Latest Posts:

Mostrando las entradas con la etiqueta sistema hormonal. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta sistema hormonal. Mostrar todas las entradas

16 de septiembre de 2013

Conozca las otras recompensas de la "hormona del amor"

Cristales de oxitocina

La oxitocina es conocida como la "hormona del amor" por su papel en las relaciones de persona a persona. En la foto, cristales de oxitocina.

Científicos de la Universidad de Stanford demostraron que la oxitocina, conocida como la "hormona del amor", tiene más repercusiones en nuestras interacciones sociales de lo que se creía.

Investigadores han concluido que la hormona del amor juega un papel relevante en la formación y mantenimiento de los lazos que se crean entre una madre y un hijo, así como en los apegos sexuales. Lo que hasta ahora no estaba claro era qué rol tenía en otros aspectos de la socialización, como pasar una tarde con los amigos.
En el estudio publicado en la revista Nature, el equipo de especialistas sugiere que el papel de la oxitocina en las relaciones de persona a persona pudo haber evolucionado hacia áreas relacionadas con la afinidad grupal.

Los resultados de la investigación abren las puertas a posibles nuevos tratamientos para el autismo y otros trastornos neuropsiquiátricos como la esquizofrenia.

Desentrañando un misterio

En investigaciones con roedores arvicolinos, conocidos por ser monógamos, se había especulado que la oxitocina podía estar involucrada en este tipo de fenómeno. Pero esta hipótesis era confusa en otros mamíferos, sobre todo en el que más se usa para la investigación científica: el ratón.

"En realidad no se sabía lo que intercedía para tener una recompensa social y ni siquiera era seguro que la oxitocina jugara un papel, debido a que los ratones no se casan. Los ratones no buscan una pareja y se quedan con ella de por vida, son promiscuos", le explica a BBC Mundo el doctor Robert Malenka, jefe del estudio.

Lea el artículo completo en:

BBC Ciencia

¿Está una persona a la defensiva si cruza los brazos?

Probablemente, pero no necesariamente. El lenguaje corporal varía con la edad, el sexo y la cultura, pero algunas características son más o menos universales.
Incluso las personas ciegas que nunca han visto a nadie haciéndolo, levantan los brazos en el aire cuando celebran una victoria y cruzan sus brazos cuando están a la defensiva.

Los brazos cruzados pueden haberse originado como una forma de proteger físicamente el cuerpo.

Los hombres, cuando tienen miedo, incluso pueden verse sosteniendo con ambas manos sus genitales como si temieran perderlos, aún cuando la amenaza sea sólo verbal.

Por otro lado, el "autoabrazo" -la acción de agarrarse los antebrazos- es más común entre las mujeres.

Todos usamos y respondemos a estas señales, consciente o inconscientemente, y la investigación muestra que los niveles de hormonas, incluyendo la testosterona y el cortisol, cambian con la posición del cuerpo.

Pero tampoco hay que obsesionarse con el mensaje de los brazos cruzados. Algunas personas se cruzan de brazos cuando están aburridos o tienen frío.

Fuente:

BBC Ciencia

11 de agosto de 2013

Helen Fisher: ¿Por qué amamos... y engañamos? (VIDEO)

La científica Helen Fisher señala que la neurobiología del amor gira en torno a distintos núcleos de la amigdala produciendo uno de ellos la hormona dopamina, relacionada con el sistema de recompensa del cerebro. A través de esta hormona, y por medio del aprendizaje, se va a asociar a cierta persona que pasaremos a identificar como nuestro ser amado, cuyo recuerdo o cercanía producirán a su vez niveles más altos de dopamina, originando todos los efectos que caracterizan a algo tan trascendental para la vida de un ser humano como supone el amor romántico....

En este video comprenderemos mejor este aspecto y sus múltiples aristas:

     

Más información en:

El porqué de la Naturaleza

28 de febrero de 2013

La insulina: Es necesaria para aprender y memorizar

Además de regular los niveles de azúcar en sangre, la insulina juega un papel crítico a la hora de modular la actividad de las neuronas implicadas en el aprendizaje y la memoria, según revela un nuevo trabajo publicado en la revista Neuron. “La gente suelen pensar que los trastornos en la regulación de insulina únicamente pueden causar diabetes, pero muchos defectos cognitivos y del comportamiento, como la depresión o la demencia, también están asociados con síndromes metabólicos”, aclara Yun Zhang, bióloga de la Universidad de Harvard y responsable del estudio.

Para estudiar este vínculo, Zhang y sus colegas dirigieron su atención al gusano transparente Caenorhabditis elegans. Usando técnicas de ingenieria genéticas eliminaron su capacidad de crear compuestos similares a la insulina. Los gusanos “mutantes” así obtenidos fueron luego sometidos a pruebas para ver si eran capaz de aprender a evitar comerse una bacteria que los infecta. Y los científicos descubrieron que quellos que, a diferencia de los gusanos no modificados, estos no solo no podían sintetizar insulina sino que además habían perdido la capacidad de aprender. 

