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12 de enero de 2011

Ellas "pierden el control" ante caras muy masculinas

El actor George Clooney, prototipo de masculinidad.| Reuters/Thomas Mukoya

El actor George Clooney, prototipo de masculinidad.

No les pasa sólo a los hombres. El 'interior' tampoco es lo que más atrae a las mujeres, al menos durante la ovulación. Según un nuevo estudio, publicado en 'Evolution and Human Behavior', cuando están más fértiles, ellas prefieren a los hombres con el rostro más masculino y atractivo. A ver damitas (honestamente) ¿es cierto o no escierto?. Las dejo con el artículo:


Que, como algunas presumen, las mujeres no siempre se fijan en la inteligencia, es algo que ya se sabía a nivel experimental, en el laboratorio. Sin embargo, los autores del nuevo trabajo quisieron comprobarlo en la vida real, estudiando a 66 parejas heterosexuales.

Los participantes, entre los 18 y 44 años, se sometieron a distintas pruebas y entrevistas para medir su atractivo e inteligencia, en el caso ellos, y sus intereses sexuales y su fertilidad, en el de ellas.

Rasgos físicos e inteligencia

Los autores del trabajo, procedentes de la Universidad de Nuevo México y de Colorado (ambas en EEUU), relacionaron las respuestas con dos rasgos físicos de los hombres, la masculinidad y el atractivo del rostro, y su inteligencia.

Como resultado principal, los investigadores confirman que las etapas de fertilidad influyen marcadamente en la atracción sexual de las mujeres, incluso cuando ya están involucradas en una relación amorosa.

En la ovulación, la masculinidad, ante todo, y el atractivo del rostro del hombre funcionan como un imán para las mujeres. Barbilla pronunciada, mandíbula bien marcada, frente definida... Aquellas cuya pareja carezca de estos rasgos, se verán atraídas por otros hombres que sí los tengan.

Dentro de este cóctel casi 'hipnótico', la inteligencia no parece estar incluida. Como indican los expertos, a las mujeres analizadas no les importó si su actual pareja era más o menos inteligente a la hora de verse atraídas por ellos o por otros hombres.

Fuente:

El Mundo Salud

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