El jefe de esa división, el coronel Víctor Fernández, explicó este jueves que, al parecer, los caballitos, procedentes del norte de Perú, iban a ser enviados a países asiáticos como Corea del Sur, Japón y China, donde se utilizan como ingrediente para bebidas afrodisíacas.
Fernández, citado por la emisora de radio RPP, indicó que por cada kilo de caballito de mar en polvo se pagan unos unos 4.800 euros en el mercado internacional, así que la mercancía incautada valdría casi 112.000 euros.
El caballito de mar es una especie en peligro de extinción y Perú prohíbe su pesca desde 2004. Pese a ello, las autoridades peruanas se incautaron de 20 toneladas el año pasado.
Fuente:
El Mundo Ciencia