Curiosamente, no se debía solo a la ausencia de esta hormona sino a una compleja de red de moléculas y péptidos similares a la insulina que “actúan juntos y coordinan sus señales para regular el aprendizaje y la memoria, de modo que si se cambia la manera en que interactán también se modifica la forma en que aprendemos”, puntualiza Zhang. Entender estas rutas moleculares y estos circuitos neuronales podrían ayudar en el futuro a tratar trastornos cognitivos, incluida la demencia. lo

Fuente:

Muy Interesante

26 de febrero de 2013

La OMS pide más investigación sobre ciertos tóxicos presentes en alimentos y productos

Unas niñas en una mesa con varios tuppers

Estas sustancias se encuentran en muchos productos, como algunos plásticos. | Eugenio Torres
  • Estas sustancias se encuentran presentes en muchos productos y alimentos
  • El efecto por su consumo o exposición combinada no ha sido bien analizado
Un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alerta del aumento de la exposición humana a los disruptores endocrinos, por ello han pedido con "urgencia" una investigación más completa sobre cómo estas sustancias químicas, que pueden alterar el sistema hormonal (de humanos y animales), afectan a la salud y al medioambiente.

"Necesitamos urgentemente más investigación para obtener una imagen más completa de los efectos sobre la salud y el medio ambiente de los disruptores endocrinos", ha afirmado la directora de la OMS para la Salud Pública y Medio Ambiente, la doctora María Neira.

El estudio sobre su efecto en conjunto requiere más investigación para entender completamente la asociación entre disruptores endocrinos (EDC) que se encuentran en muchos hogares y subproductos industriales y determinadas enfermedades y trastornos. Entre otros, se pueden encontrar en pesticidas, electrónica, productos de cuidado personal y cosméticos; también como aditivos o contaminantes en los alimentos.

Este estudio de la ONU, que es el informe más completo sobre los EDC hasta la fecha, destaca algunas asociaciones entre la exposición y problemas de salud, incluyendo la posibilidad de que esos productos químicos dificulten el desarrollo de testículos en los varones jóvenes; aumenten el riesgo de cáncer de mama, cáncer de próstata o cáncer de tiroides; y intervengan en el desarrollo del sistema nervioso en los niños con déficit de atención.

"Los productos químicos cada vez más forman parte de la vida moderna y apoya a muchas economías nacionales, pero la gestión no racional de los productos químicos se opone a la consecución de los objetivos clave de desarrollo, y el desarrollo sostenible para todos", ha afirmado el subsecretario general y director ejecutivo del PNUMA, Achim Steiner.

Por ello, apuesta por realizar nuevas pruebas para conocer mejor el coste sobre la salud de la exposición a estos productos químicos y ayudar en la reducción de riesgos, maximizando los beneficios, y "seleccionando las opciones más inteligentes y alternativas que reflejan la transición hacia una economía verde", añadió Steiner.

Fuente:

El Mundo Ciencia

11 de febrero de 2013

¿En qué momento del día crecen más los niños?

Niños juegan al baloncesto

Los niveles de las hormonas del crecimiento son más altos en niños y adolescentes mientras duermen.

El crecimiento se controla mediante las hormonas somatotropina y factor de crecimiento tipo 1, similar a la insulina. Los niveles de estas hormonas son más altos en los niños y adolescentes mientras están durmiendo.

Pero esto no permite concluir directamente que los niños crecen más rápido durante la noche. De hecho, no se ha probado aún que exista correlación entre la cantidad de horas que duermen los niños y su altura.

Por otro lado, incluso un recién nacido sólo crece 25 cm en su primer año. Por día, apenas llega a los 0,68mm y es casi imposible medirlo con precisión suficiente para representar gráficamente las tasas de crecimiento en diferentes horas del día.

Fuente:

BBC Ciencia

9 de diciembre de 2012

¿Fumar mientras bebes alcohol aumenta la resaca?

tabaco-alcoholSi tienes la costumbre de fumar ávidamente mientras bebes alcohol deberías saber que corres mayor riesgo de sufrir resaca a la mañana siguiente, según un estudio que publica la revista Journal of Studies on Alcohol and Drugs en su última edición.

El estudio, realizado con 113 estudiantes universitarios a los que se realizó un seguimiento exhaustivo durante ocho semanas, demuestra que los síntomas propios de la resaca- dolor de cabeza, nauseas, cansancio…- son más frecuentes si al consumo de alcohol le acompañan unos cuantos cigarrillos. De hecho, tras consumir la misma dosis de alcohol no solo es más probable sentirse mal cuando fumamos, sino que además la resaca se vuelve mucho más intensa.

