La principal diferencia es obviamente que la cola contiene azúcar y que la cola light contiene edulcorante artificial.
En algunos casos, ese edulcorante es aspartamo. Actualmente existe un consenso científico sobre la seguridad de este aditivo en las concentraciones que se encuentran en las llamadas bebidas de dieta.
Los 35 gramos de azúcar -unas siete cucharitas- que hay en una lata de Coca-Cola, equivalen a 139 calorías, lo que puede causar obesidad y el deterioro de los dientes.
También puede conducir a la diabetes Tipo 2 si se bebe demasiado.
A fin de cuentas, la cola light es probablemente lo menos malo, pero ninguna opción es realmente buena.
Fuente:
BBC Ciencia