Una nueva investigación indica que estudiar con música de fondo puede afectar la capacidad del cerebro para recordar.
Se viene el examen en el colegio, el parcial o el final en la facultad y hay que estudiar. Está todo preparado: libros, apuntes, cuadernos y la música de fondo.
Son muchos los que tienen ese hábito, el de estudiar al mismo tiempo que escuchan música.
Sin embargo, un equipo de investigadores de la Universidad de Gales, en el Reino Unido, concluyó que esa práctica perjudica la capacidad del cerebro para realizar tareas de memoria.
Por eso, los expertos recomendaron que cuando se realiza una tarea mental que implique un desafío, como en el caso de los estudiantes que están preparándose para un examen, hay que hacerlo en silencio.
Para la investigación, se les pidió a los participantes que recordaran una lista de ocho consonantes en el mismo orden en que fueron presentadas.
Los voluntarios, separados en grupos, tuvieron que recordar esa lista en cinco ambientes auditivos distintos. Algunos fueron sometidos a un entorno tranquilo, otros a su música preferida, otros a una música que no era su preferida, otros a un estado cambiante (una secuencia de números al azar) y otros a un estado constante (una secuencia constante de números como 3, 3, 3, 3, 3).
La capacidad de los participantes de recordar la lista de consonantes fue la más baja si escuchaban música, independientemente de si les gustaba o no, y en condiciones de cambio de estado.
En tanto, la memoria fue más precisa cuando los participantes realizaron la tarea en ambientes de estado constante, según el estudio publicado en la revista Applied Cognitive Psychology.
"El peor desempeño de la música y de los sonidos de estado cambiante se debe a la variación acústica de esos ambientes. Esto perjudica la capacidad para recordar el orden de los artículos en la lista presentada", explicó en un comunicado de prensa Nick Perham, quien dirigió la investigación y es catedrático de la facultad de psicología del Instituto de la Universidad de Gales en Cardiff.
Desafios mentales
"La aritmética mental también exige la capacidad para retener la información sobre el orden a corto plazo por ensayo y podría verse afectada de manera similar por su desempeño en la presencia de entornos de sonido de fondo cambiantes", agregó Perham.
Por eso, según las conclusiones de los investigadores de la Universidad de Gales, al realizar una tarea mental que requiera de un desafío es mejor hacerlo en silencio. De lo contrario, los entornos musicales perjudican la capacidad de recordar.
Fuente:
La Razón (Argentina)
Sin embargo, un equipo de investigadores de la Universidad de Gales, en el Reino Unido, concluyó que esa práctica perjudica la capacidad del cerebro para realizar tareas de memoria.
Por eso, los expertos recomendaron que cuando se realiza una tarea mental que implique un desafío, como en el caso de los estudiantes que están preparándose para un examen, hay que hacerlo en silencio.
Para la investigación, se les pidió a los participantes que recordaran una lista de ocho consonantes en el mismo orden en que fueron presentadas.
Los voluntarios, separados en grupos, tuvieron que recordar esa lista en cinco ambientes auditivos distintos. Algunos fueron sometidos a un entorno tranquilo, otros a su música preferida, otros a una música que no era su preferida, otros a un estado cambiante (una secuencia de números al azar) y otros a un estado constante (una secuencia constante de números como 3, 3, 3, 3, 3).
La capacidad de los participantes de recordar la lista de consonantes fue la más baja si escuchaban música, independientemente de si les gustaba o no, y en condiciones de cambio de estado.
En tanto, la memoria fue más precisa cuando los participantes realizaron la tarea en ambientes de estado constante, según el estudio publicado en la revista Applied Cognitive Psychology.
"El peor desempeño de la música y de los sonidos de estado cambiante se debe a la variación acústica de esos ambientes. Esto perjudica la capacidad para recordar el orden de los artículos en la lista presentada", explicó en un comunicado de prensa Nick Perham, quien dirigió la investigación y es catedrático de la facultad de psicología del Instituto de la Universidad de Gales en Cardiff.
Desafios mentales
"La aritmética mental también exige la capacidad para retener la información sobre el orden a corto plazo por ensayo y podría verse afectada de manera similar por su desempeño en la presencia de entornos de sonido de fondo cambiantes", agregó Perham.
Por eso, según las conclusiones de los investigadores de la Universidad de Gales, al realizar una tarea mental que requiera de un desafío es mejor hacerlo en silencio. De lo contrario, los entornos musicales perjudican la capacidad de recordar.
Fuente:
La Razón (Argentina)