Aunque aún no están claro por qué sucede, no es la primera vez que se establece un vínculo entre el alcohol y el tabaco. Algunos estudios previos sugieren que los receptores cerebrales de la nicotina están involucrados en nuestra respuesta subjetiva a las bebidas alcohólicas, y que si bebemos y fumamos simultáneamente se libera más cantidad de dopamina, la hormona del placer.


Fuente:

Muy Interesante

30 de octubre de 2012

El ejercicio físico moderado mejora la calidad del esperma

ejercicio-fisicoLos hombres que practican ejercicio físico moderado poseen mejores niveles hormonales y sus gónadas producen esperma de mayor calidad, según un estudio publicado en la revista European Journal of Applied Physiology.

Los autores valoraron si existen diferencias en los perfiles hormonales y seminológicos entre hombres físicamente activos y los sedentarios. “Hemos analizado parámetros cualitativos seminales como el volumen de eyaculado, el contaje espermático, la movilidad y la morfología de los espermatozoides”, explica a la Agencia SINC Diana Vaamonde, investigadora de la Universidad de Córdoba y autora principal del estudio. Además, se evaluaron las hormonas foliculoestimulante (FSH), luteinizante (LH), testosterona (T), cortisol (C), y la tasa T/C, que dan información complementaria sobre el ambiente para el proceso de formación del esperma y sobre el estado anabólico o catabólico en el que se encuentra el organismo.

Los resultados revelan que los sujetos físicamente activos son los que muestran los mejores valores seminológicos. Concretamente, las diferencias halladas sus espermatozoides mostraron mejor morfología, mejor velocidad progresiva total. Además los valore hormonales de FSH, LH y T, así como la tasa T/C, apoyan así la hipótesis de que se crea un ambiente más favorable para la formación del esperma cuando se hace ejercicio.

Eso sí, sin abusar. La misma investigadora publicó en 2010 un estudio que sugería que el esperma de los deportistas de élite, concretamente triatletas y jugadores de waterpolo, era de peor calidad que la media. Es posible que las cargas demasiado elevadas de entrenamiento disminuyan la calidad seminal.
Fuente:

16 de octubre de 2012

¿Bailar tiene ventajas evolutivas?

bailandoEntre nuestros ancestros, aquellos homínidos “danzarines” que eran capaces de coordinar con elegancia sus movimientos corporales durante los bailes rituales obtuvieron algún tipo de ventaja evolutiva frente a quienes contaban con “dos pies izquierdos”, según concluían Marcel Zentner y sus colegas de la Universidad de York, que hace poco publicaron un estudio sobre la predisposición innata al baile en humanos en la revista PNAS.

Estudios genéticos posteriores parecen apoyar su hipótesis. Concretamente, una investigación dada a conocer en PLoS Genetics en la que se comparaba el ADN de bailarines experimentados con el de personas que nunca habían practicado la danza reveló que solo los primeros mostraban diferencias importantes en dos genes asociados con las habilidades sociales y la capacidad de comunicación. Además, en la sangre de los profesionales de la danza se detectaron niveles de serotonina y de hormona arginina-vasopresina más altos. Todo apunta a que no es casualidad que estas dos sustancias estén vinculadas tanto al baile como al bienestar, el buen humor, la destreza para la comunicación y la afectividad.

Y además…
 Fuente:

11 de octubre de 2012

Nobel de Química por trabajo clave para el futuro de los medicamentos

Brian Kobilka y Robert Lefkovitz, galardonados con el Premio Nobel de Química 2012


El trabajo de Koblinka (izq.) y Lefkovitz podría llevar a medicamentos más efectivos.

Los estadounidenses Robert Lefkowitz y Brian Kobilka fueron galardonados con el Premio Nobel de Química 2012.

La Real Academia Sueca de Ciencias explicó que los dos investigadores se destacaron por su trabajo sobre cómo una familia de receptores permiten a las miles de milones de células de nuestro cuerpo percibir su entorno. 
 
Se trata de un mecanismo tan crucial, que cerca de la mitad de los medicamentos producidos por la industria farmacéutica funcionan interactuando precisamente con esos receptores, llamados receptores acoplados a proteínas G (G protein linked receptors, GPLR). La Academia señaló que el trabajo de Lefkowitz y Kobilka podría llevar a medicamentos más efectivos y con menos efectos secundarios. 
Receptores acoplados a proteínas G Imagen SPL

Los receptores acoplados a proteínas G traducen los cambios fuera de la célula en información que genera respuestas.

Los receptores acoplados a proteínas G se encuentran en la membrana exterior de las células. Cuando hay cambios, por ejemplo, en los niveles de adrenalina o neurotransmisores como la serotonina, los receptores son los que perciben estas moléculas fuera de la célula activando la comunicación con el interior de la misma y finalmente su respuesta.

