PERU: Alto índice de desnutrición crónica continúa por falta de voluntad política
Miércoles, 18 de octubre de 2006
Informe del Día Mundial de la alimentación. Gobierno se compromete a articular la lucha contra este mal. El Pronaa plantea reducir este problema en 5% y la anemia en 10%.
Por Vanessa Romo Espinoza
Una fecha más del Día Mundial de la Alimentación se celebró el lunes pasado. Un día más en el que 18 mil niños murieron de hambre en el planeta. En el que recordamos que diez millones de niños en la región --entre los cuales dos millones y medio son peruanos -- sufren desnutrición crónica y frustran sus vidas debido al desinterés de sus mismos coterráneos. En el que muchos pequeños no tuvieron ni siquiera un bocado para comer.
El drama de la desnutrición crónica no solo es tomado por la mayoría de peruanos de manera estoica, sino que muchos de ellos creen, en forma simplista, que la solución radica en solo un poco más de alimento. "Hay muchos más factores, como la educación, salud y vivienda, que pueden ser más determinantes que la falta de comida", asegura el director regional del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Pedro Medrano. "Pero la causa más grande de este problema es la indiferencia de la sociedad, que no entiende que este es un problema de todos. La falta de voluntad política es grande, y los gobiernos no han pensado hasta la fecha que la inversión en nutrición es la mejor inversión en capital humano y la mejor inversión en desarrollo", agrega.
El funcionario da más cifras: América Latina pierde entre el 1% y 11% del PBI por malnutrición y hambre. ¿Cómo podemos dejar de ser un país subdesarrollado si la cuarta parte de nuestra población tiene la vida mermada desde los 3 años, e incluso, desde antes de nacer? "La desnutrición crónica significa menores posibilidades de ingreso, de salud y educación, lo que para nosotros se traduce en un gran obstáculo para el progreso del país", agrega Medrano.
LA CLAVE: ARTICULACIÓN
Son 800 millones de soles anuales los que el Estado ha invertido en la última década para la lucha contra la desnutrición crónica. ¿El resultado de tanta inversión? Los informes más positivos muestran una reducción del 1,8%. Ricardo Maraví, director ejecutivo del Programa Nacional de Asistencia Alimentaria (Pronaa), adjudica el lento avance de esta lucha a la desarticulación de los programas sociales existentes. "Se ha realizado un trabajo de forma vertical y sin tomar en cuenta el compromiso de toda la sociedad civil", asegura.
Ante esto, el actual gobierno anunciará oficialmente a fines de este mes el Plan Integral de Nutrición (PIN), parte del Plan Nacional de Superación de la Malnutrición con el que pretenden atender a los niños menores de 12 años. "La prioridad serán los que tengan de 0 a 3 años, las madres gestantes y lactantes", agrega Maraví.
FOCALIZANDO ESFUERZOS
Sin duda, la madre es la protagonista para el PMA en este sistema de erradicación de la desnutrición. Guy Gauvreau, representante de este programa en el Perú, asegura que es necesario cortar el círculo vicioso de madre desnutrida - hijos desnutridos, lazo que condena al 4% de recién nacidos a la marginación desde antes de crecer. "Además, hay que enseñarle a la madre a aprovechar los alimentos de acuerdo con la zona que habitan y que existen pastillas de bajo costo como el hierro y las desparasitarias", afirma.
Teniendo en cuenta que un 80% de niños con desnutrición crónica tiene madres analfabetas, la educación también es un tema a tratar en este plan integral. "El acceso al agua, a que cada niño tenga una identidad y a un servicio de salud básico es la solución", asegura.
Esta articulación generará convenios tanto intersectoriales (Pronaa y Foncodes), interministeriales (con el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación) y con la sociedad civil (gobiernos locales y regionales, organizaciones sociales nacionales e internacionales). "Ya hemos logrado iniciar el programa en seis provincias. Incluso la municipalidad de Acobamba, en Huancavelica, ha destinado 20% de su presupuesto participativo a la campaña contra la desnutrición", señala el titular del Pronaa.
Las cifras siguen rondando sus cabezas, tanto las negativas con las que deben terminar, como las que deberán invertir para lograr otras nuevas y positivas. Pero un factor es cierto: cada cifra tiene un nombre y una vida, y debemos actuar rápido para evitar que se extinga.
"La sociedad del poder es cruel"
El padre Gastón Garatea, comprometido con la lucha contra la desnutrición desde hace varios años atrás, es testigo de las promesas de varios gobiernos por superar el problema. El también preside de la Mesa de Concertación para la Lucha contra la Pobreza y confía en que esta vez el compromiso sea real, pero es consciente de que sin una agilidad en las políticas de Estado el problema seguirá siendo el mismo.
"No hay carencias de técnicos y de gente buena, y tampoco de recursos, porque se ha demostrado que no se necesitan más de 100 dólares anuales para atender integralmente a un niño", afirma el padre. El reverendo concuerda que esta desnutrición tiene su explicación en la falta de educación, "ya que no hay otra manera de entender cómo provincias tan ricas en recursos como Cajamarca cuenten con un 40% de desnutrición", indica. "Prefieren vender la leche o el queso antes que darlo a sus pequeños", añade.
A todos los actores que se han comprometido a reducir este índice, el padre Garatea suma la labor inestimable de la población, la cual --según él-- es el reflejo del verdadero sentimiento del Gobierno. "La sociedad de poder es realmente cruel, y en general nadie tiene respeto a sus hermanos", señala.
"No se puede cambiar un problema nacional sin haber hecho recapacitar a los peruanos de que este es un grave problema. El primer punto en la lista de valores --respetar la vida humana-- no es cumplido. ¿Qué esperamos entonces?", se interroga. Pero aún conserva el optimismo de un cambio. "Si empezamos desde ahora, en 10 o 15 años podremos estar viviendo otra realidad", finaliza.
Recomendaciones
Consejos para las madres
A Al niño desnutrido se le debe hacer un análisis de hemoglobina y su recuperación será paulatina. La pediatra Mirella Bobbio advierte que la recuperación puede tardar de tres meses a un año.
B Lo que más le falta a un niño desnutrido son las proteínas. Este elemento está en el pescado y el pollo, así como la alpaca.
C Los carbohidratos abundan en el país gracias a la variedad de papas que tenemos. Además se encuentran proteínas en la quinua y la kiwicha.
D El colesterol no saturado que todo niño debe consumir está en el huevo, promotor del desarrollo de las fibras nerviosas. Lo mejor: está al alcance de todos.
E La leche es insustituible. El hierro y el zinc desarrollan la hormona del crecimiento en los niños más bajitos.
TOMADO DEL DIARIO "EL COMERCIO" DEL PERÚ