Los métodos para copiarse durante un examen (o plagear o plagiar, como decimos en Perú) son infinitos:
Ocultar en el baño una hoja con la información, y algún momento simular sentirse mal y pedir pasar al excusado. Escribir información clave en las paredes o en el banco. Traer muchas hojas en blanco para hacer el examen incluyendo una que ya tenga cosas escritas. Escribir con un bolígrafo sin tinta, de forma que lo escrito pueda verse si la hoja se coloca en el ángulo adecuado. Pegar papelitos en diferentes lugares: detrás de la calculadora, en las mangas, etc. Escribir en la palma de la mano. O, directamente, espiar la hoja del que está sentado a nuestro lado. Etc., etc.
Como experiencia personal, recuerdo yo mismo, y otros compañeros, haber dedicado muchas veces más tiempo a preparar estos artilugios para copiarse que lo que hubiera llevado aprenderse la lección. Pero claro, la idea justamente no era estudiar, ¿no? Incluso una vez recuerdo haber entrado a dar un examen en nombre de otra persona.
Pero todo eso está llegando a su fin. En varios lugares del mundo se están tomando medidas cada vez más drásticas para evitar la copia, el cheating, como se dice en inglés. Miren si no lo que nos llega desde el Oriente (imágenes tomadas de neatorama):
Esto, en lo que respecta a dispositivos lo-tech. Que por ser baratos no dejan de ser efectivos. Y se ven bastante humillantes.
Ahora bien, si queremos ver metodologías más avanzadas, no tenemos más que echar un vistazo al sistema de vigilancia anti-copia de Gaokao, el Instituto Nacional de Educación Superior de China. El examen de ingreso es considerado uno de los más difíciles y que mayor presión psicológica ejerce sobre los alumnos. Y no solo es uno de los más difíciles, sino que es, por lejos, el más concurrido. Sólo en la última temporada, se incribieron 9,2 millones de postulantes al ingreso. El sistema de seguridad para evitar copias parece sacado de una distopía e incluye micrófonos de alta sensibilidad para evitar cuchicheos, detectores de actividad de wireless y cientos de cámaras de seguridad. Vean si no:
Imágenes de una sociedad que perdió el rumbo: la competencia continua, la evaluación para ver si pasamos o no del valor umbral estipulado a partir del cual el sistema determina si somos o no aptos, el perverso panóptico digital en todo su esplendor.
¿Tú, lector, qué piensas de esto? ¿Te imaginas un mundo sin exámenes ni evaluaciones?
Para relajar un poco la cosa, les dejo de regalo al maravilloso Mr. Bean intentando, justamente, pasar un examen.
Fuente:
NeoTeo