Los cruciales GPLR son los que permiten que medicamentos para la presión alta, el mal de Parkinson, la migraña o problemas psiquiátricos entre otros tengan efecto.

Sven Lidin, de la Academia Sueca, inició el anuncio con un grito frente a los periodistas reunidos en la sala. "La descarga de adrenalina que se obtiene cuando uno se asusta", explicó, "es sólo una manifestación de esta vasta red de receptores que comunica una señal química a través de miles de millones de células, traspasando membranas celulares de otro modo impenetrables".

Explicando la concesión del galardón, una de las científicas de Academia pidió una taza de café, diciendo a continuación a la prensa internacional: "sin esos receptores cruciales no podría ver, oler ni saborear este café".

Existen más de 1.000 GPLR, que fueron comparados por científicos de la Academia a recepcionistas que hablan en diferentes idiomas, respondiendo a diferentes hormonas o neurotransmisores y causando respuestas en las células.

"Emocionado"

Lefkovitz y Kobilka trabajaron juntos en el Instituto Médico Howard Hughes en Maryland. Kobilka se encuentra actualmente en la Universidad de Stanford.

Momentos después del anuncio, Lefkovitz recibió una llamada que fue transmitida en vivo. El científico señaló que los GPLR se encuentran "posicionados en forma crucial para regular cada uno de los procesos fisiológicos de los seres humanos".

Dibujo para ilustrar el funcionamiento de los receptores acoplados a proteínas G

Los receptores GPLR fueron equiparados a recepcionistas de las células que hablan diferentes idiomas.

"Me siento muy emocionado", dijo el investigador.

"Estaba profundamente dormido y como duermo con tapones en los oídos no escuché el llamado, pero mi esposa me dio un codazo. Recibir el premio fue un shock y una gran sorpresa. Sólo he alcanzado a hablar por Skype con Brian", dijo Lefkovitz, refiriéndose al otro galardonado.

El premio está dotado con ocho millones de coronas suecas, cerca de US$1,2 millones.

El anuncio del Premio Nobel de Química sigue al de los galardones en Medicina, en lunes, y Física, el martes. El premio de Medicina fue concedido al británico John B. Gurdon y al japonés Shinya Yamanaka por sus investigaciones en el campo de las células madre, que han "revolucionado" la comprensión científica de cómo "se desarrollan las células y los organismos".

El Nobel de física fue otorgado a los expertos en física cuántica Serge Haroche, de Francia, y David J. Wineland, de Estados Unidos, por sus trabajos sobre la interacción entre la luz y la materia que podría llevar a la creación de computadoras superrápidas.

Este jueves se anunciará el premio en Literatura y el viernes el Nobel de la Paz. El último en ser anunciado, el próximo lunes, es el premio de Economía.

Fuente:

BBC Ciencia

Contenido relacionado

10 de octubre de 2012

El Nobel de Química premia los avances en dianas terapéuticas

Robert J. Lefkowitz, a la izquierda, y Brian Kobilka, premios Nobel de Química 2012. | Efe
Robert J. Lefkowitz, a la izquierda, y Brian Kobilka, premios Nobel de Química 2012. | Efe
  • Los científicos identificaron la existencia y mecanismo de unos receptores
  • Son estructuras de la membrana celular que detectan las señales externas
  • Su función es informar a la célula de todo lo que ocurre fuera de ella
  • Un gran número de medicamentos se dirige contra estos receptores celulares
El Nobel de Química ha premiado este año a los investigadores Robert Lefkowitz y Brian Kobilka por sus trabajos sobre el funcionamiento de los receptores acoplados de proteínas G, un campo de estudio que ha abierto la puerta a nuevas e importantes dianas farmacológicas.

Durante décadas, fue todo un misterio saber cómo las células podían reconocer cambios en su entorno y reaccionar ante estas variaciones. La célula tiene que notar lo que pasa en el exterior, fuera de su membrana, para adaptar su metabolismo a esos cambios y además tiene que hacerlo sincronizadamente con el resto de células. Se sabía que las hormonas viajan por el cuerpo y van avisando a las células de las distintas situaciones, por ejemplo de que toca dormir, comer o de que hay un olor extraño. El enigma era cómo se producía esa transmisión de información.

La hipótesis de la que partieron muchos científicos era la existencia de algún tipo de receptores en la superficie celular, pero hasta que Lefkowitz comenzó a usar la radioactividad en 1968 nadie los había podido identificar.

Gracias a la radiación, su equipo consiguió localizar varios de estos 'sensores'. Es más, incluso lograron extraer a uno de ellos -que respondía ante la adrenalina y denominado receptor beta adrenérgico- , lo que les permitió empezar a conocer su funcionamiento.

