Latest Posts:

Mostrando las entradas con la etiqueta popper. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta popper. Mostrar todas las entradas

23 de septiembre de 2018

Las pseudociencias más famosas (y que debes evitar)

¿Qué es pseudociencia? ¿Es el feng shui una pseudociencia? ¿Y la hipnosis? ¿Distinguir entre ciencia y pseudociencia te resulta confuso? Hoy te ayudamos con esta clasificación.


Los negacionistas del cambio climático son acusados de practicar la pseudociencia, como lo son los creacionistas del diseño inteligente, los astrólogos, los ufólogos, los parapsicólogos, los practicantes de medicina alternativa y, a menudo, cualquiera que se aleje de la corriente científica principal. El problema reside en el límite entre la ciencia y la pseudociencia; pues, de hecho, está notoriamente cargado de desacuerdos definitorios porque las categorías son demasiado amplias y confusas, y el término "pseudociencia" está sujeto al abuso adjetivo contra cualquier afirmación que a uno le disguste por algún motivo.

Muchos científicos reconocen que los límites que separan ciencia y pseudociencia son mucho más difusos y permeables de lo que muchos quieren creer.

Fue el filósofo austríaco Karl Popper quien identificó lo que llamó "el problema de la demarcación" como objeto de encontrar un criterio para distinguir entre ciencia empírica, como la exitosa prueba de 1919 de la teoría general de la relatividad de Einstein y la pseudociencia, como las teorías de Sigmund Freud, cuyos seguidores solo buscaban confirmar la evidencia ignorando los casos que no se confirmaban. La teoría de Einstein podría haberse falsificado si los datos del eclipse solar no mostraran la desviación necesaria de la luz de las estrellas doblada por el campo gravitacional del sol. Las teorías de Freud, sin embargo, nunca podrían refutarse, porque no había ninguna hipótesis comprobable abierta a la refutabilidad. Por lo tanto, Popper declaró que la "falsabilidad" es el último criterio de demarcación. Las teorías científicas no son falsables.

El problema es que muchas ciencias no son infalsificables, como la teoría de cuerdas, la neurociencia que rodea la conciencia, los grandes modelos económicos y la hipótesis extraterrestre. Respecto a esto último, a falta de buscar en cada planeta alrededor de cada estrella en cada galaxia en el cosmos, ¿podríamos decir alguna vez con certeza que los extraterrestres no existen?

Según el historiador de la ciencia de la Universidad de Princeton Michael D. Gordin "Nadie en la historia del mundo se ha autoidentificado como pseudocientífico. No hay persona que se despierte por la mañana y piense a sí mismo: Me dirigiré a mi pseudolaboratorio y realizaré algunos pseudoexperimentos para tratar de confirmar mis pseudoteorías con pseudofactores".

Sin embargo,
la pseudociencia confunde al público sobre la naturaleza de la teoría evolutiva y cómo se desarrolla la ciencia.

Aquí, quizás, hay un criterio práctico para resolver el problema de la demarcación: la conducta de los científicos reflejada en la utilidad pragmática de una idea. Es decir, ¿la nueva idea genera interés por parte de los científicos que trabajan para su adopción en sus programas de investigación, produce nuevas líneas de investigación, conduce a nuevos descubrimientos o influye en las hipótesis, modelos, paradigmas o visiones del mundo existentes? Si la respuesta es no, es probable que sea una pseudociencia.

Así las cosas, la ciencia es un conjunto de métodos destinados a probar hipótesis y construir teorías. Si una comunidad de científicos adopta activamente una nueva idea y si esa idea se extiende a través de distintos campos y se incorpora a la investigación que produce conocimiento útil reflejado en presentaciones, publicaciones y especialmente nuevas líneas de investigación, lo más probable es que sea ciencia.

Determinar qué es pseudociencia no es discriminatorio, sino que no hacerlo es perjudicial para la sociedad.

Pero, ¿cómo identificar ciencia vs. pseudociencia?


1 de mayo de 2011

Karl Popper: ¿Cuál es la diferencia entre ciencia y pseudociencia?

Diferenciar entre ciencia y pseudociencia es difícil. De hecho, una persona que no se ha formado y leído al respecto puede encontrarse con dificultades a la hora de determinar si una práctica es científica o pseudocientífica. Ambas cosas han coexistido durante milenios, y en muchos casos han estado ligadas a las mismas personas. En la Antigua Roma, Ptolomeo, que posiblemente sea el científico más influyente que dejó el imperio, explicó la reflexión y refracción de la luz e inventó el sistema de latitud y longitud para pintar mapas, pero también fue la persona que definió el horóscopo y los doce signos del zodiaco.

Con el paso de los siglos, ciencias y pseudociencias se fueron separando. Uno de los ejemplos más claros de esta escisión la encontramos en el siglo XVII, cuando después de la revolución en la química de Robert Boyle, la ciencia abandonó la alquimia. Pero aún así, la ciencia no se podía desmarcar por completo de la pseudociencia, ya que nadie había escrito claramente cuáles eran las reglas del juego.



I: Karl Popper

Karl Popper, uno de los filósofos por excelencia del siglo XX, escribió en 1934 Logik der Forschung (La lógica de la investigación científica), el primer libro que exponía una diferencia clara entre lo que es una ciencia y lo que es una pseudociencia. Para Popper, la clave está en la falsabilidad y en el hecho de que las teorías científicas nunca pueden ser verificadas completamente.

El falsacionismo había sido descrito por David Hume dos siglos antes junto al verificacionismo. El verificacionismo exponía que ante una hipótesis se van añadiendo hechos observables que corroboren la hipótesis, de tal modo que muchos hechos observables terminan consolidando la hipótesis como teoría verificada. En cambio el falsacionismo al que recurre Popper, ante una hipótesis, busca hechos observables que puedan refutar la hipótesis, de tal modo que si no puede encontrarse ninguno que la refute se mantiene como teoría válida.

No importa cuantos ejemplos de cisnes blancos hayamos podido observar, esto no justifica la conclusión de que todos los cisnes son blancos

– Karl Popper

Popper escribió su libro tras observar dos grandes ideas propuestas décadas antes. Por un lado está el psicoanálisis de Sigmund Freud y por otro la teoría de la relatividad de Albert Einstein. Freud y todos sus seguidores, para sustentar el psicoanálisis habían recurrido al verificacionismo hasta extremos que cualquier comportamiento humano era una confirmación más que añadir a su teoría. Por la contra Einstein había recurrido al falsacionismo, prediciendo hechos que no eran contemplados por ninguna teoría anterior, como la desviación de la luz al verse sometida a un campo gravitatorio, y que de no haber sido comprobados en la primera observación su teoría habría sido refutada por completo.

La división establecida por Karl Popper no se puede considerar como definitiva, y de hecho aún a día de hoy no existe ningún criterio universal para establecer la diferenciación entre ciencias y pseudociencias, pero sí que supuso un comienzo para saber qué tenemos que pedir a una ciencia para poder llamarla así. Tras él, otros filósofos y científicos, como Richard Feynman, Mario Bunge, Ludwig Wittgenstein o Carl Sagan han escrito muchas otras pautas para determinar cómo identificar a las pseudociencias y ponerlas al otro lado de la línea divisiora entre lo científico y lo demás.

El juego de la ciencia no tiene final. Aquel que decida un día que las hipótesis científicas no necesitan ninguna prueba más y que pueden ser admitidas como definitivamente verificadas, que se retire del juego

– Karl Popper

Fuentes y más información:

google.com, pub-7451761037085740, DIRECT, f08c47fec0942fa0