Wirtschaftwoche, se trata de Jörg Kerner, exresponsable de motores de Porsche, que trabajaba en Audi cuando estalló el escándalo.
Los citados diarios aseguran que Kerner fue arrestado ayer a petición
de la Fiscalía de Stuttgart y se encuentra en prisión preventiva por
riesgo de fuga. El organismo judicial alemán cree que jugó un papel
"clave" en el caso del software instalado en vehículos diésel
que alteraba las emisiones de óxidos de nitrógeno cuando detectaba que
estaba siendo objeto de pruebas de laboratorio.
La Fiscalía ya ordenó hace dos días el registro de diez instalaciones de Porsche
en las regiones de Baden-Wurtemberg y Baviera, en el sur de Alemania, y
considera que estarían implicados un miembro del consejo de
administración y un alto directivo de la firma automovilística, además
de un exempleado de la empresa. En el registro de la empresa
participaron 33 fiscales de Stuttgart y Múnich y 160 agentes de la policía.
La Fiscalía de Stuttgart investiga una supuesta publicidad
fraudulenta sobre las emisiones de los automóviles diésel de Porsche.
Además, también han sido inspeccionadas las oficinas de Audi en
Ingolstadt y Neckarsulm. El año pasado, la sede de la firma de los
cuatro aros ya fue investigada por la Fiscalía de Múnich en busca de
información acerca del uso del software que alteraba las emisiones de los vehículos durante los exámenes en laboratorio.
Después de que estallara el escándalo de las manipulaciones ilegales
de gases tóxicos en septiembre de 2015 y que afectó a la reputación de
Volkswagen en el mundo —además de pasarle una factura multimillonaria por compensaciones en EE UU— la fiscalía alemana había realizado registros las oficinas de Volkswagen, Audi, BMW, Daimler y Porsche.
Fuente:
El País (España)