Fue Lefkowitz quien se dio cuenta de la estructura de este sistema de comunicación celular. 

"Resumiendo se podría decir que tiene tres componentes: la señal, el receptor y la proteína. El primero es el estímulo exterior a la célula (que viene del de dentro o fuera del cuerpo), como por ejemplo el átomo de luz o una hormona. El segundo componente sería el propio receptor, algo así como el interfono que conecta el exterior de un piso con el interior. Y por último, estaría la proteína G, que vendría a ser la asistenta de la casa que, en función de la señal, hace una cosa u otra dentro del hogar", ejemplifica Ernest Giralt, coordinador del Programa de Química y Farmacología Molecular del Institut de Recerca Biomèdica (IRB Barcelona) y Catedrático de la UB.

En 1980 llegó el siguiente gran logro. Ya con la presencia de Kobilka, consiguieron aislar el gen encargado de codificar el receptor beta adrenérgico, cuya función principal es reconocer la presencia de adrenalina y hacer que la célula se contraiga más rápidamente.

Esto les llevó a darse cuenta de que existía toda una familia de receptores que se parecían mucho entre sí y funcionaban de la misma manera: los ahora conocidos como receptores acoplados a las proteínas G.

Detección de los sentidos y las hormonas

De esta manera, ahora se sabe que en el cuerpo humano hay miles de receptores de este tipo que están implicados en muchos procesos fisiológicos al ser mediadores de muchas moléculas como hormonas, proteínas, etc. Entre otras funciones, participan en la detección de muchos sentidos. Al igual que los ojos, la nariz y la boca tienen sensores para la luz, los olores y los sabores, en el interior del cuerpo también las células tienen sensores similares que le permiten conocer su entorno y adaptarse a nuevas situaciones.

El olor o la vista son la respuesta a sustancias químicas que hay en el ambiente. 

"Estas sustancias tienen una forma que es reconocida por el receptor y, una vez este detecta su presencia, cambia de estructura y eso a su vez es detectado por las proteínas G en el interior de la célula, lo que a su vez genera cambios que terminan traduciéndose en un olor, por ejemplo", explica Federico Mayor Menéndez, catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad Autónoma de Madrid, investigador del Centro de Biología Molecular Severo y presidente de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular.

Tal y como explica Mayor Menéndez, los descubrimientos de Lefkowitz hicieron posible identificar estos receptores a principios de los 80 para, posteriormente, desentrañar el mecanismo de señalización y regularización, es decir, su modo de actuación. "Fue Kobilka el que finalmente descubrió su estructura molecular [cuyos datos se publicaron en la revista Nature en 2011]. Se trata de una proteína serpentina que cruza siete veces la membrana celular, de ahí que coloquialmente se les diga receptores serpentina. Además, mostró su estructura cuando están activados y cuando están apagados, es decir, con y sin señal", explica este investigador que fue colega de Kobilka y discípulo de Lefkowitz entre 1985 y 1986, cuando estudió en su laboratorio, y que afirma "alegrarse enormemente por el reconocimiento".

Diana de medicamentos

Estas 'máquinas' moleculares son las dianas del 50% de los medicamentos actuales. "Por ejemplo, el tratamiento del asma está basado en fármacos contra estos receptores, lo mismo que la terapia contra la hipertensión o el formado por antiácidos", señala Mayor Menéndez.

Los receptores serpentina también participan en la detección y regulación de muchas hormonas, por ejemplo en la hormona luteinizante, una de las responsables de la menstruación, la oxitocina, cuyo papel es fundamental en el parto, o la vasopresina, que tiene relación con la constricción de los vasos y la tensión arterial.

"La contribución concreta de estos investigadores es más importante desde el punto de vista biológico que desde la química médica. Porque los fármacos que tienen por diana estos receptores habían sido descubiertos antes de su hallazgo, mediante prueba y error. Lo que sí que es posible es que la aportación de estos científicos contribuya podría permitir de cara al futuro una nueva manera de hacer las cosas, ahora se pueden desarrollar los fármacos de manera distinta. Es posible que se abra una nueva ventana de oportunidades", asegura Giralt.

Los investigadores premiados se repartirán los diez millones de coronas suecas con los que está dotado el premio (1.100.0000 euros).

Este galardón sucede a los ya conocidos esta misma semana de Medicina y Física, que han premiado, respectivamente, a los padres de la reprogramación celular, John P. Gurdon y Shinya Yamanaka, y a los pioneros de la física cuántica, Serge Haroche y David Wineland.

El año pasado, el Nobel de Química premió a Daniel Shechtman, del Instituto Israelí de Tecnología de Haifa, por su descubrimiento de los cuasicristales, estructuras atómicas construidas mediante mosaicos similares a los del mundo árabe, como los que adornan la Alhambra de Granada, pero que nunca se repiten a sí mismas. Es decir, no siguen el patrón de construcción de los cristales convencionales que forman estructuras simétricas.

