Por instinto. Los gorilas evolucionaron del mismo modo que lo hizo el ser humano para disfrutar el sabor de ciertas comidas y encontrar repulsivas aquellas que son venenosas.
En estado salvaje, los gorilas de montaña comen hojas y tallos. Un adulto puede consumir unos 18 kilos de vegetación en un día. Los gorilas de llanura o planicie comen mayormente frutas, pero esta diferencia depende de qué crece en los diferentes ambientes.
En experimentos llevados a cabo en zoológicos, se les ofreció a gorilas criados en cautiverio 2.000 pares de alimentos para que escogieran entre uno y otro. Los gorilas mostraron una consistencia impresionante al hacer sus elecciones: las frutas azucaradas y, en general, los alimentos con más azúcar que fibra fueron los favoritos. La prueba se ha hecho incluso usando fotografías de los alimentos.
Fuente:
BBC Ciencia