Las niñas de cinco años se preocupan por su peso, según estudio
SYDNEY. En un mundo donde reina la dictadura de la delgadez, las niñas de tan sólo cinco años comienzan a preocuparse por sus cuerpos, una inquietud que fractura la autoestima, según un estudio presentado hoy en el décimo Congreso Internacional sobre la Obesidad que se celebra en Sydney.
"Los niños son sensibles a una edad cada vez más precoz a su apariencia física. El impacto del sobrepeso en la autoestima se ha detectado en niñas a partir de cinco años", declaró el profesor Andrew Hill, de la Universidad de Leeds.
"Los elementos psicológicos como la percepción de su atractivo, la autoestima o la capacidad física pueden mejorarse con una ligera pérdida de peso", declaró ante más de 2.000 en este acontecimiento, organizado cada cuatro años.
En previsión de futuros problemas, los especialistas han puesto en marcha estrategias que permiten a los niños adelgazar en campamentos de verano, en un medio favorable al desarrollo personal.
"El éxito de la pérdida de peso en los campamentos de verano está probablemente relacionado con un ambiente muy sociable y agradable donde las actividades físicas se desarrollan entre nuevos amigos que tienen el mismo problema", comenta Hill.
Otro métodos involucran a los padres en la mejora de la autoestima y de sus habilidades para reducir el riesgo de depresión.
A la edad adulta el fenómeno persiste y los estudios realizados muestran que las mujeres con un problema de gordura están más expuestas a la depresión que las demás.
Un importante estudio realizado en Australia sobre la salud de las mujeres reveló que la inactividad física y el sobrepeso predisponen a la depresión.
"En otras palabras, el estudio demostró que las mujeres que tienen sobrepeso o son obesas, tanto si practican una actividad física como si no, presentaban un riesgo mayor de depresión a tres años vista", declaró Kylie Ball, investigadora de la Universidad de Deakin.
Este estudio, efectuado sobre 7.800 mujeres, mostró además que la obesidad puede tener repercusiones a largo plazo en el bienestar y la felicidad de las mujeres jóvenes.
Las personas gordas son menos ambiciosas en los estudios y su nivel de insatisfacción en el ámbito laboral o en sus relaciones sociales suele ser superior al de las demás, según la misma investigación.
De todos modos, Ball insiste en la necesidad de tratar las consecuencias del sobrepeso y ayudar a las personas a aceptarse a sí mismas y reconciliarse con sus cuerpos al mismo tiempo que se las orienta hacia su peso ideal. Un objetivo que no tiene que coincidir con los clichés difundidos por las revistas.
El problema de la obesidad adquiere proporciones inimaginables hace tan sólo varias décadas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad es el factor más importante de las enfermedades crónicas en un planeta que hoy en día cuenta con más obesos que personas desnutridas.
Fuente: AFP
TOMADO DEL DIARIO "PERU21"