El jueves y viernes de esta misma semana se darán a conocer dos de los galardones más esperados cada año, el de Literatura y de la Paz, respectivamente.

Fuente:

El Mundo Ciencia

2 de julio de 2012

6 cosas que dependen de la dopamina



riesgoDescubierta hace apenas medio siglo por los químicos suecos Arvid Carlsson y Nils-Åke Hillarp, la dopamina no sólo ha resultado ser el neurotransmisor responsable de las sensaciones placenteras. También está involucrada en la coordinación de los movimientos musculares, en la toma de decisiones y en la regulación del aprendizaje y la memoria. Sin ella no sentiríamos curiosidad ni motivación.

Personalidad. ¿Te consideras tímido? ¿Extrovertido? ¿Inseguro? ¿Valiente? De acuerdo con un estudio realizado por investigadores de la Clínica Universitaria Charité de Berlín y publicado en Nature Neuroscience en 2008, la cantidad de dopamina que contiene la amígdala cerebral de una persona podría definir si es tranquila y confiada en sí misma (baja concentración) o si es miedosa y con tendencia a sufrir estrés (alta concentración).

Sobrepeso. No a todos nos produce el mismo placer saborear un pastel de chocolate. Las personas obesas tienen menos receptores de dopamina en su cerebro y, por lo tanto, necesitan comer más cantidad para compensar ese déficit y sentir la misma satisfacción que el común de los mortales, según se desprende de un estudio publicado hace poco en la revista Science.

Pasión por el riesgo. Que en la adolescencia se corren más riesgos que en otras etapas de la vida es un hecho. Lo que no sabíamos hasta hace poco era que este comportamiento se puede atribuir a un aumento de la cantidad de dopamina en ciertas zonas del cerebro de los adolescentes que les hace equivocarse en sus expectativas y predecir resultados excesivamente “positivos” de sus acciones.

Cuestión de estatus. Usando técnicas de neuroimagen, los científicos han demostrado que cuanto más alto es el estatus social de una persona mayor es el número de receptores D2 de dopamina que hay en su cerebro y, por lo tanto, más motivada y satisfecha se siente.

Creatividad. Según un artículo publicado recientemente en PLoS ONE, las personas muy creativas tienen menos densidad de receptores D2 de dopamina en el tálamo, una zona del cerebro encargada de filtrar los estímulos que llegan a la corteza cerebral. Esto impide que se filtren algunas señales y aumenta el flujo de información hacia el cerebro, lo que permitiría establecer conexiones entre conceptos que a otros se les escapan.

Memoria. La dopamina también controla la duración de la memoria, es decir, si una información se conserva durante sólo 10 o 12 horas en el cerebro y desaparece, o si perdura por más tiempo. “Si creemos que lo que aprendemos es importante, la dopamina activa al hipocampo para que se archive”, explica Jorge Medina, investigador de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires y coautor del descubrimiento. “Si por el contrario lo que aprendemos no nos satisface, el recuerdo se diluye”.


Y además…


Fuente:

 

3 de abril de 2012

Los efectos hormonales del fútbol



mates-futbolDespués de jugar un partido de fútbol, los niveles de testosterona pueden aumentar hasta el 30 por ciento. Este efecto, que ya se había observado en hombres de países occidentales, podría ser universal, según indican los resultados de un estudio realizado con miembros del pueblo indígena Chimané y que se publica en la revista Proceedings of the Royal Society B.

Los Chimané (Bolivia) son una población de 15.000 personas repartidas en pequeñas localidades del Amazonas que viven de la agricultura y la caza. Sus habitantes sufren de diversas infecciones y enfermedades respiratorias y gastrointestinales, por lo que su sistema inmune está muy debilitado. A causa de esto los Chimané secretan menos testosterona. "Esta hormona es muy costosa energéticamente y además se piensa que interfiere con el sistema inmunológico", explica Benjamin Trumble, de la Universidad de Washington (Seattle, EEUU) y autor del estudio.


Los investigadores midieron los niveles de testosterona en los participantes en el estudio antes y después de que estos jugaran un partido de fútbol. Aunque los niveles de partida eran inferiores a los valores medios de los estadounidenses, al finalizar el juego estos se incrementaron en un 30 por ciento, una cantidad similar a la que otros estudios han medido en ciudadanos de EEUU. Además, los mayores goleadores del partido experimentaban los aumentos más significativos de testosterona. "Los resultados confirman que hay más factores explicando el pico hormonal que el mero hecho de participar en la competición", indica Trumble.
Este trabajo ayudará a entender los mecanismos de regulación hormonal a corto y medio plazo, y dará pistas sobre cómo tratar los problemas de baja producción de testosterona en personas mayores.

