Un nuevo fármaco contra el VIH podría revolucionar el tratamiento a enfermos avanzados de Sida
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Un nuevo fármaco contra el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), inhibidor de la integrasa, podría revolucionar el tratamiento a enfermos en estado avanzado, que han fracasado con la terapia convencional y que constituyen el 15% de los infectados en general, según explicó hoy el director de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínic de Barcelona, Josep Maria Gatell, coautor de un estudio de validación del medicamento.
El estudio, publicado en el último número de la revista "The Lancet", confirma el "elevado índice del éxito" del medicamento como "tratamiento de rescate en aquellos pacientes en los que fracasa alguno o todos los medicamentos antirretrovirales actuales", señaló Gatell.
En la investigación sobre las posibilidades del medicamento, de la farmacéutica Merck y bautizado como "raltegravir, MK-0518", han participado el Hospital Clínic de Barcelona, el Hospital Can Ruti en Badalona y el Hospital Carlos III de Madrid.
El experto catalán subrayó que existe una media del 15% y 20% de pacientes en estado avanzado de la enfermedad del VIH que tiene una "muy baja respuesta" a los tratamientos, situándose en el 30% y el 40%.
TASAS DE RESPUESTA DEL 80%
La novedad es que "con el nuevo fármaco, en combinación con la terapia estándar, las tasas de respuesta pueden llegar al 70% y 80%", indicó Gatell, a la vez que equiparó la respuesta a la que obtendrían enfermos que no habían recibido tratamiento.
Según Gatell, se trata de un "fármaco muy potente, de los más potentes de los antirretrovirales, y que actúa muy rápido". Además, evitaría efectos secundarios de los antirretrovirales en general actualmente preocupantes como la alteración de lípidos, que a medio plazo provocan complicaciones asociadas como el aumento de colesterol y de riesgo de infarto agudo de miocardio.
REDUCE EFECTOS SECUNDARIOS
"Si esto acaba por constatarse, el nuevo medicamento tendrá un papel también para enfermos que responden bien al tratamiento pero que, de esta forma, podrían evitar efectos secundarios". "A éstos se les podría cambiar el tratamiento", dijo.
El "raltegravit" es el primer inhibidor de la integrasa desarrollado hasta ahora e inaugura una línea terapéutica totalmente innovadora en el tratamiento actual contra el Sida. Se dirige hacia una diana no atacada nunca por ningún fármaco, que es la integrasa, una de las tres enzimas del VIH. Sobre las otras dos, la proteasa y la transcriptasa inversa, ya actúan otros fármacos.
UNA DIANA TERAPÉUTICA TOTALMENTE NUEVA. La integrasa es la tercera enzima esencial que permite que el VIH se replique en el organismo. Se trata de una enzima que el virus utiliza para insertar su material genético en el ADN de la célula humana. Una vez incorporado, el ADN vírico se apodera de la célula para crear más copias del virus del VIH.
Así, el "raltegravir" impide a la integrasa desarrollar esta función esencial, por lo que se bloquea la capacidad del virus de replicarse e infectar nuevas células. En la investigación participaron 178 pacientes con infección por VIH en estadio avanzado, que habían estado sometidos a otros tratamientos antivirales durante una media de 10 años.
50 PACIENTES DEL CLÍNIC UTILIZAN EL FÁRMACO. Actualmente, el fármaco se encuentra todavía en fase administrativa, pero se ha aprobado su uso compasivo en enfermos que lo requieran, dada su "opinión positiva", explicó Gatell. Actualmente, una cincuentena de pacientes del Hospital Clínic reciben el "raltegravir", que podría estar comercializado en "medio año o un año", comentó el experto.
En el Hospital Clínic de Barcelona hay 3.298 enfermos de VIH en tratamiento. Un 22% del total han fracasado con la terapia convencional por lo que son susceptibles de utilizar el nuevo fármaco para hallar un tratamiento de rescate y "reducir la carga viral sin complicaciones", sostuvo.
Fuentes:
Ceres TV
Diario ADN
Blog: "Doctor Perú"
"The Lancet"