Fuente:

Muy Interesante

29 de diciembre de 2011

Científicos demuestran que obesidad mata neuronas en área del cerebro

Zona afectada es el hipotálamo, crucial en el control del apetito y gasto energético.


Cuál es el origen de la obesidad y por qué cuesta tanto bajar de peso, son preguntas que hace tiempo busca responder la ciencia. Ahora dos estudios independientes muestran que la respuesta podría estar en el efecto que produce la ingesta de grasa en nuestro cerebro: no sólo inflama sus tejidos, sino que mata neuronas en el hipotálamo, zona que se encarga precisamente de regular el hambre, entre otras múltiples funciones.

En el primer estudio, encabezado por Michael Schwartz, director del Centro de Diabetes y Obesidad de la U. de Washington, los científicos suministraron a un grupo de ratones una dieta con un 60% más de calorías y grasas que una normal, durante 20 semanas. A tres días de iniciada la dieta -y antes que los animales evidenciaran un aumento de peso o daño hepático- los roedores ya mostraban una inflamación en el hipotálamo. A la semana, en tanto, sus cerebros ya manifestaban evidencia de lesión o daño neuronal: es decir, pérdida o muerte de neuronas. También observaron una cicatrización similar a la que ocurre en infartos cerebrales o después de un traumatismo.

Comprobado el daño en los ratones, los investigadores sometieron a resonancias funcionales magnéticas a un grupo de 34 personas obesas y otras con peso normal. En los primeros, también encontraron evidencias de cicatrización e inflamación en el hipotálamo, incluso, a mayor obesidad, más cicatrización, lo que revela que allí hubo pérdida de neuronas.

Schwartz explicó a La Tercera que la pérdida de neuronas en el hipotálamo no significa daño cognitivo, "pues afecta en el control del peso corporal, pero no las funciones superiores del cerebro".

Aunque no conocen los reales alcances del daño neuronal en el hipotálamo -es materia de su próximo estudio- el especialista dice que sí está claro que las neuronas perdidas son las que, se supone, protegen a nuestro organismo del aumento de peso. Tampoco está claro si en las personas la inflamación y muerte neuronal es causa o consecuencia de la obesidad. Sólo en los animales pudo demostrarse que era su origen.

Hormona leptina

No es el único problema. El daño en el hipotálamo también provoca que esta zona realice una lectura errada de la hormona leptina, que es la encargada de informarle al cerebro la cantidad de grasa acumulada que hay en el resto del cuerpo. Cuando el hipotálamo funciona bien, el cerebro emite señales para que se detenga la ingesta de alimentos y según esto, regula el gasto calórico. Cuando no funciona bien -como ocurre en este caso- la señal de saciedad nunca llega.

Eso fue precisamente lo que probó el estudio realizado por investigadores de la U. de Harvard: el hipotálamo de los ratones obesos tenía problemas para leer la información proveniente de la leptina. En términos sencillos, morían las neuronas encargadas de recepcionar esa información y los ratones comían sin control, tal como ocurre en las personas con este mal.

Impulsividad

Según la neuróloga de la Clínica Alemana, María Isabel Behrens, aun cuando las neuronas en el hipotálamo están diferenciadas, es probable que una inflamación en esa zona provoque daño también en otras neuronas, como las que controlan el frío, el calor o los impulsos.

De hecho, se sabe que los obesos tienen intolerancia al calor y que tienen problemas para tomar decisiones, pues se dejan llevar por sus impulsos.

La académica de la U. de Chile, Andrea Slachevsky, comparte esta tesis y dice que estos nuevos datos podrían explicar por qué cuando un paciente obeso debe escoger entre un plato de ensalada y un pollo asado con papas fritas, escoge el segundo, aunque sea el más dañino. "Si tienen problemas con sus impulsos, elegirá el que más les guste, aunque sepa que le hace mal".

Fuente:

Diario La Tercera

20 de octubre de 2011

Rocía tu nariz con un poco de oxitocina para favorecer la economía


Hacer negocios con alguien, sobre todo si ese alguien es un desconocido, siempre tiene sus riesgos. Debemos depositar la confianza en alguien que, en el fondo, sólo persigue el máximo beneficio individual. Y la cuestión es que nosotros también buscamos lo mismo.

Así que la economía, concretamente la transacciones económicas, son una de las mayores fuentes de fricción social, pero también uno de los mayores alicientes para socializar, derribar prejuicios, romper barreras, aprender lenguas, etc.

El mayor engrasador de las relaciones es la oxitocina, así que la oxitocina tiene un papel muy importante en la economía. Un simple acto de generosidad financiera, por ejemplo, tal y como ocurre con una sonrisa o un pequeño gesto de deferencia, puede ocasionar la secreción de hormona oxitocina en el cerebro del receptor, y la oxitocina es la química que la evolución usa para hacer que los mamíferos se sientan bien entre ellos.

Funciona también en sentido contrario, tal y como apunta Matt Ridley:

Rociar oxitocina en las narices de estudiantes causará que confíen su dinero a extraños más fácilmente que aquellos que reciben un rocío de placebo. “La oxitocina es la firma fisiológica de la simpatía”, dice el neuroeconomista Paul Zak, quien conduce los experimentos, “y parece inducir un apego temporal a los otros.

Zak, en 2004, junto con Ernst Fehr, fue el responsable de uno de los experimentos más curiosos de la historia de la economía. Para llevarlo a cabo, usaron a 194 estudiantes varones de Zúrich (el experimento no puede hacerse con mujeres, no porque Zak sea un machista redomado, sino porque si la mujer está embarazada sin saberlo, la oxitocina podría inducir al parto).

Zak sometió a los participantes varones a dos juegos diferentes. El primero se llamo el juego de la confianza, y consistía en lo siguiente:

un jugador llamado el inversor recibe doce unidades monetarias y se le dice que si las otorga a otro jugador, el fiduciario, esa cantidad será cuadruplicada por el experimentador. Así que si da sus doce unidades, el fiduciario recibirá 48. El fiduciario puede retribuir con alguna cantidad al inversor, pero no tiene obligación de hacerlo. Así que el inversor se arriesga a perder todo su dinero, pero si confía en la generosidad del fiduciario, podría tener una buena ganancia. La pregunta es: ¿cuánto dinero entregará el inversor? Los resultados fueron sorprendentes. Los inversores que fueron rociados con oxitocina en la nariz antes del experimento entregaron 17 % más dinero que los que fueron rociados con solución salina, y la transferencia media subió de ocho a diez unidades. Los inversores con oxitocina son más de dos veces más proclives a dar las doce unidades que los sujetos controles.

El segundo juego era idéntico al primero salvo por una cuestión: la generosidad de los fiduciarios era decidida aleatoriamente. Entonces la oxitocina no mostraba un efecto en los inversores. Es decir, que la oxitocina no es que nos invite al riesgo sino que aumenta específicamente la confianza. Algo que está bastante débil en la economía actual. ¿Quizá necesitemos un chute de oxitocina?

Si el progreso económico humano ha incluido un momento crucial en el que los seres humanos aprendieron a tratar con extraños como compañeros de comercio en vez de enemigos, la oxitocina tuvo sin lugar a dudas un papel fundamental.

Vía | El optimista racional de Matt Ridley

Fuente:

Xakata Ciencia

19 de abril de 2011

Estudio: El uso de Twitter y Facebook libera la misma hormona presente en los besos y abrazos

En la búsqueda de una conexión entre la hormona oxitocina y el uso de redes sociales, desde hace un año el Dr. Paul J. Zak (profesor de la Claremont Graduate University) realiza una serie de estudios a muestras de sangre tomadas a usuarios antes y después de usar sitios como Facebook y Twitter. Sorprendentemente los resultados confirmaron un alto índice de la “hormona de los abrazos o apego” con el uso de estos sitios.

La oxitocina actúa como neurotransmisor en el cerebro y está relacionada con los patrones sexuales y la conducta maternal (o paternal), además de provocar relajación, vinculación y sensación de felicidad. Entre otras cosas, es generada por caricias, besos y abrazos principalmente en las mujeres. Según la investigadora sueca Uvnäs-Moberg, los hombres necesitan ser tocados dos o tres veces más a menudo que las mujeres, para mantener el mismo nivel de oxitocina.

El experimento inicial de Zak fue diseñado para examinar el papel más amplio de la hormona en la emoción humana y la percepción. Encontró que las personas con mayores niveles de oxitocina eran más propensas a donar a la caridad y responder positivamente a los anuncios de servicio público.

Adam Penenberg de FastCompany se ofreció para este estudio y encontró que su oxitocina se disparó un 13% después de conversar e intercambiar ideas con sus amigos en Twitter y Facebook, mientras su cortisol y ACTH (hormonas ligadas al estrés) disminuyeron casi un 11%. Sin embargo hacen falta más estudios formales para comprobar estos resultados antes de afirmar que Facebook es lo mejor para el bienestar emocional desde los antidepresivos y la terapia.

Las redes sociales pueden ser una experiencia que a muchos los libere del estrés en el trabajo, pero para otros resulta estresante cuando alcanzan n-cantidad de amigos y se presionan por “ser ingeniosos” en sus actualizaciones – cumpliendo con la necesidad humana de pertenecer y ser aceptados.

Tomado de:

Fayer Wayer

google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0